الريــم
12-25-2022, 04:13 PM
A Ken, un exmilitar brit?nico, no le gustan los tr?podes. Mejor evitarlos cuando sea posible, dice, aunque muchas veces no lo sea y toque aceptarlos. "?Por qué no me gustan? Porque son f?ciles de confundir con fusiles pesados. Son peligrosos y pueden convertir al periodista en un objetivo", explica.
Este a?o, Ken Perry ha estado ocupado. ?l y su empresa, Cosain Consultancy -que asesora para grandes medios de comunicaci?n- han realizado varios cursos gratuitos de seguridad para periodistas en Birmingham. "Lo estamos haciendo porque en Ucrania, mientras est?bamos all? de misi?n, vimos que estaban llegando muchos periodistas 'freelance' sin experiencia ni entrenamiento. Esta es nuestra forma de retornar el favor de su gran trabajo", explica Ken, amable en el trato pero duro a la hora de ponerse manos a la obra.
Para cualquier persona que vaya a un conflicto -o que se vea sumido en el mismo- este tipo de cursos, muy comunes pero muy caros, son clave: sus contenidos, al principio, parecen obvios, algo evidente en cuanto se explica. Sin embargo, no todo es tan f?cil. En situaciones de riesgo, lo normal se convierte en inimaginable, y lo que resulta f?cil de pensar es dif?cil de realizar.
En Ucrania, hasta la fecha, m?s de una treintena de reporteros han muerto por el conflicto, sobre todo en bombardeos —m?s 5.000 civiles ucranianos—. La mayor?a de los periodistas fallecidos, adem?s, son reporteros locales.
"Hay muchos riesgos en la actualidad en Ucrania, y si un periodista no cuenta con ning?n medio que lo avale, mejor no ponerse a uno mismo en peligro. A veces solo nos fijamos en la posibilidad de que te caiga un bombazo encima, pero hay muchos m?s riesgos, tanto f?sicos como psicol?gicos. Que alguien invierta todos sus ahorros y no consiga publicar nada en un medio es un problema. Pero que esta persona, adem?s, se lleve un trauma psicol?gico es mucho peor", explica el presidente de Reporteros Sin Fronteras (RSF) en Espa?a, Alfonso Bauluz. RSF, de hecho, ha creado una plataforma de ayuda y gu?a a periodistas que quieran viajar al pa?s eslavo para cubrir la guerra.
Los ejemplos de peligros a los que se puedan encontrar son muchos: en la carretera, tras un accidente, se debe evitar que el herido haga movimientos bruscos, sobre todo en la espalda. La persona puede estar herida aunque no haya sangre. Y si una herida sangra sin fin, aunque hacerlo signifique que el herido pierda un brazo o una pierna, aplicar un torniquete lo antes posible puede salvar vidas. Cada minuto que pasa las probabilidades de supervivencia bajan.
"En primeros auxilios hay un protocolo a seguir muy claro. El orden es muy importante: ?Hay m?s peligros en la zona? ?La persona responde? ?Hay heridas que puedan ser mortales? ?La v?a respiratoria est? abierta? ?Respira normal la persona? ?Est? la piel blanca? ?Responde ahora tras los primeros pasos? ?C?mo tiene las pupilas? ?Hay m?s heridas y sangre por el cuerpo? Es una escalera que se tiene que ir bajando en funci?n de la respuesta a cada pregunta. Responder mal o tarde a estas preguntas puede costarle la vida a la persona herida", explica Jarrod, paramédico, también exmilitar y profesor del curso.
Fuego de morteros
Después de la teor?a viene la pr?ctica. "Mirad, ahora iremos a una fosa com?n empotrados con una milicia ucraniana, y all? entrevistaremos al l?der de esta milicia. Estad preparados y subid al coche", explica Ken, que durante la pr?ctica se convierte en un conductor temerario ucraniano, Serguéi.
Al llegar con la milicia, empieza el fuego de morteros. El miliciano resulta herido: los periodistas deben de seguir los pasos. En este caso, a primera vista, el miliciano tiene una herida potencialmente mortal en el brazo. El procedimiento es sencillo de enumerar pero complicado de realizar: aplicar un torniquete, coger al hombre y, con él a cuestas, correr a cubierto, hacia el edificio m?s cercano. En casos como este, la nuca y la espalda del herido importan poco. La elecci?n est? clara: o tres personas muertas o tres vivas, aunque una de ellas tenga la espina dorsal da?ada de por vida.
"En casos como este es importante escuchar a la artiller?a. Tiene un ritmo, y si se aprende el patr?n se puede adivinar cu?ndo caer?; desde que se dispara hasta que impacta hay unos minutos de demora. Aprender a escuchar el ritmo de la artiller?a puede salvarle la vida a uno", explica Ken. Seg?n sostiene, en Ucrania, ésta funciona como un partido de tenis: primero disparan una serie de artiller?a los rusos, después contestan los ucranianos. Es entre este di?logo de morteros en el que el periodista -o cualquiera- puede huir de la zona bombardeada.
Un plan imperfecto
Lo m?s importante de todo, sin embargo, es planificar siempre antes de partir: establecer rutas principales y alternativas, estudiar riesgos, localizar hospitales en el camino, gestionar acreditaciones y protocolos de actuaci?n ante las autoridades oficiales y no oficiales -en Ucrania civiles armados, a veces borrachos, montan puntos de control en la carretera-, decidir el uso de determinadas aplicaciones de teléfono y fijar un horario de comunicaci?n con la redacci?n, y un etcétera que es casi infinito pero que es crucial porque el plan siempre acabar? rompiéndose, pero es una base estable sobre la que funcionar.
"Hay muchas veces que pese al plan el instinto es el que manda -dice Ken-. Hace unos meses un miembro de nuestro equipo circulaba con unos periodistas por una carretera cerca del frente en Ucrania, y su instinto le dec?a que algo iba mal. Le dijo al conductor que buscase una carretera alternativa, que no deb?an continuar por ese camino. Unos 30 minutos después los rusos atacaron donde ellos hab?an estado. Les salv? su instinto. Se debe confiar en él".
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/periodismo-tiempos-guerra-aprender-protegerse-80381416)
Este a?o, Ken Perry ha estado ocupado. ?l y su empresa, Cosain Consultancy -que asesora para grandes medios de comunicaci?n- han realizado varios cursos gratuitos de seguridad para periodistas en Birmingham. "Lo estamos haciendo porque en Ucrania, mientras est?bamos all? de misi?n, vimos que estaban llegando muchos periodistas 'freelance' sin experiencia ni entrenamiento. Esta es nuestra forma de retornar el favor de su gran trabajo", explica Ken, amable en el trato pero duro a la hora de ponerse manos a la obra.
Para cualquier persona que vaya a un conflicto -o que se vea sumido en el mismo- este tipo de cursos, muy comunes pero muy caros, son clave: sus contenidos, al principio, parecen obvios, algo evidente en cuanto se explica. Sin embargo, no todo es tan f?cil. En situaciones de riesgo, lo normal se convierte en inimaginable, y lo que resulta f?cil de pensar es dif?cil de realizar.
En Ucrania, hasta la fecha, m?s de una treintena de reporteros han muerto por el conflicto, sobre todo en bombardeos —m?s 5.000 civiles ucranianos—. La mayor?a de los periodistas fallecidos, adem?s, son reporteros locales.
"Hay muchos riesgos en la actualidad en Ucrania, y si un periodista no cuenta con ning?n medio que lo avale, mejor no ponerse a uno mismo en peligro. A veces solo nos fijamos en la posibilidad de que te caiga un bombazo encima, pero hay muchos m?s riesgos, tanto f?sicos como psicol?gicos. Que alguien invierta todos sus ahorros y no consiga publicar nada en un medio es un problema. Pero que esta persona, adem?s, se lleve un trauma psicol?gico es mucho peor", explica el presidente de Reporteros Sin Fronteras (RSF) en Espa?a, Alfonso Bauluz. RSF, de hecho, ha creado una plataforma de ayuda y gu?a a periodistas que quieran viajar al pa?s eslavo para cubrir la guerra.
Los ejemplos de peligros a los que se puedan encontrar son muchos: en la carretera, tras un accidente, se debe evitar que el herido haga movimientos bruscos, sobre todo en la espalda. La persona puede estar herida aunque no haya sangre. Y si una herida sangra sin fin, aunque hacerlo signifique que el herido pierda un brazo o una pierna, aplicar un torniquete lo antes posible puede salvar vidas. Cada minuto que pasa las probabilidades de supervivencia bajan.
"En primeros auxilios hay un protocolo a seguir muy claro. El orden es muy importante: ?Hay m?s peligros en la zona? ?La persona responde? ?Hay heridas que puedan ser mortales? ?La v?a respiratoria est? abierta? ?Respira normal la persona? ?Est? la piel blanca? ?Responde ahora tras los primeros pasos? ?C?mo tiene las pupilas? ?Hay m?s heridas y sangre por el cuerpo? Es una escalera que se tiene que ir bajando en funci?n de la respuesta a cada pregunta. Responder mal o tarde a estas preguntas puede costarle la vida a la persona herida", explica Jarrod, paramédico, también exmilitar y profesor del curso.
Fuego de morteros
Después de la teor?a viene la pr?ctica. "Mirad, ahora iremos a una fosa com?n empotrados con una milicia ucraniana, y all? entrevistaremos al l?der de esta milicia. Estad preparados y subid al coche", explica Ken, que durante la pr?ctica se convierte en un conductor temerario ucraniano, Serguéi.
Al llegar con la milicia, empieza el fuego de morteros. El miliciano resulta herido: los periodistas deben de seguir los pasos. En este caso, a primera vista, el miliciano tiene una herida potencialmente mortal en el brazo. El procedimiento es sencillo de enumerar pero complicado de realizar: aplicar un torniquete, coger al hombre y, con él a cuestas, correr a cubierto, hacia el edificio m?s cercano. En casos como este, la nuca y la espalda del herido importan poco. La elecci?n est? clara: o tres personas muertas o tres vivas, aunque una de ellas tenga la espina dorsal da?ada de por vida.
"En casos como este es importante escuchar a la artiller?a. Tiene un ritmo, y si se aprende el patr?n se puede adivinar cu?ndo caer?; desde que se dispara hasta que impacta hay unos minutos de demora. Aprender a escuchar el ritmo de la artiller?a puede salvarle la vida a uno", explica Ken. Seg?n sostiene, en Ucrania, ésta funciona como un partido de tenis: primero disparan una serie de artiller?a los rusos, después contestan los ucranianos. Es entre este di?logo de morteros en el que el periodista -o cualquiera- puede huir de la zona bombardeada.
Un plan imperfecto
Lo m?s importante de todo, sin embargo, es planificar siempre antes de partir: establecer rutas principales y alternativas, estudiar riesgos, localizar hospitales en el camino, gestionar acreditaciones y protocolos de actuaci?n ante las autoridades oficiales y no oficiales -en Ucrania civiles armados, a veces borrachos, montan puntos de control en la carretera-, decidir el uso de determinadas aplicaciones de teléfono y fijar un horario de comunicaci?n con la redacci?n, y un etcétera que es casi infinito pero que es crucial porque el plan siempre acabar? rompiéndose, pero es una base estable sobre la que funcionar.
"Hay muchas veces que pese al plan el instinto es el que manda -dice Ken-. Hace unos meses un miembro de nuestro equipo circulaba con unos periodistas por una carretera cerca del frente en Ucrania, y su instinto le dec?a que algo iba mal. Le dijo al conductor que buscase una carretera alternativa, que no deb?an continuar por ese camino. Unos 30 minutos después los rusos atacaron donde ellos hab?an estado. Les salv? su instinto. Se debe confiar en él".
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/periodismo-tiempos-guerra-aprender-protegerse-80381416)