الريــم
12-13-2022, 02:00 PM
Tres jueces, en vez de uno, para controlar previamente las acciones del Centro Nacional de inteligencia. Es la principal propuesta que este martes somete el PNV a la a la toma en consideraci?n del Congreso, con una proposici?n de ley prevista para el inicio de un intenso pleno.
La propuesta de cambio de la Ley del CNI y de la Ley Reguladora del Control Judicial Previo del CNI es el resultado del choque entre el Gobierno y la oposici?n en mayo pasado al trascender ruidosamente -y curiosamente de forma casi simult?nea- la doble dimensi?n del caso Pegasus: el espionaje con ese sistema de escucha del que fueron objeto dirigentes y activistas independentistas catalanes y el asalto sufrido por los m?viles del presidente del Gobierno y los ministros de Interior, Defensa y Agricultura.
El CNI acaba el a?o de su vigésimo aniversario convertido de nuevo en materia de debate pol?tico. La proposici?n de Ley que vuelve a llevar al servicio secreto a la C?mara Baja trae en su articulado tres propuestas de cambio que inciden en la forma de controlarlo y en la forma de nombrar a su jefe.
Jueces por unanimidad
La principal reforma propuesta por los nacionalistas vascos supondr?a que en vez de ser un juez del Tribunal Supremo -actualmente el magistrado Pablo Lucas-, sea un ?rgano judicial colegiado el que conozca y autorice con anterioridad a su ejecuci?n las actuaciones del CNI que pudieran afectar a derechos fundamentales.
Blindando a?n m?s ese control judicial, esa comisi?n de magistrados no podr?a autorizar acciones de espionaje si no fuera por unanimidad, seg?n la proposici?n del PNV, expresada en un periodo m?ximo de 72 horas.
Ese refuerzo de la vigilancia sobre el servicio secreto no tiene el apoyo de los funcionarios implicados. Fuentes de la seguridad del Estado lo rechazan de plano por considerar “excesiva judicializaci?n” la propuesta. De hecho, recuerdan, el CNI es el ?nico servicio secreto del mundo con control judicial previo.
Pueden someterse a un examen judicial posterior las acciones de servicios de inteligencia en Reino Unido, Estados Unidos y Alemania, por ejemplo, por la denuncia de un ciudadano que se acredite como perjudicado. Ese mismo examen en un tribunal resulta en la pr?ctica casi imposible en Francia o Israel, con dos de los m?s herméticos servicios de espionaje de estados democr?ticos.
Ya en mayo pasado, cuando surgi? la discusi?n, diversos jueces del Supremo dejaron caer en diversos medios también su oposici?n a la idea, con el argumento de que entorpecer?a actuaciones urgentes.
Qué saber
El PNV quiere que los jueces que controlen el CNI sepan no solo a quién se va a espiar, por qué y durante cu?nto tiempo, sino también con qué medios. Su proposici?n de Ley prevé que las misiones del CNI sean controladas por jueces también después de su realizaci?n. La ?nica excepci?n que contempla son las fuentes de informaci?n.
Y no solo los jueces sabr?an si el CNI dispone, por ejemplo, de Pegasus. La propuesta sobre la que se posicionan este martes los grupos parlamentarios contempla también que los diputados de la llamada Comisi?n de Secretos Oficiales puedan saber no solo qué hace el CNI, sino con qué herramientas. Ese detalle no lo pudo contar la directora saliente, Paz Esteban, ni la actual en sus comparecencias ante la comisi?n controladora del Congreso, amparadas ante los diputados por la ley de secretos oficiales.
Actualmente, es ilegal para la secretaria de Estado directora del centro, Esperanza Casteleiro, desvelar las herramientas con que trabajan sus agentes. La Ley reguladora del CNI clasifica como secretos, y por tanto de difusi?n prohibida, los medios, las fuentes de informaci?n, la estructura interna y las instalaciones.
Casteleiro fue la mano derecha de la ministra Margarita Robles en Defensa, y fue la ministra quien la puso al frente del organismo de espionaje tras iniciarse la crisis de Pegasus. La propuesta del PNV eleva el rango pol?tico del nombramiento, sosteniendo que sea el presidente del Gobierno, y no el titular de Defensa, quien nombre al jefe del CNI.
Examen a la seguridad del Estado
El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, es el encargado de exponer la proposici?n. No ha habido negociaciones previas para este punto inicial del orden del d?a en el pleno del Congreso, dicen fuentes nacionalistas vascas, aunque s? se espera un nuevo alineamiento a la derecha y la izquierda ante esta propuesta, con Esquerra aprovechando la oportunidad para marcar posici?n en el atril.
El PNV se ha destacado en esta legislatura y el final de la anterior por introducir en el debate parlamentario tres pilares de la pol?tica de seguridad del Estado, sean o no heredadas de la etapa de gobiernos del PP. Y las tres tienen detr?s la arquitectura del diputado Mikel Legarda, que fue letrado de los servicios centrales del Gobierno Vasco, y del profesor de Derecho y portavoz Aitor Esteban. Ambos juristas salieron de las aulas jesuitas de Deusto.
En enero de 2017, Legarda present? la propuesta de reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana, también llamada Ley Mordaza, que a?n hoy se tramita. Ya antes, en 2016, hab?a iniciado su campa?a contra la Ley de Secretos Oficiales. Su toma en consideraci?n fue aceptada en la C?mara Baja, pero su tramitaci?n acab? enterrada.
Teniendo en cuenta ese precedente, el camino de la propuesta sobre las normas del CNI se prevé incierto.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/jueces-controlar-cni-propuesta-congreso-79897587)
La propuesta de cambio de la Ley del CNI y de la Ley Reguladora del Control Judicial Previo del CNI es el resultado del choque entre el Gobierno y la oposici?n en mayo pasado al trascender ruidosamente -y curiosamente de forma casi simult?nea- la doble dimensi?n del caso Pegasus: el espionaje con ese sistema de escucha del que fueron objeto dirigentes y activistas independentistas catalanes y el asalto sufrido por los m?viles del presidente del Gobierno y los ministros de Interior, Defensa y Agricultura.
El CNI acaba el a?o de su vigésimo aniversario convertido de nuevo en materia de debate pol?tico. La proposici?n de Ley que vuelve a llevar al servicio secreto a la C?mara Baja trae en su articulado tres propuestas de cambio que inciden en la forma de controlarlo y en la forma de nombrar a su jefe.
Jueces por unanimidad
La principal reforma propuesta por los nacionalistas vascos supondr?a que en vez de ser un juez del Tribunal Supremo -actualmente el magistrado Pablo Lucas-, sea un ?rgano judicial colegiado el que conozca y autorice con anterioridad a su ejecuci?n las actuaciones del CNI que pudieran afectar a derechos fundamentales.
Blindando a?n m?s ese control judicial, esa comisi?n de magistrados no podr?a autorizar acciones de espionaje si no fuera por unanimidad, seg?n la proposici?n del PNV, expresada en un periodo m?ximo de 72 horas.
Ese refuerzo de la vigilancia sobre el servicio secreto no tiene el apoyo de los funcionarios implicados. Fuentes de la seguridad del Estado lo rechazan de plano por considerar “excesiva judicializaci?n” la propuesta. De hecho, recuerdan, el CNI es el ?nico servicio secreto del mundo con control judicial previo.
Pueden someterse a un examen judicial posterior las acciones de servicios de inteligencia en Reino Unido, Estados Unidos y Alemania, por ejemplo, por la denuncia de un ciudadano que se acredite como perjudicado. Ese mismo examen en un tribunal resulta en la pr?ctica casi imposible en Francia o Israel, con dos de los m?s herméticos servicios de espionaje de estados democr?ticos.
Ya en mayo pasado, cuando surgi? la discusi?n, diversos jueces del Supremo dejaron caer en diversos medios también su oposici?n a la idea, con el argumento de que entorpecer?a actuaciones urgentes.
Qué saber
El PNV quiere que los jueces que controlen el CNI sepan no solo a quién se va a espiar, por qué y durante cu?nto tiempo, sino también con qué medios. Su proposici?n de Ley prevé que las misiones del CNI sean controladas por jueces también después de su realizaci?n. La ?nica excepci?n que contempla son las fuentes de informaci?n.
Y no solo los jueces sabr?an si el CNI dispone, por ejemplo, de Pegasus. La propuesta sobre la que se posicionan este martes los grupos parlamentarios contempla también que los diputados de la llamada Comisi?n de Secretos Oficiales puedan saber no solo qué hace el CNI, sino con qué herramientas. Ese detalle no lo pudo contar la directora saliente, Paz Esteban, ni la actual en sus comparecencias ante la comisi?n controladora del Congreso, amparadas ante los diputados por la ley de secretos oficiales.
Actualmente, es ilegal para la secretaria de Estado directora del centro, Esperanza Casteleiro, desvelar las herramientas con que trabajan sus agentes. La Ley reguladora del CNI clasifica como secretos, y por tanto de difusi?n prohibida, los medios, las fuentes de informaci?n, la estructura interna y las instalaciones.
Casteleiro fue la mano derecha de la ministra Margarita Robles en Defensa, y fue la ministra quien la puso al frente del organismo de espionaje tras iniciarse la crisis de Pegasus. La propuesta del PNV eleva el rango pol?tico del nombramiento, sosteniendo que sea el presidente del Gobierno, y no el titular de Defensa, quien nombre al jefe del CNI.
Examen a la seguridad del Estado
El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, es el encargado de exponer la proposici?n. No ha habido negociaciones previas para este punto inicial del orden del d?a en el pleno del Congreso, dicen fuentes nacionalistas vascas, aunque s? se espera un nuevo alineamiento a la derecha y la izquierda ante esta propuesta, con Esquerra aprovechando la oportunidad para marcar posici?n en el atril.
El PNV se ha destacado en esta legislatura y el final de la anterior por introducir en el debate parlamentario tres pilares de la pol?tica de seguridad del Estado, sean o no heredadas de la etapa de gobiernos del PP. Y las tres tienen detr?s la arquitectura del diputado Mikel Legarda, que fue letrado de los servicios centrales del Gobierno Vasco, y del profesor de Derecho y portavoz Aitor Esteban. Ambos juristas salieron de las aulas jesuitas de Deusto.
En enero de 2017, Legarda present? la propuesta de reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana, también llamada Ley Mordaza, que a?n hoy se tramita. Ya antes, en 2016, hab?a iniciado su campa?a contra la Ley de Secretos Oficiales. Su toma en consideraci?n fue aceptada en la C?mara Baja, pero su tramitaci?n acab? enterrada.
Teniendo en cuenta ese precedente, el camino de la propuesta sobre las normas del CNI se prevé incierto.
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