الريــم
12-17-2022, 11:21 AM
Ana Orantesfue asesinada hace 25 a?os, el 17 de diciembre de 1997, por su exmarido, José Parejo. Pocas semanas antes, ella hab?a relatado en Canal Sur los 40 a?os de maltrato que hab?a vivido junto a su verdugo, de quien hab?a logrado divorciarse, pero con quien se ve?a obligada a convivir por orden judicial.
Ese asesinato cambi? la percepci?n de Espa?a sobre la violencia machista, en palabras de la entonces directora del Instituto de la Mujer y actual consejera de Familia, Juventud y Pol?tica Social de la Comunidad de Madrid, Concepci?n Dancausa, quien recuerda aquella fecha como una "conmoci?n".
Hasta aquel momento, relata Dancausa, la violencia de género "no ten?a relevancia en los medios". "Se hablaba poco, se sacaban excepcionalmente los casos e incluso se pon?a en duda si la mujer no tendr?a algo de culpa", explica a EFE.
La hemeroteca del caso Orantes
La hemeroteca demuestra que esto ?ltimo también le pas? a Ana Orantes. "Una fuerte discusi?n precedi? a la ?ltima acci?n", cont? aquel 17 de diciembre un diario de tirada nacional, que explicaba que la aparici?n de la v?ctima en televisi?n "provoc? las iras de su ex marido".
"José P.A. ha declarado que los hechos sucedieron cuando se encontraba limpiando maquinaria agr?cola y fue insultado por Ana Orantes. Acto seguido, en un arrebato, atac? a su mujer y le prendi? fuego", relat? dando voz a la versi?n del asesino.
Mar?a Escudero, que en 1997 dirig?a el centro provincial del Instituto Andaluz de la Mujer en Granada, provincia donde resid?a y fue asesinada Orantes, critica, en declaraciones a Efe, que algunos medios "trataran de justificar" al asesino, a quien se le eximi? del agravante de ensa?amiento en la sentencia.
"En cantidad de medios se la culpabiliz? a ella", lamenta Escudero, quien apunta que ésta no era la ?nica pr?ctica cuestionable que se utilizaba a la hora de hablar de la violencia de género. Relegar ésta al ?mbito familiar y privado también era muy habitual, as? como minimizar lo ocurrido o tratar los casos como si fueran un suceso m?s.
"Bajo el aguacero, el féretro de la v?ctima n?mero 59 de la violencia doméstica en 1997 recibi? un largo aplauso". As? se refiri? otro reconocido medio escrito a Ana Orantes durante su funeral, aludiendo al car?cter "doméstico" del crimen.
Una televisi?n nacional habl? de "un hecho del todo reprobable". "Convierte a su ex en una antorcha tras 40 a?os de vejaciones", titul? otro diario, con la noticia en la secci?n de "sucesos".
Para el entonces vicepresidente del Gobierno, el popular Francisco Fern?ndez-Cascos, el asesinato de Ana Orantes fue un "caso aislado obra de un excéntrico".
El avance en las instituciones
Cuando Ana Orantes fue asesinada, relata Escudero, "todav?a no se hab?a logrado trasladar a los poderes p?blicos que est?bamos ante un problema estructural de la sociedad que deb?a dejar de ser privado para ocupar el primer plano de la agenda p?blica". "Gracias a Ana la gente puso cara a lo que estaba pasando", asegura.
Tres meses después del asesinato, en marzo de 1998, el Gobierno aprob? su primer plan de acci?n contra la violencia doméstica, apunta Dancausa. "Hoy la violencia contra la mujer ha superado la dimensi?n privada y ha pasado a ser considerada como un atentado hacia la propia sociedad", recogi? dicho texto en su introducci?n.
"Empez? un proceso de sensibilizaci?n durante el que se llevaron a cabo campa?as de informaci?n en televisi?n y centros educativos, promoci?n de estudios y cursos de formaci?n dirigida a los medios de comunicaci?n", recuerda Dancausa, quien subraya que "desde el punto de vista legislativo se cambiaron hasta 11 leyes".
Reformas legislativas y nuevas normas
El siguiente paso fue la modificaci?n del C?digo Penal de 1999, a?o en el que se tipific? la violencia psicol?gica como una forma de malos tratos en el ?mbito doméstico. También se reform? la Ley de enjuiciamiento criminal para introducir la persecuci?n de oficio de los malos tratos, es decir, sin necesidad de denuncia por parte de la v?ctima.
Asimismo, se incluyeron las ?rdenes de alejamiento en el art?culo 48 del C?digo Penal, que estableci? la prohibici?n de aproximarse o comunicarse con la v?ctima, sus familiares u otras personas que los tribunales dictaminasen por cualquier medio.
En 2002, el PSOE registr? una proposici?n de ley contra la violencia de género, pero no fue admitida a tr?mite por los votos en contra del Partido Popular, que gobernaba en aquel momento.
Un a?o después, en 2003, se aprob? la Ley reguladora de la Orden de protecci?n de las v?ctimas de la violencia doméstica, que permiti? a los jueces adoptar medidas civiles y penales provisionales en un plazo m?ximo de 72 horas después de recibir una denuncia por violencia machista.
Aquel a?o también se empezaron a contabilizar oficialmente la v?ctimas de la violencia de género, que a d?a de hoy suman 1.174.
La Ley integral contra la violencia de género llegar?a finalmente en 2004 con el Gobierno socialista de José Luis Rodr?guez Zapatero.
La norma fue aprobada por unanimidad e introdujo un agravante por género en los delitos de lesiones, maltrato habitual y trato degradante. También mecanismos de protecci?n para las v?ctimas como indemnizaciones, asistencia jur?dica gratuita o recursos habitacionales, evitando as? que las mujeres maltratadas tuvieran que vivir con su agresor, como le pas? a Ana Orantes.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/ana-orantes-25-anos-asesinato-80076040)
Ese asesinato cambi? la percepci?n de Espa?a sobre la violencia machista, en palabras de la entonces directora del Instituto de la Mujer y actual consejera de Familia, Juventud y Pol?tica Social de la Comunidad de Madrid, Concepci?n Dancausa, quien recuerda aquella fecha como una "conmoci?n".
Hasta aquel momento, relata Dancausa, la violencia de género "no ten?a relevancia en los medios". "Se hablaba poco, se sacaban excepcionalmente los casos e incluso se pon?a en duda si la mujer no tendr?a algo de culpa", explica a EFE.
La hemeroteca del caso Orantes
La hemeroteca demuestra que esto ?ltimo también le pas? a Ana Orantes. "Una fuerte discusi?n precedi? a la ?ltima acci?n", cont? aquel 17 de diciembre un diario de tirada nacional, que explicaba que la aparici?n de la v?ctima en televisi?n "provoc? las iras de su ex marido".
"José P.A. ha declarado que los hechos sucedieron cuando se encontraba limpiando maquinaria agr?cola y fue insultado por Ana Orantes. Acto seguido, en un arrebato, atac? a su mujer y le prendi? fuego", relat? dando voz a la versi?n del asesino.
Mar?a Escudero, que en 1997 dirig?a el centro provincial del Instituto Andaluz de la Mujer en Granada, provincia donde resid?a y fue asesinada Orantes, critica, en declaraciones a Efe, que algunos medios "trataran de justificar" al asesino, a quien se le eximi? del agravante de ensa?amiento en la sentencia.
"En cantidad de medios se la culpabiliz? a ella", lamenta Escudero, quien apunta que ésta no era la ?nica pr?ctica cuestionable que se utilizaba a la hora de hablar de la violencia de género. Relegar ésta al ?mbito familiar y privado también era muy habitual, as? como minimizar lo ocurrido o tratar los casos como si fueran un suceso m?s.
"Bajo el aguacero, el féretro de la v?ctima n?mero 59 de la violencia doméstica en 1997 recibi? un largo aplauso". As? se refiri? otro reconocido medio escrito a Ana Orantes durante su funeral, aludiendo al car?cter "doméstico" del crimen.
Una televisi?n nacional habl? de "un hecho del todo reprobable". "Convierte a su ex en una antorcha tras 40 a?os de vejaciones", titul? otro diario, con la noticia en la secci?n de "sucesos".
Para el entonces vicepresidente del Gobierno, el popular Francisco Fern?ndez-Cascos, el asesinato de Ana Orantes fue un "caso aislado obra de un excéntrico".
El avance en las instituciones
Cuando Ana Orantes fue asesinada, relata Escudero, "todav?a no se hab?a logrado trasladar a los poderes p?blicos que est?bamos ante un problema estructural de la sociedad que deb?a dejar de ser privado para ocupar el primer plano de la agenda p?blica". "Gracias a Ana la gente puso cara a lo que estaba pasando", asegura.
Tres meses después del asesinato, en marzo de 1998, el Gobierno aprob? su primer plan de acci?n contra la violencia doméstica, apunta Dancausa. "Hoy la violencia contra la mujer ha superado la dimensi?n privada y ha pasado a ser considerada como un atentado hacia la propia sociedad", recogi? dicho texto en su introducci?n.
"Empez? un proceso de sensibilizaci?n durante el que se llevaron a cabo campa?as de informaci?n en televisi?n y centros educativos, promoci?n de estudios y cursos de formaci?n dirigida a los medios de comunicaci?n", recuerda Dancausa, quien subraya que "desde el punto de vista legislativo se cambiaron hasta 11 leyes".
Reformas legislativas y nuevas normas
El siguiente paso fue la modificaci?n del C?digo Penal de 1999, a?o en el que se tipific? la violencia psicol?gica como una forma de malos tratos en el ?mbito doméstico. También se reform? la Ley de enjuiciamiento criminal para introducir la persecuci?n de oficio de los malos tratos, es decir, sin necesidad de denuncia por parte de la v?ctima.
Asimismo, se incluyeron las ?rdenes de alejamiento en el art?culo 48 del C?digo Penal, que estableci? la prohibici?n de aproximarse o comunicarse con la v?ctima, sus familiares u otras personas que los tribunales dictaminasen por cualquier medio.
En 2002, el PSOE registr? una proposici?n de ley contra la violencia de género, pero no fue admitida a tr?mite por los votos en contra del Partido Popular, que gobernaba en aquel momento.
Un a?o después, en 2003, se aprob? la Ley reguladora de la Orden de protecci?n de las v?ctimas de la violencia doméstica, que permiti? a los jueces adoptar medidas civiles y penales provisionales en un plazo m?ximo de 72 horas después de recibir una denuncia por violencia machista.
Aquel a?o también se empezaron a contabilizar oficialmente la v?ctimas de la violencia de género, que a d?a de hoy suman 1.174.
La Ley integral contra la violencia de género llegar?a finalmente en 2004 con el Gobierno socialista de José Luis Rodr?guez Zapatero.
La norma fue aprobada por unanimidad e introdujo un agravante por género en los delitos de lesiones, maltrato habitual y trato degradante. También mecanismos de protecci?n para las v?ctimas como indemnizaciones, asistencia jur?dica gratuita o recursos habitacionales, evitando as? que las mujeres maltratadas tuvieran que vivir con su agresor, como le pas? a Ana Orantes.
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