الريــم
12-19-2022, 08:35 PM
El clasismo, la homofobia y la plumofobia de una buena parte de la poblaci?n de nuestro pa?s qued? en evidencia cuando en 2019 se viraliz? un v?deo en el que unos j?venes sevillanos vitoreaban a la Virgen de los Dolores durante una procesi?n de la Semana Santa de Sevilla. “?Dolores, guapa!”, “?Reina del Martes Santo!”, “?El barrio entero pa ti!”, gritaban emocionados. Las im?genes también le acabaron llegando a Jes?s Pascual, un joven director, nacido en Alcal? de Guada?ra en 1997, y que se estaba licenciando justo en aquella época en Comunicaci?n Audiovisual por la Universidad de Sevilla.
“Lo que aparec?a en las im?genes no me sorprendi? en absoluto”, nos explica. “Expresiones de fervor como esas son bastante habituales en Andaluc?a. Lo que s? llam? mi atenci?n fueron los comentarios de muchas personas en redes sociales: ridiculizaban a los protagonistas del v?deo con comentarios crueles. Me daba la sensaci?n de que muchas de las personas que lanzaban cr?ticas no entend?an del todo lo que estaban viendo. Incluso a m? mismo se me escapaban muchos de los c?digos que estaban ah? en juego: sab?a que exist?a la figura del mariquita capillita, pero ten?a muchas preguntas al respecto, as? que empecé a investigar”.
Fue as? como Jes?s acab? arrancando el rodaje de '?Dolores guapa!,' un documental que supone un acercamiento, sensible y filmado de forma bell?sima, pero a la vez directo y muy esclarecedor, a toda la cultura marica que existe hoy en d?a y desde hace décadas en torno a la Semana Santa de Sevilla. Intentando comprender c?mo y por qué se ha ido gestando a lo largo de los a?os. “Para Antonio Bonilla, el productor de la pel?cula”, contin?a Pascual, “el tema principal siempre fue el sentimiento de pertenencia a la ciudad. A m? me atra?a m?s explorar el modelo de homosexualidad local que existi? en Andaluc?a hasta hace pocas décadas, cuyo rastro, considero, se conserva de forma especialmente vivo en el ?mbito de las hermandades. En cualquier caso, la pel?cula habla de cuestiones que sobre todo tienen que ver con la identidad. Intenté reflejar esto desde la primera secuencia, en la que las im?genes se combinan con otro elemento fundamental en '?Dolores guapa!': la voz, el testimonio oral”.
Debido a esto, el documental se sostiene principalmente sobre sus personajes: una galer?a de personas pertenecientes a la comunidad LGTBIQ+ sevillana que nos relatan sus experiencias y reflexiones alrededor de la Semana Santa, la religi?n, Sevilla como concepto (casi podr?amos decir, como 'state of mind'), las cofrad?as, la actitud de la Iglesia y todas las complejas ramificaciones de todos estos temas. “Encontrar a los protagonistas fue m?s f?cil de lo que podr?a pensarse”, confiesa Pascual. “Nos sorprendi? la cantidad de personas que estaban deseando hablar del asunto. Muchas de las cuestiones que quer?amos tratar en el documental eran temas que ellos ya hab?an reflexionado y discutido entre amigos maricas del ?mbito cofrade. Empezamos a tener conversaciones con los perfiles que m?s nos interesaban y estos, a menudo, nos conduc?an hasta otras personas, amigos suyos, que iban ampliando el plantel”.
Lo que, desde luego, no pod?a cruzar a la esfera p?blica era todo lo relativo al deseo y la sexualidad. Aunque todo el mundo imaginaba que el mariquita ten?a relaciones sexuales, este tema era completamente tab?"
Los recuerdos de los protagonistas m?s mayores, especialmente de Antonio, de 88 a?os, conocido en su época como la Palomita de San Gil, plantean casi inevitablemente la relaci?n que los habitantes de Sevilla hab?an tenido tradicionalmente con la homosexualidad. Parecer?a que, incluso en los oscuros tiempos del franquismo, exist?a cierta tolerancia hacia estas personas, algo inédito en otros lugares de nuestro pa?s. “En el modelo local de homosexualidad vigente en la Andaluc?a franquista, el mariquita ten?a unas funciones sociales reservadas para él”, nos explica Jes?s. “Esto permiti? a muchas personas vivir su pluma con mayor visibilidad. Antonio cuenta que, por ejemplo, se paseaba por la ciudad en los a?os cincuenta con vestido y tacones, y asegura no haber sufrido nunca represalias. Al menos, él no las percibi? como tal. Otra de esas funciones ‘sociales’ era la de ser el chiste, divertir, entretener. También exist?an oficios concretos propios de mariquitas y, por supuesto, labores en el ?mbito religioso-ritual mediante las que estas personas pod?an alcanzar cierto prestigio social”. Seg?n Pascual, la transgresi?n de género que encarnaba la figura del mariquita llegaba a resultar incluso necesaria para el resto de la comunidad. ?Podemos hablar entonces de tolerancia? S?, pero con matices y matices que, nos asegura el director, no caben en una simple respuesta. “Lo que, desde luego, no pod?a cruzar a la esfera p?blica era todo lo relativo al deseo y la sexualidad. Aunque todo el mundo imaginaba que el mariquita ten?a relaciones sexuales, este tema era completamente tab?”, afirma.
?Por qué esa devoci?n?
Pero, ?por qué la Semana Santa? ?Qué ha impulsado tradicionalmente a los gais sevillanos a integrarse en las cofrad?as? “Era una pregunta que nosotros mismos ten?amos y nadie nos daba exactamente la misma respuesta”, confiesa el director. “En muchos casos, existe una fascinaci?n estética desde la infancia que te inclina a acercarte. También es normal para la mayor?a de gente de Sevilla llegar a una hermandad por tradici?n familiar. Luego, ya dentro, conoces a otros como t?, de tu edad y mayores, que te sirven de referente y con los que puedes compartir esa fascinaci?n”.
Una predilecci?n que puede adoptar razones y formas muy diversas. Unos la ven como una exaltaci?n de la belleza; otros como una catarsis, un cuelgue colectivo sin necesidad de drogas que casi estar?a relacionado con el Carnaval; otros como un teatro y otros incluso comparan la celebraci?n con el programa de televisi?n 'RuPaul's Drag Race'. ?D?nde queda la religi?n en todo esto? “?Es que todo eso est? muy ligado al sentimiento religioso!”, responde Jes?s. “A m? todo eso me suena a Barroco y a Contrarreforma, 'RuPaul' incluido. En el documental, Antonio habla de las folcl?ricas como si fueran V?rgenes y de las V?rgenes como si fueran folcl?ricas. Otro de los entrevistados cuenta c?mo compr? para el Cristo de su hermandad la misma peluca que le vio a una amiga travesti. La religi?n, tal y como se vive en Sevilla y en Andaluc?a, incluye también toda esa fantas?a. Ahora bien, no podemos dejarnos deslumbrar por lo llamativo de todos estos elementos; en ning?n caso anulan todo lo reaccionario que emana de instituciones como la Iglesia. Conviene andar con pies de plomo, ponerlos siempre en cuesti?n”.
Bachi, uno de los protagonistas del documental, afirma en un momento que “hay dos religiones, la de Roma y la de Sevilla”. Para el director, esa frase, que a muchos les podr?a parecer una exageraci?n, tiene todo el sentido. “A poco que entres en contacto con la forma de vivir lo religioso en Andaluc?a, enseguida te das cuenta de que en muchos aspectos la cosa difiere de la doctrina cat?lica pura y dura. Le le? a Amiri Baraka que el Dios del que se habla en las canciones de los negros no es el mismo que el de las canciones de los blancos, aunque las palabras sean las mismas”.
https://www.uc-4u.com/clip/67f1a905-f16f-46a5-8e77-691e3add0c59_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Una escena del documental. |
Quiz? precisamente por esto, y como se deja entrever en el documental, la Iglesia mantiene una actitud ligeramente ambigua respecto a su convivencia con la comunidad LGTBIQ+ en el entorno de la Semana Santa. Casi parecer?a que la instituci?n se aprovecha del fervor de estas personas, pero sin acabar de aceptarlas. “A principios del siglo XX, el escritor y periodista sevillano Chaves Nogales ya escribi? que la autoridad eclesi?stica es uno de los principales enemigos de la Semana Santa”, nos explica el director. “Durante la fase de investigaci?n, nos contaron que los arzobispos no suelen estar al tanto de los entresijos de las hermandades y su actitud con respecto a este asunto es la de ‘pasar la mano’, siempre que no haya ning?n ‘esc?ndalo’. En cuanto a la relaci?n con la Iglesia, no hay unanimidad. Hay quienes sienten que las hermandades est?n dentro de la Iglesia pero que funcionan de manera distinta, quienes son cat?licos practicantes y van a misa todos los domingos, quienes son ateos y cr?ticos con la Iglesia pero pagan su cuota de hermano y salen de nazareno… Las personas a las que entrevistamos que participan activamente en la vida de sus hermandades durante todo el a?o nos hablaban de su cofrad?a como el grupo peque?o de gente que conocen desde siempre y que ven con frecuencia, y nos reconoc?an que hay gente hom?foba y tr?nsfoba dentro de las hermandades. En este sentido, a menudo lo comparaban con cualquier ambiente laboral”.
Algunas hermandades han supuesto hist?ricamente y en muchos sentidos un refugio, un punto de encuentro para los diferentes, entre ellos los maricones"
Aunque muchas de estas cofrad?as han sido, especialmente en el pasado, un refugio para los gais de Sevilla, un sitio en el que pod?an ser ellos mismos sin censura, sentirse ?tiles y queridos, e incluso ligar, hay que dejar claro que no siempre son un entorno seguro para la gente del colectivo. “Hay hermandades y hermandades, cada una con su idiosincrasia. Pero s? es cierto que algunas han supuesto hist?ricamente y en muchos sentidos un refugio, un punto de encuentro para los diferentes, entre ellos los maricones. Como dec?a antes, el modelo de homosexualidad vigente en la Andaluc?a anterior a la influencia post-Stonewall permit?a cierta visibilidad al mariquita; especialmente, en lo que se refiere a la transgresi?n de género. Dentro de las hermandades hab?a tareas pr?cticamente reservadas para él: la de vestidor de im?genes marianas es, quiz?, la m?s paradigm?tica”, comenta Pascual.
En definitiva, '?Dolores guapa!' es una carta de amor, m?s que a la Semana Santa, a la propia Sevilla, a su arte, a su manera de ser y de vivir y a la comunidad LGTBIQ+ de la ciudad. Una realidad quiz? intuida por algunos, pero desconocida por la mayor?a de los que no vivimos en Andaluc?a. “Nosotros siempre lo entendimos as?”, explica Jes?s, “sobre todo Antonio Bonilla, el productor”. Por desgracia, en la pieza no hubo espacio para mostrar todo lo que recopilaron a lo largo de su investigaci?n. “Hubo anécdotas buen?simas que tuvieron que caerse, incluso entrevistas enteras ya montadas que desaparecieron”, reconoce Jes?s. “Estamos muy agradecidos a todas las personas que colaboraron con nosotros, que son muchas m?s de las que aparecen en el documental. Pero, sin duda, le guardo un cari?o especial a Antonio, la Palomita de San Gil. Conocerlo me impact? mucho. Haber podido registrar su testimonio es lo que m?s me enorgullece de la pel?cula, es un privilegio que forme parte de ella. El documental est? dedicado a él”, concluye.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/television/dolores-guapa-documental-lgtbi-semana-santa-sevilla-80189530)
“Lo que aparec?a en las im?genes no me sorprendi? en absoluto”, nos explica. “Expresiones de fervor como esas son bastante habituales en Andaluc?a. Lo que s? llam? mi atenci?n fueron los comentarios de muchas personas en redes sociales: ridiculizaban a los protagonistas del v?deo con comentarios crueles. Me daba la sensaci?n de que muchas de las personas que lanzaban cr?ticas no entend?an del todo lo que estaban viendo. Incluso a m? mismo se me escapaban muchos de los c?digos que estaban ah? en juego: sab?a que exist?a la figura del mariquita capillita, pero ten?a muchas preguntas al respecto, as? que empecé a investigar”.
Fue as? como Jes?s acab? arrancando el rodaje de '?Dolores guapa!,' un documental que supone un acercamiento, sensible y filmado de forma bell?sima, pero a la vez directo y muy esclarecedor, a toda la cultura marica que existe hoy en d?a y desde hace décadas en torno a la Semana Santa de Sevilla. Intentando comprender c?mo y por qué se ha ido gestando a lo largo de los a?os. “Para Antonio Bonilla, el productor de la pel?cula”, contin?a Pascual, “el tema principal siempre fue el sentimiento de pertenencia a la ciudad. A m? me atra?a m?s explorar el modelo de homosexualidad local que existi? en Andaluc?a hasta hace pocas décadas, cuyo rastro, considero, se conserva de forma especialmente vivo en el ?mbito de las hermandades. En cualquier caso, la pel?cula habla de cuestiones que sobre todo tienen que ver con la identidad. Intenté reflejar esto desde la primera secuencia, en la que las im?genes se combinan con otro elemento fundamental en '?Dolores guapa!': la voz, el testimonio oral”.
Debido a esto, el documental se sostiene principalmente sobre sus personajes: una galer?a de personas pertenecientes a la comunidad LGTBIQ+ sevillana que nos relatan sus experiencias y reflexiones alrededor de la Semana Santa, la religi?n, Sevilla como concepto (casi podr?amos decir, como 'state of mind'), las cofrad?as, la actitud de la Iglesia y todas las complejas ramificaciones de todos estos temas. “Encontrar a los protagonistas fue m?s f?cil de lo que podr?a pensarse”, confiesa Pascual. “Nos sorprendi? la cantidad de personas que estaban deseando hablar del asunto. Muchas de las cuestiones que quer?amos tratar en el documental eran temas que ellos ya hab?an reflexionado y discutido entre amigos maricas del ?mbito cofrade. Empezamos a tener conversaciones con los perfiles que m?s nos interesaban y estos, a menudo, nos conduc?an hasta otras personas, amigos suyos, que iban ampliando el plantel”.
Lo que, desde luego, no pod?a cruzar a la esfera p?blica era todo lo relativo al deseo y la sexualidad. Aunque todo el mundo imaginaba que el mariquita ten?a relaciones sexuales, este tema era completamente tab?"
Los recuerdos de los protagonistas m?s mayores, especialmente de Antonio, de 88 a?os, conocido en su época como la Palomita de San Gil, plantean casi inevitablemente la relaci?n que los habitantes de Sevilla hab?an tenido tradicionalmente con la homosexualidad. Parecer?a que, incluso en los oscuros tiempos del franquismo, exist?a cierta tolerancia hacia estas personas, algo inédito en otros lugares de nuestro pa?s. “En el modelo local de homosexualidad vigente en la Andaluc?a franquista, el mariquita ten?a unas funciones sociales reservadas para él”, nos explica Jes?s. “Esto permiti? a muchas personas vivir su pluma con mayor visibilidad. Antonio cuenta que, por ejemplo, se paseaba por la ciudad en los a?os cincuenta con vestido y tacones, y asegura no haber sufrido nunca represalias. Al menos, él no las percibi? como tal. Otra de esas funciones ‘sociales’ era la de ser el chiste, divertir, entretener. También exist?an oficios concretos propios de mariquitas y, por supuesto, labores en el ?mbito religioso-ritual mediante las que estas personas pod?an alcanzar cierto prestigio social”. Seg?n Pascual, la transgresi?n de género que encarnaba la figura del mariquita llegaba a resultar incluso necesaria para el resto de la comunidad. ?Podemos hablar entonces de tolerancia? S?, pero con matices y matices que, nos asegura el director, no caben en una simple respuesta. “Lo que, desde luego, no pod?a cruzar a la esfera p?blica era todo lo relativo al deseo y la sexualidad. Aunque todo el mundo imaginaba que el mariquita ten?a relaciones sexuales, este tema era completamente tab?”, afirma.
?Por qué esa devoci?n?
Pero, ?por qué la Semana Santa? ?Qué ha impulsado tradicionalmente a los gais sevillanos a integrarse en las cofrad?as? “Era una pregunta que nosotros mismos ten?amos y nadie nos daba exactamente la misma respuesta”, confiesa el director. “En muchos casos, existe una fascinaci?n estética desde la infancia que te inclina a acercarte. También es normal para la mayor?a de gente de Sevilla llegar a una hermandad por tradici?n familiar. Luego, ya dentro, conoces a otros como t?, de tu edad y mayores, que te sirven de referente y con los que puedes compartir esa fascinaci?n”.
Una predilecci?n que puede adoptar razones y formas muy diversas. Unos la ven como una exaltaci?n de la belleza; otros como una catarsis, un cuelgue colectivo sin necesidad de drogas que casi estar?a relacionado con el Carnaval; otros como un teatro y otros incluso comparan la celebraci?n con el programa de televisi?n 'RuPaul's Drag Race'. ?D?nde queda la religi?n en todo esto? “?Es que todo eso est? muy ligado al sentimiento religioso!”, responde Jes?s. “A m? todo eso me suena a Barroco y a Contrarreforma, 'RuPaul' incluido. En el documental, Antonio habla de las folcl?ricas como si fueran V?rgenes y de las V?rgenes como si fueran folcl?ricas. Otro de los entrevistados cuenta c?mo compr? para el Cristo de su hermandad la misma peluca que le vio a una amiga travesti. La religi?n, tal y como se vive en Sevilla y en Andaluc?a, incluye también toda esa fantas?a. Ahora bien, no podemos dejarnos deslumbrar por lo llamativo de todos estos elementos; en ning?n caso anulan todo lo reaccionario que emana de instituciones como la Iglesia. Conviene andar con pies de plomo, ponerlos siempre en cuesti?n”.
Bachi, uno de los protagonistas del documental, afirma en un momento que “hay dos religiones, la de Roma y la de Sevilla”. Para el director, esa frase, que a muchos les podr?a parecer una exageraci?n, tiene todo el sentido. “A poco que entres en contacto con la forma de vivir lo religioso en Andaluc?a, enseguida te das cuenta de que en muchos aspectos la cosa difiere de la doctrina cat?lica pura y dura. Le le? a Amiri Baraka que el Dios del que se habla en las canciones de los negros no es el mismo que el de las canciones de los blancos, aunque las palabras sean las mismas”.
https://www.uc-4u.com/clip/67f1a905-f16f-46a5-8e77-691e3add0c59_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Una escena del documental. |
Quiz? precisamente por esto, y como se deja entrever en el documental, la Iglesia mantiene una actitud ligeramente ambigua respecto a su convivencia con la comunidad LGTBIQ+ en el entorno de la Semana Santa. Casi parecer?a que la instituci?n se aprovecha del fervor de estas personas, pero sin acabar de aceptarlas. “A principios del siglo XX, el escritor y periodista sevillano Chaves Nogales ya escribi? que la autoridad eclesi?stica es uno de los principales enemigos de la Semana Santa”, nos explica el director. “Durante la fase de investigaci?n, nos contaron que los arzobispos no suelen estar al tanto de los entresijos de las hermandades y su actitud con respecto a este asunto es la de ‘pasar la mano’, siempre que no haya ning?n ‘esc?ndalo’. En cuanto a la relaci?n con la Iglesia, no hay unanimidad. Hay quienes sienten que las hermandades est?n dentro de la Iglesia pero que funcionan de manera distinta, quienes son cat?licos practicantes y van a misa todos los domingos, quienes son ateos y cr?ticos con la Iglesia pero pagan su cuota de hermano y salen de nazareno… Las personas a las que entrevistamos que participan activamente en la vida de sus hermandades durante todo el a?o nos hablaban de su cofrad?a como el grupo peque?o de gente que conocen desde siempre y que ven con frecuencia, y nos reconoc?an que hay gente hom?foba y tr?nsfoba dentro de las hermandades. En este sentido, a menudo lo comparaban con cualquier ambiente laboral”.
Algunas hermandades han supuesto hist?ricamente y en muchos sentidos un refugio, un punto de encuentro para los diferentes, entre ellos los maricones"
Aunque muchas de estas cofrad?as han sido, especialmente en el pasado, un refugio para los gais de Sevilla, un sitio en el que pod?an ser ellos mismos sin censura, sentirse ?tiles y queridos, e incluso ligar, hay que dejar claro que no siempre son un entorno seguro para la gente del colectivo. “Hay hermandades y hermandades, cada una con su idiosincrasia. Pero s? es cierto que algunas han supuesto hist?ricamente y en muchos sentidos un refugio, un punto de encuentro para los diferentes, entre ellos los maricones. Como dec?a antes, el modelo de homosexualidad vigente en la Andaluc?a anterior a la influencia post-Stonewall permit?a cierta visibilidad al mariquita; especialmente, en lo que se refiere a la transgresi?n de género. Dentro de las hermandades hab?a tareas pr?cticamente reservadas para él: la de vestidor de im?genes marianas es, quiz?, la m?s paradigm?tica”, comenta Pascual.
En definitiva, '?Dolores guapa!' es una carta de amor, m?s que a la Semana Santa, a la propia Sevilla, a su arte, a su manera de ser y de vivir y a la comunidad LGTBIQ+ de la ciudad. Una realidad quiz? intuida por algunos, pero desconocida por la mayor?a de los que no vivimos en Andaluc?a. “Nosotros siempre lo entendimos as?”, explica Jes?s, “sobre todo Antonio Bonilla, el productor”. Por desgracia, en la pieza no hubo espacio para mostrar todo lo que recopilaron a lo largo de su investigaci?n. “Hubo anécdotas buen?simas que tuvieron que caerse, incluso entrevistas enteras ya montadas que desaparecieron”, reconoce Jes?s. “Estamos muy agradecidos a todas las personas que colaboraron con nosotros, que son muchas m?s de las que aparecen en el documental. Pero, sin duda, le guardo un cari?o especial a Antonio, la Palomita de San Gil. Conocerlo me impact? mucho. Haber podido registrar su testimonio es lo que m?s me enorgullece de la pel?cula, es un privilegio que forme parte de ella. El documental est? dedicado a él”, concluye.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/television/dolores-guapa-documental-lgtbi-semana-santa-sevilla-80189530)