الريــم
12-26-2022, 02:54 PM
Puede que sea desde la residencia familiar en Wollerau, una casa acristalada de tres plantas, de grandes ventanales con vistas al lago de Z?rich, al lado de su esposa Mirka Vavrinec y en compa??a de sus hijos Myla, Leo, Charlene y Lennart, donde por la cabeza de Roger Federer a?n recorran de vez en cuando im?genes de aquellos d?as en el O2 de Londres, emotivos, interminables y angustiosos, en los que fue real y oficial el adi?s a su carrera.
M?s informaci?n (Auto)
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Entre la vivienda suiza y el ?tico de Le Reve de Dubai donde se refugia del fr?o y escapa del invierno, viajan las huellas de esa fiesta de fin de curso planeada en la Copa Laver, veinticuatro a?os después de su estreno profesional y luego de un recorrido excelso, plagado de éxitos elaborados de una manera espectacular y con un admirable método para desarrollar el juego. Una época.
Entendi? Roger Federer que el cuerpo no daba para m?s. Que no hab?a m?s recorrido en su trayecto para prolongar la puja por los éxitos y alargar el mano a mano con Rafael Nadal y con Novak Djokovic; ese desaf?o estad?stico, popular y también personal por la consideraci?n del mejor de la historia.
Hac?a tiempo que el suizo, ya con 41 a?os cumplidos estaba al margen de esos momentos gloriosos de los grandes torneos. Hab?an transcurrido cuatro desde que consigui? ganar su ?ltimo Grand Slam, en Australia. El vigésimo en su carrera.
Entre la nostalgia y el sosiego rememora Federer aquella tarde que destap? la fragilidad emocional que invade a cualquier ser humano. ?sa que supo esconder tantas veces en la cancha en cuanto se instal? en la cima y después de sobrevivir a la rebeld?a de juventud. Fue un adi?s especial porque el destino procur? que la atm?sfera estuviera a la altura del personaje. As? fue. En activo, en medio de la pista del recinto londinense, al lado de su rival, amigo y compa?ero Rafael Nadal, con el que tantos episodios épicos hab?a compartido. Roger y Rafa perdieron contra los estadounidenses Jack Sock y Frances Tiafoe y marcaron el final de una era en el tenis.
No fue un adi?s improvisado. Federer se encamin? al centro de la pista. El p?blico entregado, Nadal emocionado. Un video en el marcador resumi? una carrera eterna, con 103 t?tulos individuales, con veinte Grand Slam.
Las lesiones, el quir?fano, una recuperaci?n interminable, un t?nel sin salida y el paso de los a?os terminaron por convencer a Roger de la necesidad echarse a un lado mientras una nueva generaci?n tras otra empieza a devorar el circuito, a invadir el tour donde a?n se hace fuerte Rafael Nadal y también resiste Novak Djokovic, supervivientes al empuje natural, desafiantes a los ciclos de la vida.
Se detuvo el tiempo en el 2022 para Federer igual que se estanc? para el argentino Juan Mart?n del Potro, el alem?n Philipp Kohlschreiber, el estadounidense Sam Querrey, el italiano Andreas Seppi, los franceses Gilles Simon y Jo Wilfried Tsonga, el sudafricano Kevin Anderson o los espa?oles Tommy Robredo y Marc L?pez que enfilaron también la marcha deportiva para advertir del final de una promoci?n inigualable en la historia del tenis.
Apuran la despedida y alargan su historial Djokovic y Nadal, a?n con un car?cter dominante, tenaces (https://www.sport.es/es/noticias/tenis/rafa-nadal-balance-2022-80370803) ante la irrupci?n de los tiempos modernos que interpretan tipos como el ruso Daniil Medvedev, el noruego Caper Ruud, el alem?n Alexander Zverev, el griego Stefanos Tsitsipas, el canadiense Felix Auger Aliassime, el italiano Jannik Sinner o el danés Holger Rune. Pero especialmente, Carlos Alcaraz, instalado en el final del ejercicio en la cima del circuito desde donde contempla un devenir esplendoroso.Nunca llegar? a medir su tenis Alcaraz con el de Federer. Es uno de los lamentos del murciano, reconocido admirador del icono suizo, que jam?s arrinconar? las vivencias experimentadas a lo largo del a?o que acaba.Ha tardado poco en alcanzar la cumbre el espa?ol erigido en el n?mero uno m?s joven de la historia del tenis. Ya forma parte de los grandes del deporte este adolescente de 19 a?os que ha roto en cada paso los registros establecidos desde siempre. Cerr? Alcaraz el 2019 en el puesto 492 del r?nking y un a?o después lleg? a diciembre en el 141. Irrumpi? entre los cien primeros del mundo en mayo del 2021, con 18 recién cumplidos y acab? esa temporada en el 32 del escalaf?n. Doce meses después, corona la clasificaci?n del mundo. Por encima de todos. De los cl?sicos, de los legendarios, de los consolidados y de los incipientes.
Logr? Alcaraz en tiempo récord el anhelo que a?n est? pendiente para tipos como Zverev, Tsitsipas, Andrey Rublev o Matteo Berrettini, abanderados de la generaci?n intermedia se?alada para heredar la cosecha del ‘Big Three’ y que todav?a no han asaltado la cumbre.
Pero han sido suficiente unos cuantos meses para quemar etapas y atravesar barreras a toda m?quina. De promesa a rival a batir disfruta a?n el espa?ol que ha realzado a El Palmar con sus conquistas de aquél 11 de septiembre en Nueva York cuando consolid? definitivamente sus se?as de identidad en el tenis al ganar su primer Grand Slam, el Abierto de Estados Unidos, al noruego Casper Ruud y asaltar, a la vez, la c?spide del circuito.
Nada aplaca la sonrisa de este adolescente de semblante natural, presa a?n de la espontaneidad propia de su limitada experiencia, que ha impuesto su tenis en el circuito. Victorias memorables como las logradas ante Nadal y Djokovic en Madrid, épicas como la conseguida ante Sinner en Nueva York son algunos de los momentos felices del murciano que irrumpi? con convicci?n en el 2022 y devor? un trofeo tras otro.
Recuerda Alcaraz que dio sus primeros pasos en el curso que ahora acaba con el trofeo de Umag del 2021 como ?nico mérito. Y de pronto, como quién no quiere la cosa, R?o de Janeiro y, sobre todo, el Masters 1000 de Miami. La cosa iba en serio. Lleg? después el triunfo en Barcelona y, especialmente, el Masters 1000 de Madrid. No hab?a final que se le resistiera al de El Palmar, que cerr? el c?rculo en Estados Unidos, su primer major. En Umag y Hamburgo, se qued? en puertas.
Cincuenta y siete victorias y s?lo quince derrotas y cinco t?tulos resumen el tr?nsito de Alcaraz en su a?o de gloria, el 2022 en el que sobresali? al resto, incluido Rafael Nadal, el segundo en el r?nking que cerr? una temporada al nivel que marca su incomparable carrera.
Estrena el balear en su Manacor natal sus primeras navidades como padre a un paso de iniciar su vigésimo segundo curso como profesional. Casi cuatro meses de adaptaci?n a su nueva condici?n, a una situaci?n desconocida. Para los viajes y la distancia. Para su rutina. Un devenir personal inexplorado y un acontecer incierto sobre la pista.
Fue para Nadal un curso extra?o el del 2022 que arranc? a lo grande, se estanc? en su ecuador y decay? en su final, sin disposici?n para el despegue. Brill? el espa?ol al inicio, arrollador. Invicto durante sus primeros torneos que conquist?. Melburne, el Abierto de Australia y Acapulco. Veintiuna victorias seguidas. Una racha que solo estanc? marzo, en la final de Indian Wells, por una fisura en sus costillas.
Dos meses tard? en regresar a las pistas. Fue en Madrid. En el Masters 1000. El cuerpo le dio hasta los cuartos de final. Sigui? en Roma. No pas? de octavos. Pero lleg? Roland Garros y no perdon?. Recuper? su nivel y volvi? a reinar en Par?s por decimocuarta vez. Fue su vigésimo segundo Grand Slam, m?s que nadie. Dos por encima de Federer y, por entonces también, de Novak Djokovic al que volvi? a ganar en los cuartos de final de la competici?n.
Pero las advertencias f?sicas no dan tregua al espa?ol que mantiene una permanente y particular lucha con las lesiones y la cancha, que divide su esfuerzo y su tes?n entre los condicionantes f?sicos y el juego. Que apuntala su fortaleza con las exigencias de la recuperaci?n de cada contratiempo de su cuerpo y la puesta a punto ante la red.
No regres? el balear hasta agosto. Se prob? en Cincinnati y perdi? en su debut. Y en Nueva York, en una gran ocasi?n para agrandar su cuenta de majors, sin Djokovic ni Daniil Medvedev, no pudo pasar de octavos.
Ech? el resto del curso a duras penas. Eliminado en primera ronda en Par?s Bercy y con una sola victoria en el torneo de Maestros de Tur?n. Pero lo importante estaba hecho.
Cierra sin reproches el a?o Nadal, a la espera del dictado de su cuerpo para lo que viene. La pista marcar? el futuro, a?n con alicientes, aferrado a la salud y al empuje de los novatos. Y de Djokovic, también eterno, que reaccion? a los malos ratos y el veto por las secuelas de la pandemia en el primer tramo del curso pero que advirti? de la pauta a seguir con el triunfo en Wimbledon, veinti?n Grand Slam y un final de temporada en erupci?n.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/tenis/federer-eterno-imponente-alcaraz-80391190)
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
Entre la vivienda suiza y el ?tico de Le Reve de Dubai donde se refugia del fr?o y escapa del invierno, viajan las huellas de esa fiesta de fin de curso planeada en la Copa Laver, veinticuatro a?os después de su estreno profesional y luego de un recorrido excelso, plagado de éxitos elaborados de una manera espectacular y con un admirable método para desarrollar el juego. Una época.
Entendi? Roger Federer que el cuerpo no daba para m?s. Que no hab?a m?s recorrido en su trayecto para prolongar la puja por los éxitos y alargar el mano a mano con Rafael Nadal y con Novak Djokovic; ese desaf?o estad?stico, popular y también personal por la consideraci?n del mejor de la historia.
Hac?a tiempo que el suizo, ya con 41 a?os cumplidos estaba al margen de esos momentos gloriosos de los grandes torneos. Hab?an transcurrido cuatro desde que consigui? ganar su ?ltimo Grand Slam, en Australia. El vigésimo en su carrera.
Entre la nostalgia y el sosiego rememora Federer aquella tarde que destap? la fragilidad emocional que invade a cualquier ser humano. ?sa que supo esconder tantas veces en la cancha en cuanto se instal? en la cima y después de sobrevivir a la rebeld?a de juventud. Fue un adi?s especial porque el destino procur? que la atm?sfera estuviera a la altura del personaje. As? fue. En activo, en medio de la pista del recinto londinense, al lado de su rival, amigo y compa?ero Rafael Nadal, con el que tantos episodios épicos hab?a compartido. Roger y Rafa perdieron contra los estadounidenses Jack Sock y Frances Tiafoe y marcaron el final de una era en el tenis.
No fue un adi?s improvisado. Federer se encamin? al centro de la pista. El p?blico entregado, Nadal emocionado. Un video en el marcador resumi? una carrera eterna, con 103 t?tulos individuales, con veinte Grand Slam.
Las lesiones, el quir?fano, una recuperaci?n interminable, un t?nel sin salida y el paso de los a?os terminaron por convencer a Roger de la necesidad echarse a un lado mientras una nueva generaci?n tras otra empieza a devorar el circuito, a invadir el tour donde a?n se hace fuerte Rafael Nadal y también resiste Novak Djokovic, supervivientes al empuje natural, desafiantes a los ciclos de la vida.
Se detuvo el tiempo en el 2022 para Federer igual que se estanc? para el argentino Juan Mart?n del Potro, el alem?n Philipp Kohlschreiber, el estadounidense Sam Querrey, el italiano Andreas Seppi, los franceses Gilles Simon y Jo Wilfried Tsonga, el sudafricano Kevin Anderson o los espa?oles Tommy Robredo y Marc L?pez que enfilaron también la marcha deportiva para advertir del final de una promoci?n inigualable en la historia del tenis.
Apuran la despedida y alargan su historial Djokovic y Nadal, a?n con un car?cter dominante, tenaces (https://www.sport.es/es/noticias/tenis/rafa-nadal-balance-2022-80370803) ante la irrupci?n de los tiempos modernos que interpretan tipos como el ruso Daniil Medvedev, el noruego Caper Ruud, el alem?n Alexander Zverev, el griego Stefanos Tsitsipas, el canadiense Felix Auger Aliassime, el italiano Jannik Sinner o el danés Holger Rune. Pero especialmente, Carlos Alcaraz, instalado en el final del ejercicio en la cima del circuito desde donde contempla un devenir esplendoroso.Nunca llegar? a medir su tenis Alcaraz con el de Federer. Es uno de los lamentos del murciano, reconocido admirador del icono suizo, que jam?s arrinconar? las vivencias experimentadas a lo largo del a?o que acaba.Ha tardado poco en alcanzar la cumbre el espa?ol erigido en el n?mero uno m?s joven de la historia del tenis. Ya forma parte de los grandes del deporte este adolescente de 19 a?os que ha roto en cada paso los registros establecidos desde siempre. Cerr? Alcaraz el 2019 en el puesto 492 del r?nking y un a?o después lleg? a diciembre en el 141. Irrumpi? entre los cien primeros del mundo en mayo del 2021, con 18 recién cumplidos y acab? esa temporada en el 32 del escalaf?n. Doce meses después, corona la clasificaci?n del mundo. Por encima de todos. De los cl?sicos, de los legendarios, de los consolidados y de los incipientes.
Logr? Alcaraz en tiempo récord el anhelo que a?n est? pendiente para tipos como Zverev, Tsitsipas, Andrey Rublev o Matteo Berrettini, abanderados de la generaci?n intermedia se?alada para heredar la cosecha del ‘Big Three’ y que todav?a no han asaltado la cumbre.
Pero han sido suficiente unos cuantos meses para quemar etapas y atravesar barreras a toda m?quina. De promesa a rival a batir disfruta a?n el espa?ol que ha realzado a El Palmar con sus conquistas de aquél 11 de septiembre en Nueva York cuando consolid? definitivamente sus se?as de identidad en el tenis al ganar su primer Grand Slam, el Abierto de Estados Unidos, al noruego Casper Ruud y asaltar, a la vez, la c?spide del circuito.
Nada aplaca la sonrisa de este adolescente de semblante natural, presa a?n de la espontaneidad propia de su limitada experiencia, que ha impuesto su tenis en el circuito. Victorias memorables como las logradas ante Nadal y Djokovic en Madrid, épicas como la conseguida ante Sinner en Nueva York son algunos de los momentos felices del murciano que irrumpi? con convicci?n en el 2022 y devor? un trofeo tras otro.
Recuerda Alcaraz que dio sus primeros pasos en el curso que ahora acaba con el trofeo de Umag del 2021 como ?nico mérito. Y de pronto, como quién no quiere la cosa, R?o de Janeiro y, sobre todo, el Masters 1000 de Miami. La cosa iba en serio. Lleg? después el triunfo en Barcelona y, especialmente, el Masters 1000 de Madrid. No hab?a final que se le resistiera al de El Palmar, que cerr? el c?rculo en Estados Unidos, su primer major. En Umag y Hamburgo, se qued? en puertas.
Cincuenta y siete victorias y s?lo quince derrotas y cinco t?tulos resumen el tr?nsito de Alcaraz en su a?o de gloria, el 2022 en el que sobresali? al resto, incluido Rafael Nadal, el segundo en el r?nking que cerr? una temporada al nivel que marca su incomparable carrera.
Estrena el balear en su Manacor natal sus primeras navidades como padre a un paso de iniciar su vigésimo segundo curso como profesional. Casi cuatro meses de adaptaci?n a su nueva condici?n, a una situaci?n desconocida. Para los viajes y la distancia. Para su rutina. Un devenir personal inexplorado y un acontecer incierto sobre la pista.
Fue para Nadal un curso extra?o el del 2022 que arranc? a lo grande, se estanc? en su ecuador y decay? en su final, sin disposici?n para el despegue. Brill? el espa?ol al inicio, arrollador. Invicto durante sus primeros torneos que conquist?. Melburne, el Abierto de Australia y Acapulco. Veintiuna victorias seguidas. Una racha que solo estanc? marzo, en la final de Indian Wells, por una fisura en sus costillas.
Dos meses tard? en regresar a las pistas. Fue en Madrid. En el Masters 1000. El cuerpo le dio hasta los cuartos de final. Sigui? en Roma. No pas? de octavos. Pero lleg? Roland Garros y no perdon?. Recuper? su nivel y volvi? a reinar en Par?s por decimocuarta vez. Fue su vigésimo segundo Grand Slam, m?s que nadie. Dos por encima de Federer y, por entonces también, de Novak Djokovic al que volvi? a ganar en los cuartos de final de la competici?n.
Pero las advertencias f?sicas no dan tregua al espa?ol que mantiene una permanente y particular lucha con las lesiones y la cancha, que divide su esfuerzo y su tes?n entre los condicionantes f?sicos y el juego. Que apuntala su fortaleza con las exigencias de la recuperaci?n de cada contratiempo de su cuerpo y la puesta a punto ante la red.
No regres? el balear hasta agosto. Se prob? en Cincinnati y perdi? en su debut. Y en Nueva York, en una gran ocasi?n para agrandar su cuenta de majors, sin Djokovic ni Daniil Medvedev, no pudo pasar de octavos.
Ech? el resto del curso a duras penas. Eliminado en primera ronda en Par?s Bercy y con una sola victoria en el torneo de Maestros de Tur?n. Pero lo importante estaba hecho.
Cierra sin reproches el a?o Nadal, a la espera del dictado de su cuerpo para lo que viene. La pista marcar? el futuro, a?n con alicientes, aferrado a la salud y al empuje de los novatos. Y de Djokovic, también eterno, que reaccion? a los malos ratos y el veto por las secuelas de la pandemia en el primer tramo del curso pero que advirti? de la pauta a seguir con el triunfo en Wimbledon, veinti?n Grand Slam y un final de temporada en erupci?n.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/tenis/federer-eterno-imponente-alcaraz-80391190)