الريــم
12-29-2022, 02:23 PM
Es la una de la tarde cuando la barquilla del ‘Raimat’ toca tierra, bueno, m?s bien toca hierba, en una finca perdida entre las monta?as de Sant Agust?. Un momento tan hist?rico como discreto. El ‘Raimat’ y sus dos ocupantes, Miquel Mesegué y ?ngel Aguirre, son los primeros en cruzar en globo aerost?tico el canal de Ibiza. Los primeros en unir, en ese dieciochesco medio de transporte, la Pen?nsula con las islas, explican los aventureros poco después de aterrizar en Ibiza, con la inmensa tela gris casi recogida. Un instante al que s?lo asisten ellos, su equipo de tierra en Ibiza, la due?a de la finca en la que han aterrizado y Diario de Ibiza, del grupo Prensa ibérica.
Una gesta con la que ambos, socios fundadores de Globus Kon-Tiki, llevaban m?s de veinte a?os so?ando. "Pero nunca, por disponibilidad o por el tiempo, pod?a ser", comenta Mesegué. El vuelo comenz? a fraguarse pocos d?as antes de Navidad: "El jueves de la semana pasada vimos que hab?a muy buenos pron?sticos". Sin embargo, aunque la meteorolog?a se lo pon?a en bandeja y ten?an globos libres, ambos eran conscientes de que estas son fechas complicadas, en las que la gente tiene compromisos o quiere estar en familia. Justo después de Navidad vieron que el d?a bueno era el 28 —"el 29 ya entra otro viento y no se pod?a"— y decidieron tirar hacia adelante.
As?, al amanecer, el ‘Raimat’ iniciaba ese vuelo pionero alz?ndose sobre el pe??n de Ifach. En un principio, relatan, la idea era salir desde Dénia, pero al comprobar el viento a las diferentes alturas —"una cosa es volar a cien metros, otra a mil, y el viento va variando con la altura"— se dieron cuenta de que aunque Dénia est? m?s cerca de Ibiza, desde Calpe, unos 35 kil?metros m?s al sur, pod?an encarar mejor la traves?a, que comenzaba a las ocho y media de la ma?ana, con la barquilla despeg?ndose del suelo y Mesegué y Aguirre viviendo los primeros instantes del esperado vuelo. Su equipo de tierra en Calpe, Josep Centellas y Salvador Mateu, les deseaban suerte y el popular meteor?logo Francesc Mauri compart?a en sus redes un v?deo del despegue y les hac?a una recomendaci?n, no exenta de guasa: "No os paséis de largo, que la isla es peque?ita".
Cuatro horas y media en las nubes
Empezaban, as?, cuatro horas y media de vuelo sobre el mar. Comprobando la temperatura —"quemando m?s gas para subir, quemando poco para mantenerse y dej?ndolo escapar para bajar poco a poco"—, controlando los vientos y contemplando el paisaje, que, elev?ndose, "va dejando de serlo para convertirse en mapa", como dec?a Ram?n J. Sender. Y manteniéndose en contacto, en todo momento, con la torre de control correspondiente: la del aeropuerto de Alicante, primero; las de los aer?dromos de Valencia y Palma, después, y, ya por ?ltimo, la torre del de Eivissa. "Previamente se env?a un plan de vuelo, para pedir autorizaci?n", explican los aventureros, que durante la traves?a, avistando ya tierra ebusitana, colgaron una foto sobrevolando un mar de peque?as nubes. "Siempre hay algo de tiempo libre para disfrutar", afirma Mesegué, sorprendido por la calma del trayecto. "Ha sido mucho mejor de lo que esper?bamos", recalca. Un despegue suave y una traves?a apacible sobre el mar, donde la falta de monta?as reduce los cambios en el viento, detallan.
Mientras ellos sueltan y dan gas a necesidad, en tierra, pendientes del teléfono y del cielo, aguardan Pep Reig y Jordi Gibert. Cogieron un ferry desde Barcelona la noche antes y llegaron a la isla, con dos remolques, casi a la misma hora en la que el ‘Raimat’ alzaba el vuelo al otro lado del Canal de Eivissa. Les acompa?a José Ram?n Mancebo, de Ibiza en Globo, que conoce bien la isla y los puntos en los que aterrizar. ?l mismo ha sacado su globo a volar horas antes, también al amanecer, y les ha avisado de que hab?a un poco niebla, pero despej?ndose.
Una hora antes de que el ‘Raimat’ toque tierra su oronda figura se puede ver, recortada en el cielo, desde es Cubells. La costa suroeste era, desde el primer momento, el objetivo de los pilotos, aunque el punto exacto de aterrizaje depende del viento y de las posibilidades, ya que en la zona hay mucho bosque, explica Gibert.
"?Est?n a la vista!", exclama el responsable del equipo de Ibiza mientras el veh?culo en el que llevan desde primera hora de la ma?ana pendientes del globo, se adentra por un estrecho camino que conduce a una finca perdida entre las monta?as de Sant Agust?. Entre el pueblo, sobre cuya iglesia ha podido verse minutos antes, y el popular Festival Club. "Hemos aterrizado junto a una casa", explica Mesegué, riendo al recordar la bienvenida de la propietaria, una mujer originaria de Suiza con la que, incluso, se han hecho fotos. Y con el globo, obviamente, que media hora después est? ya recogido. "Tenemos bastante ma?a", bromean los pilotos, que hab?an preparado el ‘Raimat’, con capacidad para ocho personas, de una forma algo especial para este viaje.
Para empezar, iban s?lo ellos dos. Al ser una traves?a larga, deb?an cargar m?s bidones de gas, de manera que el peso que normalmente completan los ocupantes los compensaban las bombonas. Adem?s, al volar sobre el mar, se hab?an pertrechado de compartimentos estancos para guardar el material en el caso de que acabaran en el agua. También chalecos salvavidas y un neopreno para cada uno de ellos. Adem?s, hab?an elaborado un plan detallado de rescate en el caso de que se produjera un desastre. Algo que, aunque previsto, no entraba en los planes de Mesegué y Aguirre. "Cuando haces algo as? es porque tienes claro que lo vas a conseguir", afirman.
2.000 metros sobre el mar
La mayor?a del vuelo, narran, lo han hecho a unos dos mil metros sobre el mar, aunque en alg?n momento se han alzado hasta los 2.500. La velocidad, se?alan, ha sido de entre 30 y 40 kil?metros por hora, y han probado diferentes vientos por si les conven?a girar "un poco". "No tenemos tim?n. El globo es el ?nico medio de transporte que no lo tiene, hasta un paraca?das cuenta con él. Nosotros no tenemos esa posibilidad y tenemos que buscar esos giros con el viento", explica el piloto, que asegura que no es extra?o que jam?s, hasta ayer, se hubiera cruzado el Canal de Ibiza en globo. "Lo extra?o es que se haya hecho. Todo ha ido muy bien, ha sido un vuelo muy pl?cido, pero llevamos muchos a?os haciendo esto y eso te da una visi?n diferente de la aventura que supone. Es complicado. Por eso no lo ha hecho nadie", indica Mesegué.
Tras este reto en el que llevaban pensando m?s de veinte a?os, desde que, después de ser pioneros en el puenting y el rafting, decidieron probar con los globos aerost?ticos —"vimos una foto en un calendario, empezamos a hacer llamadas, nos compramos un globo y nos formamos"— tienen muchos por cumplir. Una traves?a integral por los Pirineos —"desde el Cant?brico al Mediterr?neo"— o ver un eclipse de sol, previsto dentro de unos a?os, desde un globo en la Ant?rtida. "No sé si podremos ir, pero siempre se dice que el viento sopla a favor de los que tienen sue?os".
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/aventura-pionera-calpe-ibiza-globo-80487470)
Una gesta con la que ambos, socios fundadores de Globus Kon-Tiki, llevaban m?s de veinte a?os so?ando. "Pero nunca, por disponibilidad o por el tiempo, pod?a ser", comenta Mesegué. El vuelo comenz? a fraguarse pocos d?as antes de Navidad: "El jueves de la semana pasada vimos que hab?a muy buenos pron?sticos". Sin embargo, aunque la meteorolog?a se lo pon?a en bandeja y ten?an globos libres, ambos eran conscientes de que estas son fechas complicadas, en las que la gente tiene compromisos o quiere estar en familia. Justo después de Navidad vieron que el d?a bueno era el 28 —"el 29 ya entra otro viento y no se pod?a"— y decidieron tirar hacia adelante.
As?, al amanecer, el ‘Raimat’ iniciaba ese vuelo pionero alz?ndose sobre el pe??n de Ifach. En un principio, relatan, la idea era salir desde Dénia, pero al comprobar el viento a las diferentes alturas —"una cosa es volar a cien metros, otra a mil, y el viento va variando con la altura"— se dieron cuenta de que aunque Dénia est? m?s cerca de Ibiza, desde Calpe, unos 35 kil?metros m?s al sur, pod?an encarar mejor la traves?a, que comenzaba a las ocho y media de la ma?ana, con la barquilla despeg?ndose del suelo y Mesegué y Aguirre viviendo los primeros instantes del esperado vuelo. Su equipo de tierra en Calpe, Josep Centellas y Salvador Mateu, les deseaban suerte y el popular meteor?logo Francesc Mauri compart?a en sus redes un v?deo del despegue y les hac?a una recomendaci?n, no exenta de guasa: "No os paséis de largo, que la isla es peque?ita".
Cuatro horas y media en las nubes
Empezaban, as?, cuatro horas y media de vuelo sobre el mar. Comprobando la temperatura —"quemando m?s gas para subir, quemando poco para mantenerse y dej?ndolo escapar para bajar poco a poco"—, controlando los vientos y contemplando el paisaje, que, elev?ndose, "va dejando de serlo para convertirse en mapa", como dec?a Ram?n J. Sender. Y manteniéndose en contacto, en todo momento, con la torre de control correspondiente: la del aeropuerto de Alicante, primero; las de los aer?dromos de Valencia y Palma, después, y, ya por ?ltimo, la torre del de Eivissa. "Previamente se env?a un plan de vuelo, para pedir autorizaci?n", explican los aventureros, que durante la traves?a, avistando ya tierra ebusitana, colgaron una foto sobrevolando un mar de peque?as nubes. "Siempre hay algo de tiempo libre para disfrutar", afirma Mesegué, sorprendido por la calma del trayecto. "Ha sido mucho mejor de lo que esper?bamos", recalca. Un despegue suave y una traves?a apacible sobre el mar, donde la falta de monta?as reduce los cambios en el viento, detallan.
Mientras ellos sueltan y dan gas a necesidad, en tierra, pendientes del teléfono y del cielo, aguardan Pep Reig y Jordi Gibert. Cogieron un ferry desde Barcelona la noche antes y llegaron a la isla, con dos remolques, casi a la misma hora en la que el ‘Raimat’ alzaba el vuelo al otro lado del Canal de Eivissa. Les acompa?a José Ram?n Mancebo, de Ibiza en Globo, que conoce bien la isla y los puntos en los que aterrizar. ?l mismo ha sacado su globo a volar horas antes, también al amanecer, y les ha avisado de que hab?a un poco niebla, pero despej?ndose.
Una hora antes de que el ‘Raimat’ toque tierra su oronda figura se puede ver, recortada en el cielo, desde es Cubells. La costa suroeste era, desde el primer momento, el objetivo de los pilotos, aunque el punto exacto de aterrizaje depende del viento y de las posibilidades, ya que en la zona hay mucho bosque, explica Gibert.
"?Est?n a la vista!", exclama el responsable del equipo de Ibiza mientras el veh?culo en el que llevan desde primera hora de la ma?ana pendientes del globo, se adentra por un estrecho camino que conduce a una finca perdida entre las monta?as de Sant Agust?. Entre el pueblo, sobre cuya iglesia ha podido verse minutos antes, y el popular Festival Club. "Hemos aterrizado junto a una casa", explica Mesegué, riendo al recordar la bienvenida de la propietaria, una mujer originaria de Suiza con la que, incluso, se han hecho fotos. Y con el globo, obviamente, que media hora después est? ya recogido. "Tenemos bastante ma?a", bromean los pilotos, que hab?an preparado el ‘Raimat’, con capacidad para ocho personas, de una forma algo especial para este viaje.
Para empezar, iban s?lo ellos dos. Al ser una traves?a larga, deb?an cargar m?s bidones de gas, de manera que el peso que normalmente completan los ocupantes los compensaban las bombonas. Adem?s, al volar sobre el mar, se hab?an pertrechado de compartimentos estancos para guardar el material en el caso de que acabaran en el agua. También chalecos salvavidas y un neopreno para cada uno de ellos. Adem?s, hab?an elaborado un plan detallado de rescate en el caso de que se produjera un desastre. Algo que, aunque previsto, no entraba en los planes de Mesegué y Aguirre. "Cuando haces algo as? es porque tienes claro que lo vas a conseguir", afirman.
2.000 metros sobre el mar
La mayor?a del vuelo, narran, lo han hecho a unos dos mil metros sobre el mar, aunque en alg?n momento se han alzado hasta los 2.500. La velocidad, se?alan, ha sido de entre 30 y 40 kil?metros por hora, y han probado diferentes vientos por si les conven?a girar "un poco". "No tenemos tim?n. El globo es el ?nico medio de transporte que no lo tiene, hasta un paraca?das cuenta con él. Nosotros no tenemos esa posibilidad y tenemos que buscar esos giros con el viento", explica el piloto, que asegura que no es extra?o que jam?s, hasta ayer, se hubiera cruzado el Canal de Ibiza en globo. "Lo extra?o es que se haya hecho. Todo ha ido muy bien, ha sido un vuelo muy pl?cido, pero llevamos muchos a?os haciendo esto y eso te da una visi?n diferente de la aventura que supone. Es complicado. Por eso no lo ha hecho nadie", indica Mesegué.
Tras este reto en el que llevaban pensando m?s de veinte a?os, desde que, después de ser pioneros en el puenting y el rafting, decidieron probar con los globos aerost?ticos —"vimos una foto en un calendario, empezamos a hacer llamadas, nos compramos un globo y nos formamos"— tienen muchos por cumplir. Una traves?a integral por los Pirineos —"desde el Cant?brico al Mediterr?neo"— o ver un eclipse de sol, previsto dentro de unos a?os, desde un globo en la Ant?rtida. "No sé si podremos ir, pero siempre se dice que el viento sopla a favor de los que tienen sue?os".
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