الريــم
01-09-2023, 03:30 PM
Ten?an su cuartel general en la provincia de Barcelona, pero hac?an entregas por toda Europa. En furgonetas, mediante servicios de paqueter?a aparentemente legal, como si fuesen una gran plataforma comercial. Plantaban la marihuana en naves industriales de Catalu?a o Asturias. Desde all? realizaban env?os masivos en furgonetas a pa?ses como Holanda, Italia, Francia o Portugal. Se convirtieron en una de las mafias m?s potentes del tr?fico de cannabis de todo el continente. Cultivaban "de una manera que hasta ahora no hab?amos visto", reconoc?a posteriormente Toni Salleras, un inspector de Mossos que estuvo en la investigaci?n. Fue precisamente un env?o a Francia el que puso a la polic?a en alerta.
El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, ha accedido al escrito de acusaci?n de Fiscal?a del juicio que sentar? a 63 personas en el banquillo, acusados de haber montado uno de los mayores entramados de tr?fico de marihuana de la historia nuestro pa?s. La polic?a les incaut? casi 20.000 plantas. Los investigadores calculan que habr?an obtenido un beneficio de m?s de dos millones de euros. Pero ya hab?an colocado producto por m?s de tres millones de euros. Ahora, sus miembros se enfrentan a condenas de entre 7 y 13 a?os.
Esta mafia, aunque ten?a sede en Espa?a y operaba en suelo europeo, funcionaba como una gran empresa china. De hecho, el propio portavoz de Mossos las calific? tras las detenciones de "auténticas f?bricas de marihuana" por el volumen de negocio que manejaban y por su funcionamiento, idéntico al de cualquier otra factor?a de mercanc?a legal. De China proceden 61 de los 63 procesados. Eran conocidos como la Bang de Fuji?n. Bang es el nombre que se les da a las mafias en China. Fuji?n, la zona de la que proceden, la regi?n m?s oriental del gigante asi?tico.
Los tres pelda?os
Esta red criminal contaba con una organizaci?n de jerarqu?a piramidal, dividida en tres pelda?os. El m?s alto estaba ocupado por los jefes; cerebros de las operaciones, inversores y empresarios que usaban empresas pantalla para llevar a cabo las transacciones. También estaban incluidos otros miembros de confianza especializados en el cultivo de marihuana. Los denominados coloquialmente como "maestros". Eran expertos en el cultivo del cannabis que se limitaban a elegir las variedades a plantar y a valorar la calidad del producto. Recib?an un trato y un sueldo especial, y ?nicamente est?n en contacto con la droga durante el periodo de tiempo necesario para evaluarla y realizar los pesajes, limitando de esta forma su riesgo de ser detectados "in fraganti".
En el segundo pelda?o estaba el equipo log?stico. Su sueldo era de entre 2.000 y 2.500 euros; sus funciones, muy diversas: b?squeda y adquisici?n de las naves, compra del material necesario para las plantaciones y la distribuci?n del material resultante, realizaci?n de env?os de la droga o compras para el abastecimiento de los integrantes de la organizaci?n existentes en el interior de las naves. Adem?s, percib?an una serie de suplementos para la realizaci?n de "trabajos" que entra?asen cierto riesgo, tales como el transporte de las sustancias hasta los puntos de guarda o distribuci?n.
No obstante, alguno de estos operarios vio la posibilidad de progresar a espaldas de la organizaci?n. Es el caso de Melon, el alias de uno de los detenidos, que como no ocupaba la posici?n jer?rquica m?s alta en la organizaci?n, decidi? convertirse en emprendedor por su cuenta y levantar varias plantaciones en varias zonas de Espa?a a espaldas de esta mafia. Melon fue uno de los sujetos que la polic?a observ? entrar y salir varias veces de una de las plantaciones.
En el escal?n m?s bajo se encontraban los denominados "jardineros". Es el nivel m?s b?sico de la organizaci?n y se trata de personal cuya tarea es la de permanecer durante per?odos de tiempo en el interior de las naves con el fin de controlar y gestionar el correcto cultivo, con las instrucciones que hubieran dado previamente los 'xiaolin'. Los jardineros, todos ellos procedentes de China, son los peor pagados y raras veces salen de la nave en la que est?n cuidando las plantas.
Toda esa organizaci?n, a su vez, estaba dividida en tres ramificaciones. Este sistema de organizaci?n era clave, seg?n la Fiscal?a, para el éxito del entramado: "Con la separaci?n en diferentes facciones, en la que cada una de ellas gestiona diferentes producciones de marihuana y de las cuales se nutre la gran demanda europea, funcionaba cada grupo a modo de cooperativa de trabajo compartido, en la que las personas que pertenecen a ellos son considerados socios, inversores y trabajadores, facilitando as? participaciones permutadas por los trabajos prestados. De esta forma, si cae una de estas facciones se pueden mantener activas las dem?s sin demasiado perjuicio, ya que estas funcionan de manera individualizada", dice el escrito.
Un paquete abandonado
El env?o que levant? la liebre fue interceptado cuando iba a emprender camino a Par?s, en una oficina de Seur de Barcelona. Era un paquete con apariencia normal, pero en su interior escond?a 17,4 kilos de marihuana. Ese mismo d?a se intervino otro fardo, este de algo m?s de 8 kilos de peso, que ten?a como destino Roma. Pocos d?as después, el 7 de enero de 2020, incautaron otros 6,3 kilos de cogollos que emprend?an rumbo a Lisboa, y 18,3 que iban a ser repartidos entre Ruman?a y Reino Unido.
El 14 de enero, la polic?a recogi? de la v?a p?blica, en Barcelona, un paquete que aparentemente hab?a sido abandonado. También pesaba 6,3 kilos, el mismo peso que el paquete que fue incautado antes de llegar a Portugal. En su interior conten?a marihuana. Los Mossos d'Esquadra ya ten?an, para entonces, elementos para actuar. Lo hicieron el 20 de enero, cuando la Unitat d’Investigaci? B?sica de Manresa (CME) desmantel?, en una nave industrial del Pol?gono Santa Anna de Sant Fruit?s del Bages (Barcelona), un cultivo que albergaba un total de 858 plantas de marihuana, 2800 esquejes preparados para ser plantados y numerosa aparatolog?a necesaria para este tipo de plantaciones.
Las intervenciones de las sustancias y entradas a naves industriales se produjeron durante todo el 2020. A medida que algunas plantaciones iban cayendo, los otros miembros de la organizaci?n iban tomando medidas para borrar rastros y quedar desvinculados. As?, el d?a 23 de julio de 2020, tras ser desmantelado un cultivo en una nave industrial de Canovelles (Barcelona), se produjeron una serie de llamadas entre dos de los jefes, en las que comentaron lo que hab?a pasado y las instrucciones que hab?an recibido del jefe principal. En las llamadas, acuerdan borrar el contacto de “Konglong”, uno de los detenidos. Esa misma noche, se reunieron en un restaurante chino de Santa Coloma de Gramenet dicho jefe, su madre y otros 5 inversores, para decidir c?mo seguir con el negocio.
Jefe Melon
Tras estas reuniones, se iban produciendo cambios en las organizaciones. Algunos elementos llegaban, otros lo dejaban. Alguno ca?an detenidos y otros promocionaban, ocupando esos puestos vacantes. Era el caso del mencionado Melon, que estaba a punto de ser ascendido del pelda?o log?stico al de jefe. Melon empez? con las plantaciones en Catalu?a, pero su destreza y aptitudes para mandar, hicieron que también fuese destinado a Asturias para gestionar algunas de las plantaciones. Finalmente acab? gestionando él solo cinco plantaciones.
También se encargaba de localizar a testaferros, quienes, por una cantidad econ?mica indeterminada, ced?an sus identidades a Melon, con el fin de que él u otros miembros de la organizaci?n pudieran hospedarse, alquilar veh?culos, adquirir billetes de transporte, etc. Por ejemplo, si necesitaba un NIE, Melon se lo ped?a a uno de estos testaferros y le pagaba por él 500 euros. Acabada la transacci?n, el testaferro era enviado a comisar?a para que denunciase la pérdida del documento.
En una de las llamadas intervenidas, Melon le explicaba a su colaborador m?s cercano que estuvo reunido con uno de los jefes y que este "le hab?a pedido que invirtiese en el negocio, porque él se iba a ir pronto y le hab?a propuesto que ocupase su posici?n en la zona de Barcelona. Por ello, uno de los jefes estaba preparando el relevo: "le estaba ense?ando para que sepa c?mo actuar y hablar con la gente mayor, refiriéndose a la gente que est? por encima", dice el escrito fiscal.
El ascenso definitivo no lleg? a culminar. La organizaci?n fue cayendo merced a varias operaciones combinadas de los Mossos d'Esquadra y la Polic?a Nacional, que han trabajado en esta operaci?n en colaboraci?n con diversas fuerzas policiales europeas, como la francesa o la portuguesa. Ahora est?n todo imputados, aunque hay al menos una decena de miembros de esta mafia que siguen huidos y en paradero desconocido. Para los que hay encarcelados, que son mayor?a, se piden condenas que llegan hasta los 13 a?os de c?rcel.
No ha sido esta, no obstante, la ?nica operaci?n policial en suelo espa?ol contra cultivadores chinos de marihuana. Recientemente, el pasado 2 de enero, la Polic?a Nacional desmantel? una organizaci?n criminal china en Toledo dedicada a la plantaci?n de marihuana y detuvo a 34 personas. Solo un mes antes, en diciembre, las fuerzas de Seguridad también desarticularon otra red de la misma nacionalidad que, adem?s de prostituir a mujeres en Guadalajara, realizaba env?os de droga a diferentes puntos de Espa?a y Europa.
El cultivo y tr?fico de marihuana se trata de una pr?ctica delicitiva que ofrece grandes beneficios en periodos de tiempo muy cortos. Al tratarse de plantaciones de interior, se pueden llegar a recoger hasta 4 cosechas en un a?o (frente a una ?nica cosecha que se obtiene en los cultivos de exterior). El kilo de marihuana oscila entre los 2 y los 5 mil euros. Melon aseguraba en las conversaciones intervenidas que él podr?a sacar unos 20 mil euros de beneficio cada 3 meses (que es lo que dura el ciclo de una cosecha). La organizaci?n lleg? a colocar varias toneladas de marihuana. Estas altas rentabilidades est?n llamando cada vez m?s la atenci?n de redes delictivas chinas, dispuestas a hacerse con una porci?n del pastel del narcotr?fico que, hasta la fecha, ha estado casi en exclusiva en manos de clanes espa?oles.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/jefe-melon-maestros-marihuana-funcionaba-80886408)
El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, ha accedido al escrito de acusaci?n de Fiscal?a del juicio que sentar? a 63 personas en el banquillo, acusados de haber montado uno de los mayores entramados de tr?fico de marihuana de la historia nuestro pa?s. La polic?a les incaut? casi 20.000 plantas. Los investigadores calculan que habr?an obtenido un beneficio de m?s de dos millones de euros. Pero ya hab?an colocado producto por m?s de tres millones de euros. Ahora, sus miembros se enfrentan a condenas de entre 7 y 13 a?os.
Esta mafia, aunque ten?a sede en Espa?a y operaba en suelo europeo, funcionaba como una gran empresa china. De hecho, el propio portavoz de Mossos las calific? tras las detenciones de "auténticas f?bricas de marihuana" por el volumen de negocio que manejaban y por su funcionamiento, idéntico al de cualquier otra factor?a de mercanc?a legal. De China proceden 61 de los 63 procesados. Eran conocidos como la Bang de Fuji?n. Bang es el nombre que se les da a las mafias en China. Fuji?n, la zona de la que proceden, la regi?n m?s oriental del gigante asi?tico.
Los tres pelda?os
Esta red criminal contaba con una organizaci?n de jerarqu?a piramidal, dividida en tres pelda?os. El m?s alto estaba ocupado por los jefes; cerebros de las operaciones, inversores y empresarios que usaban empresas pantalla para llevar a cabo las transacciones. También estaban incluidos otros miembros de confianza especializados en el cultivo de marihuana. Los denominados coloquialmente como "maestros". Eran expertos en el cultivo del cannabis que se limitaban a elegir las variedades a plantar y a valorar la calidad del producto. Recib?an un trato y un sueldo especial, y ?nicamente est?n en contacto con la droga durante el periodo de tiempo necesario para evaluarla y realizar los pesajes, limitando de esta forma su riesgo de ser detectados "in fraganti".
En el segundo pelda?o estaba el equipo log?stico. Su sueldo era de entre 2.000 y 2.500 euros; sus funciones, muy diversas: b?squeda y adquisici?n de las naves, compra del material necesario para las plantaciones y la distribuci?n del material resultante, realizaci?n de env?os de la droga o compras para el abastecimiento de los integrantes de la organizaci?n existentes en el interior de las naves. Adem?s, percib?an una serie de suplementos para la realizaci?n de "trabajos" que entra?asen cierto riesgo, tales como el transporte de las sustancias hasta los puntos de guarda o distribuci?n.
No obstante, alguno de estos operarios vio la posibilidad de progresar a espaldas de la organizaci?n. Es el caso de Melon, el alias de uno de los detenidos, que como no ocupaba la posici?n jer?rquica m?s alta en la organizaci?n, decidi? convertirse en emprendedor por su cuenta y levantar varias plantaciones en varias zonas de Espa?a a espaldas de esta mafia. Melon fue uno de los sujetos que la polic?a observ? entrar y salir varias veces de una de las plantaciones.
En el escal?n m?s bajo se encontraban los denominados "jardineros". Es el nivel m?s b?sico de la organizaci?n y se trata de personal cuya tarea es la de permanecer durante per?odos de tiempo en el interior de las naves con el fin de controlar y gestionar el correcto cultivo, con las instrucciones que hubieran dado previamente los 'xiaolin'. Los jardineros, todos ellos procedentes de China, son los peor pagados y raras veces salen de la nave en la que est?n cuidando las plantas.
Toda esa organizaci?n, a su vez, estaba dividida en tres ramificaciones. Este sistema de organizaci?n era clave, seg?n la Fiscal?a, para el éxito del entramado: "Con la separaci?n en diferentes facciones, en la que cada una de ellas gestiona diferentes producciones de marihuana y de las cuales se nutre la gran demanda europea, funcionaba cada grupo a modo de cooperativa de trabajo compartido, en la que las personas que pertenecen a ellos son considerados socios, inversores y trabajadores, facilitando as? participaciones permutadas por los trabajos prestados. De esta forma, si cae una de estas facciones se pueden mantener activas las dem?s sin demasiado perjuicio, ya que estas funcionan de manera individualizada", dice el escrito.
Un paquete abandonado
El env?o que levant? la liebre fue interceptado cuando iba a emprender camino a Par?s, en una oficina de Seur de Barcelona. Era un paquete con apariencia normal, pero en su interior escond?a 17,4 kilos de marihuana. Ese mismo d?a se intervino otro fardo, este de algo m?s de 8 kilos de peso, que ten?a como destino Roma. Pocos d?as después, el 7 de enero de 2020, incautaron otros 6,3 kilos de cogollos que emprend?an rumbo a Lisboa, y 18,3 que iban a ser repartidos entre Ruman?a y Reino Unido.
El 14 de enero, la polic?a recogi? de la v?a p?blica, en Barcelona, un paquete que aparentemente hab?a sido abandonado. También pesaba 6,3 kilos, el mismo peso que el paquete que fue incautado antes de llegar a Portugal. En su interior conten?a marihuana. Los Mossos d'Esquadra ya ten?an, para entonces, elementos para actuar. Lo hicieron el 20 de enero, cuando la Unitat d’Investigaci? B?sica de Manresa (CME) desmantel?, en una nave industrial del Pol?gono Santa Anna de Sant Fruit?s del Bages (Barcelona), un cultivo que albergaba un total de 858 plantas de marihuana, 2800 esquejes preparados para ser plantados y numerosa aparatolog?a necesaria para este tipo de plantaciones.
Las intervenciones de las sustancias y entradas a naves industriales se produjeron durante todo el 2020. A medida que algunas plantaciones iban cayendo, los otros miembros de la organizaci?n iban tomando medidas para borrar rastros y quedar desvinculados. As?, el d?a 23 de julio de 2020, tras ser desmantelado un cultivo en una nave industrial de Canovelles (Barcelona), se produjeron una serie de llamadas entre dos de los jefes, en las que comentaron lo que hab?a pasado y las instrucciones que hab?an recibido del jefe principal. En las llamadas, acuerdan borrar el contacto de “Konglong”, uno de los detenidos. Esa misma noche, se reunieron en un restaurante chino de Santa Coloma de Gramenet dicho jefe, su madre y otros 5 inversores, para decidir c?mo seguir con el negocio.
Jefe Melon
Tras estas reuniones, se iban produciendo cambios en las organizaciones. Algunos elementos llegaban, otros lo dejaban. Alguno ca?an detenidos y otros promocionaban, ocupando esos puestos vacantes. Era el caso del mencionado Melon, que estaba a punto de ser ascendido del pelda?o log?stico al de jefe. Melon empez? con las plantaciones en Catalu?a, pero su destreza y aptitudes para mandar, hicieron que también fuese destinado a Asturias para gestionar algunas de las plantaciones. Finalmente acab? gestionando él solo cinco plantaciones.
También se encargaba de localizar a testaferros, quienes, por una cantidad econ?mica indeterminada, ced?an sus identidades a Melon, con el fin de que él u otros miembros de la organizaci?n pudieran hospedarse, alquilar veh?culos, adquirir billetes de transporte, etc. Por ejemplo, si necesitaba un NIE, Melon se lo ped?a a uno de estos testaferros y le pagaba por él 500 euros. Acabada la transacci?n, el testaferro era enviado a comisar?a para que denunciase la pérdida del documento.
En una de las llamadas intervenidas, Melon le explicaba a su colaborador m?s cercano que estuvo reunido con uno de los jefes y que este "le hab?a pedido que invirtiese en el negocio, porque él se iba a ir pronto y le hab?a propuesto que ocupase su posici?n en la zona de Barcelona. Por ello, uno de los jefes estaba preparando el relevo: "le estaba ense?ando para que sepa c?mo actuar y hablar con la gente mayor, refiriéndose a la gente que est? por encima", dice el escrito fiscal.
El ascenso definitivo no lleg? a culminar. La organizaci?n fue cayendo merced a varias operaciones combinadas de los Mossos d'Esquadra y la Polic?a Nacional, que han trabajado en esta operaci?n en colaboraci?n con diversas fuerzas policiales europeas, como la francesa o la portuguesa. Ahora est?n todo imputados, aunque hay al menos una decena de miembros de esta mafia que siguen huidos y en paradero desconocido. Para los que hay encarcelados, que son mayor?a, se piden condenas que llegan hasta los 13 a?os de c?rcel.
No ha sido esta, no obstante, la ?nica operaci?n policial en suelo espa?ol contra cultivadores chinos de marihuana. Recientemente, el pasado 2 de enero, la Polic?a Nacional desmantel? una organizaci?n criminal china en Toledo dedicada a la plantaci?n de marihuana y detuvo a 34 personas. Solo un mes antes, en diciembre, las fuerzas de Seguridad también desarticularon otra red de la misma nacionalidad que, adem?s de prostituir a mujeres en Guadalajara, realizaba env?os de droga a diferentes puntos de Espa?a y Europa.
El cultivo y tr?fico de marihuana se trata de una pr?ctica delicitiva que ofrece grandes beneficios en periodos de tiempo muy cortos. Al tratarse de plantaciones de interior, se pueden llegar a recoger hasta 4 cosechas en un a?o (frente a una ?nica cosecha que se obtiene en los cultivos de exterior). El kilo de marihuana oscila entre los 2 y los 5 mil euros. Melon aseguraba en las conversaciones intervenidas que él podr?a sacar unos 20 mil euros de beneficio cada 3 meses (que es lo que dura el ciclo de una cosecha). La organizaci?n lleg? a colocar varias toneladas de marihuana. Estas altas rentabilidades est?n llamando cada vez m?s la atenci?n de redes delictivas chinas, dispuestas a hacerse con una porci?n del pastel del narcotr?fico que, hasta la fecha, ha estado casi en exclusiva en manos de clanes espa?oles.
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