الريــم
12-23-2022, 10:09 PM
El Katmai fue un pesquero de 20 metros de eslora que, un 18 de febrero de 1972, part?a de la costa de Alabama con destino a Anchorage (Alaska). Nunca lleg?. No volvi? a saberse nada de los tripulantes: el armador Oskar Joos, su esposa, el hijo de ambos, de ocho a?os, y el marinero Clinton Hollevoet. El misterio se resolvi? cuarenta a?os m?s tarde, cuando una misi?n liderada por el Gobierno federal (a través de la Bureau of Ocean Energy Management), en colaboraci?n con la Schmidt Ocean Institute, logr? localizar el pecio. Yac?a a 2.700 metros de profundidad, fuera de las 200 millas jurisdiccionales norteamericanas.
En el caso del Villa de Pitanxo, el pesquero naufragado en aguas del caladero de Terranova el 15 de febrero, no existe ese componente de misterio acerca de la localizaci?n del buque. Se sabe con exactitud, gracias a la se?al de radiobaliza, d?nde fue engullido por el mar. All? se desplazar? un buque multiprop?sito, dotado de un dron (ROV, remote operated vehicle), para obtener pruebas que clarifiquen las causas del naufragio. La licitaci?n, a cargo de la Comisi?n de Investigaci?n de Accidentes Mar?timos (Ciaim), se har? p?blica de forma inminente.
“Es cuesti?n de d?as”, apuntaron a Faro de Vigo, del grupo Prensa Ibérica, fuentes pr?ximas a la investigaci?n. En la misi?n deber?n participar un buque multiprop?sito, dotado de equipos como un magnet?metro o sonda lateral –como los que tienen los oceanogr?ficos– para hacer barridos con se?ales multihaz. Esta ser? la primera fase, la de la localizaci?n del pesquero. Ser? una tarea ardua, puesto que se trata de localizar un elemento de 50 metros –si no se ha partido– en el fondo del mar.
Aunque tanto la denominada caja azul como el AIS o la radiobaliza funcionaron con normalidad en el Pitanxo, y se tengan por tanto las coordenadas precisas del ?ltimo punto desde donde se recibi? la se?al del barco, esto no significa que esté justo en posici?n perpendicular (en el fondo). Para ese trabajo de localizaci?n, las sondas aportar?n distintos puntos de interés, que potencialmente podr?an ser el pesquero, y tendr?n que descartarse hasta dar con él. Aun cuando se culmine con éxito esta fase, el Pitanxo podr?a estar tumbado, deformado o partido por el impacto, o incluso rodeado de elementos que impidan el acceso o los trabajos de grabaci?n.
La inspecci?n ocular
En la segunda fase entrar? en acci?n el ROV, que ir? unido al buque multiprop?sito (nodriza) a través de una especie de cord?n umbilical. Como apunt? ya la Ciaim, este dron deber? estar “dotado de c?maras para examinar distintos aspectos del buque, sus equipos, de las artes de pesca y del fondo marino, que puedan resultar de interés para la investigaci?n de seguridad”. El estado de las v?as de desagüe, los cables de las maquinillas, las puertas de arrastre o la disposici?n del propio aparejo contribuir?n, previsiblemente, a arrojar luz sobre el mayor siniestro en el sector pesquero espa?ol desde el Marbel (1978). De los 24 tripulantes que iban a bordo aquella noche, solo sobrevivieron tres. El acceso al interior del pesquero, como a los camarotes o sala de m?quinas, requerir?a de un dispositivo vinculado al ROV, m?s peque?o. De cualquier modo, las posibilidades de éxito ser?an reducidas.
Como quiera que la Ciaim ha encargado una reconstrucci?n del siniestro en la enorme alberca del Centro de Experiencias Hidrodin?micas de El Pardo (Cehipar), y que todav?a no hay fecha para bajar al Pitanxo, no podr? entregar un informe definitivo sobre las causas del naufragio para el 15 de febrero, como estipula la normativa. Eso s?, la directiva europea permite entregar un documento preliminar, que s? ser? dispensado por los técnicos para esa fecha.
“Pad?n dijo tras el rescate que no se hundi? por parada de motor”
La defensa del patr?n del Villa de Pitanxo, Juan Enrique Pad?n, entreg? un informe pericial en la Audiencia Nacional que concluye que el barco fue a pique por una parada s?bita de motor, descartando una maniobra negligente por su parte, como ha declarado el marinero superviviente Samuel Kwesi Koufie. La defensa de buena parte de las familias ha rebatido también las conclusiones de este estudio, encargado por el propio patr?n.
“Que la causa del hundimiento del barco fue provocada por el embarre no lo dice solo Samuel, sino que, lo que es m?s importante, se lo dijo el propio Pad?n a los tripulantes del Playa de Mendui?a Dos cuando fue rescatado”, apuntan a FARO fuentes de la representaci?n jur?dica de familiares. “Les dijo que la causa del hundimiento fue el embarre, el cual provoc? la escora del barco y la entrada de agua por babor y por la popa hasta que el agua lleg? a los motores provocando su parada”. “Versi?n que, por cierto, –zanjan las mismas fuentes– Pad?n cambi? después de hablar por teléfono con sus armadores”, en referencia a la compa??a Pesquer?as Nores Mar?n.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/pitanxo-dara-version-ciaim-ultima-80355751)
En el caso del Villa de Pitanxo, el pesquero naufragado en aguas del caladero de Terranova el 15 de febrero, no existe ese componente de misterio acerca de la localizaci?n del buque. Se sabe con exactitud, gracias a la se?al de radiobaliza, d?nde fue engullido por el mar. All? se desplazar? un buque multiprop?sito, dotado de un dron (ROV, remote operated vehicle), para obtener pruebas que clarifiquen las causas del naufragio. La licitaci?n, a cargo de la Comisi?n de Investigaci?n de Accidentes Mar?timos (Ciaim), se har? p?blica de forma inminente.
“Es cuesti?n de d?as”, apuntaron a Faro de Vigo, del grupo Prensa Ibérica, fuentes pr?ximas a la investigaci?n. En la misi?n deber?n participar un buque multiprop?sito, dotado de equipos como un magnet?metro o sonda lateral –como los que tienen los oceanogr?ficos– para hacer barridos con se?ales multihaz. Esta ser? la primera fase, la de la localizaci?n del pesquero. Ser? una tarea ardua, puesto que se trata de localizar un elemento de 50 metros –si no se ha partido– en el fondo del mar.
Aunque tanto la denominada caja azul como el AIS o la radiobaliza funcionaron con normalidad en el Pitanxo, y se tengan por tanto las coordenadas precisas del ?ltimo punto desde donde se recibi? la se?al del barco, esto no significa que esté justo en posici?n perpendicular (en el fondo). Para ese trabajo de localizaci?n, las sondas aportar?n distintos puntos de interés, que potencialmente podr?an ser el pesquero, y tendr?n que descartarse hasta dar con él. Aun cuando se culmine con éxito esta fase, el Pitanxo podr?a estar tumbado, deformado o partido por el impacto, o incluso rodeado de elementos que impidan el acceso o los trabajos de grabaci?n.
La inspecci?n ocular
En la segunda fase entrar? en acci?n el ROV, que ir? unido al buque multiprop?sito (nodriza) a través de una especie de cord?n umbilical. Como apunt? ya la Ciaim, este dron deber? estar “dotado de c?maras para examinar distintos aspectos del buque, sus equipos, de las artes de pesca y del fondo marino, que puedan resultar de interés para la investigaci?n de seguridad”. El estado de las v?as de desagüe, los cables de las maquinillas, las puertas de arrastre o la disposici?n del propio aparejo contribuir?n, previsiblemente, a arrojar luz sobre el mayor siniestro en el sector pesquero espa?ol desde el Marbel (1978). De los 24 tripulantes que iban a bordo aquella noche, solo sobrevivieron tres. El acceso al interior del pesquero, como a los camarotes o sala de m?quinas, requerir?a de un dispositivo vinculado al ROV, m?s peque?o. De cualquier modo, las posibilidades de éxito ser?an reducidas.
Como quiera que la Ciaim ha encargado una reconstrucci?n del siniestro en la enorme alberca del Centro de Experiencias Hidrodin?micas de El Pardo (Cehipar), y que todav?a no hay fecha para bajar al Pitanxo, no podr? entregar un informe definitivo sobre las causas del naufragio para el 15 de febrero, como estipula la normativa. Eso s?, la directiva europea permite entregar un documento preliminar, que s? ser? dispensado por los técnicos para esa fecha.
“Pad?n dijo tras el rescate que no se hundi? por parada de motor”
La defensa del patr?n del Villa de Pitanxo, Juan Enrique Pad?n, entreg? un informe pericial en la Audiencia Nacional que concluye que el barco fue a pique por una parada s?bita de motor, descartando una maniobra negligente por su parte, como ha declarado el marinero superviviente Samuel Kwesi Koufie. La defensa de buena parte de las familias ha rebatido también las conclusiones de este estudio, encargado por el propio patr?n.
“Que la causa del hundimiento del barco fue provocada por el embarre no lo dice solo Samuel, sino que, lo que es m?s importante, se lo dijo el propio Pad?n a los tripulantes del Playa de Mendui?a Dos cuando fue rescatado”, apuntan a FARO fuentes de la representaci?n jur?dica de familiares. “Les dijo que la causa del hundimiento fue el embarre, el cual provoc? la escora del barco y la entrada de agua por babor y por la popa hasta que el agua lleg? a los motores provocando su parada”. “Versi?n que, por cierto, –zanjan las mismas fuentes– Pad?n cambi? después de hablar por teléfono con sus armadores”, en referencia a la compa??a Pesquer?as Nores Mar?n.
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