الريــم
12-10-2022, 01:21 PM
Poco después de aparecer el ‘Segundo sexo’ de*Simone de Beauvoir*en 1949, el premio Nobel François Mauriac se lamentaba: “Ahora lo sabemos todo de la vagina de la autora y es asqueroso”.*La obra maestra de Beauvoir, es sabido, analizaba la condici?n de la mujer en una sociedad, que a punto de entrar en la segunda mitad del siglo XX, segu?a releg?ndola al papel del ‘Otro’, mientras el hombre ocupaba el lugar central y de poder siendo el ‘Uno’. Lo que caus? la repulsi?n de Mauriac*fue el hecho de que la fil?sofa colocara en el centro de sus meditaciones el cuerpo de la mujer, analizando e impulsando desde dentro todas sus derivadas*posibles. Y es que hasta el momento, un cuerpo femenino solo ten?a raz?n de ser si era percibido a través de la mirada masculina.
Tres décadas m?s tarde, en los 80, una buena lectora de Beauvoir, una joven*Annie Ernaux, (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/lydia-vazquez-traductora-amiga-ernaux-76962199)*la misma que este s?bado recibir? de manos del rey de Suecia, la medalla acreditativa del Nobel de Literatura 2022*(la misma distinci?n que Mauriac, lo que son las cosas), se volc? en la escritura de sus libros utiliz?ndose a s? misma como sujeto de la ficci?n, colocando gran parte de las veces su propio cuerpo y sus pasiones, como objeto literario. Entonces,*las viejas susceptibilidades que hab?an alimentado el juicio de Mauriac volvieron a ponerse en marcha y la autora fue considerada por sus pares masculinos como*una escritora menor*–?ay!, esa prosa concisa y directa, tan poco francesa, es decir, tan poco florida- y sobre todo por la obscenidad de mostrar lo que hasta el momento no se hab?a mostrado, especialmente si esa exhibici?n serv?a como*indagaci?n personal y no como objeto de placer masculino. Esa valoraci?n de Ernaux no se transform? hasta bien entrado el siglo XXI.
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
La escritura como venganza
No sorprende en absoluto que el*discurso de aceptaci?n*que Ernaux pronunci? este miércoles girara sobre*la escritura concebida como venganza. Motivos tiene. Varios frentes abiertos en los que practicar la revancha. Haberse tenido que ganar el respeto entre sus colegas universitarios desde la clase social humilde e iletrada a la que pertenece y haber abierto el camino a tantas y tantas autoras que en la actualidad est?n sacando petr?leo de la literatura confesional,*haciendo bueno el viejo adagio de que lo personal es pol?tico. “Mi Nobel es una se?al de justicia y esperanza para todas las escritoras”, dijo la autora.
https://www.uc-4u.com/clip/9adbe553-323f-4acb-a188-e57eb0ea7a24_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg La escritora y premio Nobel Annie Ernaux, en su visita a Estocolmo. | REUTERS
"Estas escritoras han construido un yo intencionalmente, con multitud de decisiones éticas y estéticas. Son ellas pero no son ellas. Y, de hecho, no pueden ser solo ellas porque entonces no ser?a interesante"
Posiblemente sea muy*arriesgado decir que Ernaux es el kil?metro cero de esta tendencia. A principios del siglo XX, y sin movernos de Francia, una autora tan respetada hoy como*Colette,*también sufri? el rechazo de la ‘intelligentsia’*por atreverse a ficcionalizar experiencias personales*-‘La vagabunda’, ‘Mis aprendizajes’ o ‘Lo puro y lo impuro’- que muy poco ten?an que ver con el deseado estereotipo femenino de la época. Pese a su notoriedad, el acceso a la Academia Francesa de la autora de 'Gigi' fue rechazado una y otra vez.
Hoy las compuertas de la escritura confesional femenina, ya sea en forma de autobiograf?a, diario o en modo autoficci?n, se han desbordado*y las escritoras que la practican son legi?n. En Francia,*Christine Angot*y*Vanessa Springora, v?ctimas de abusos en su infancia y adolescencia narraron esa dolorosa experiencia como una forma de conocimiento. El abuso, pero en este caso el sufrido por su madre, también est? en la obra maestra de*Delphine de Vigan*en su ‘Nada se opone a la noche’. Las experiencias de*Deborah Levy y*Rachel Cusk*, dos grandes escritoras brit?nicas, se centran m?s bien en las miserias matrimoniales y en el caso de la segunda, también en las maternales, despojadas de todo sentimentalismo. Y en Estados Unidos no hay que olvidar a grand?simas damas como*Vivian Gornik*o*Joan Didion.
Muchos nombres
En Espa?a y Latinoamérica, son muchas las seguidoras del camino trazado por Ernaux. Lo ha hecho*Rosa Montero*en ‘La rid?cula idea de no volver a verte’ o en la reciente ‘El peligro de estar cuerda’. Lo ha hecho, muy especialmente, la peruana*Gabriela Wiener*que ha convertido su vida ?ntima en objeto de sus muy incendiarios e interesantes libros, como el recién reeditado ‘Sexograf?as’ gracias a los cuales,*como Ernaux,*podr?a decir: “escribo para vengar a mi raza”. Lo han hecho también*Aixa de la Cruz,*con la celebrada ‘Cambiar de idea’, que cuenta su despertar frente a una “violencia estructural” en la que tantas mujeres se han movido, sin cuestionarla y también*Almudena S?nchez*relatando su cuadro depresivo en ‘F?rmaco’.
Hay m?s ejemplos.*Anna Pacheco*(31 a?os), que en el 2029 public? ‘Listas, guapas, limpias’, novela en la que no aceptaba el término autoficci?n, aunque s? reconoce un aire de los tiempos generacional que ha revalorizado a autoras veteranas como Vivian Gornik, Joan Didion o Annie Ernaux. “Son autoras que han sofisticado y estetizado con maestr?a la creaci?n a partir de un “yo. Es un yo construido intencionalmente, con multitud de decisiones éticas y estéticas. Son ellas pero no son ellas. Y, de hecho, no pueden ser solo ellas porque entonces no ser?a interesante”. Escribir en primera personal podria parecer m?s sencillo pero para la escritora barcelonesa no lo es en absoluto as?: “A veces acabas un libro de Annie Ernaux y piensas: “?C?mo puede ser?! ?Esto lo podr?a haber escrito yo cuando ten?a el coraz?n roto! ?Los pensamientos parece que salen solos!”. Y creo que eso es un logro, en cierta manera”. El peligro, sostiene, también est? ah?: “Es muy f?cil fracasar escribiendo de la propia vida”.
"Me interesan las reflexiones de Ernaux sobre el feminismo, el trabajo con la memoria, sobre los problemas para escribir con el material del recuerdo y su b?squeda incesante por una forma para hacerlo"
La b?squeda de la verdad
Si hay una narradora que ha utilizado en la totalidad de sus obras las armas de la autoficci?n es la chilena*Nona Fern?ndez*(51 a?os), que acaba de publicar ‘Space Invaders’, un nueva cata en sus recuerdos personales . Fern?ndez no ley? a Ernaux hasta que en el 2019 le dieron el Premio Formentor, poco después se declaraba fan incondicional de la autora: “Me interesaron sus reflexiones sobre el feminismo, el trabajo con la memoria, sobre los problemas para escribir con el material del recuerdo y su b?squeda incesante por una forma para hacerlo. Recuerdo que citaba a Marx, desde una cita que Perec hab?a usado en ‘Las cosas’. “La b?squeda de los medios, de la forma, es en s? misma parte de la b?squeda de la verdad”. Hablaba también sobre el status de la realidad en la escritura, su calidad de piedra filosofal para el trabajo, pero condicionada siempre a la forma de narraci?n”. Para la chilena el trabajo de la autoficci?n de la Nobel francesa es “una excusa para hablar de experiencias humanas, colectivas, en las que todas nos podemos ver reflejadas”.*
"La escritura del yo de las mujeres y la escritura del cuerpo se dan la mano ampliando el canon, provocando fricciones muy saludables dentro de él y cuestionando las formas del lenguaje"
Otra autora que ha recorrido el camino de la escritura autobiogr?fica sin apenas m?scaras es*Marta Sanz*(55 a?os).*‘Clav?cula’, por ejemplo, es una reflexi?n ?ntima sobre el cuerpo y el dolor.*La*escritora cree que, aunque este tipo de escritura ha sido practicada tanto por hombres como por mujeres, posiblemente sea en ese segundo caso donde revista un car?cter m?s liberador: “Resulta*especialmente emancipadora para las mujeres cuyas voces hab?an quedado silenciadas.*Y este problema, cultural y pol?tico, ético y estético, hace que el ?mbito de la intimidad, de cierta intimidad muy relacionada con el cuerpo, adquiera un primer?simo plano en la literatura. La escritura del yo de las mujeres y la escritura del cuerpo se dan la mano ampliando el canon, provocando fricciones muy saludables dentro de él y cuestionando las formas del lenguaje”.
Tampoco cree Sanz que las escritoras con conciencia de género deban relegarse al territorio del yo ?ntimo: “También podemos escribir novelas épicas y, desde nuestra mirada de mujeres, jugar con las m?scaras de la ficci?n y los aprendizajes*imaginativos”.
Por suerte, el terreno a recorrer no tiene fronteras. El reto cumplido, sin embargo, es haber logrado el reconocimiento, un Nobel, por ejemplo, en esa escritura ?ntima por las mismas razones por las que hace décadas se rechazaba. Venganza cumplida.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/triunfo-femenino-literario-hijas-annie-79790243)
Tres décadas m?s tarde, en los 80, una buena lectora de Beauvoir, una joven*Annie Ernaux, (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/lydia-vazquez-traductora-amiga-ernaux-76962199)*la misma que este s?bado recibir? de manos del rey de Suecia, la medalla acreditativa del Nobel de Literatura 2022*(la misma distinci?n que Mauriac, lo que son las cosas), se volc? en la escritura de sus libros utiliz?ndose a s? misma como sujeto de la ficci?n, colocando gran parte de las veces su propio cuerpo y sus pasiones, como objeto literario. Entonces,*las viejas susceptibilidades que hab?an alimentado el juicio de Mauriac volvieron a ponerse en marcha y la autora fue considerada por sus pares masculinos como*una escritora menor*–?ay!, esa prosa concisa y directa, tan poco francesa, es decir, tan poco florida- y sobre todo por la obscenidad de mostrar lo que hasta el momento no se hab?a mostrado, especialmente si esa exhibici?n serv?a como*indagaci?n personal y no como objeto de placer masculino. Esa valoraci?n de Ernaux no se transform? hasta bien entrado el siglo XXI.
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
La escritura como venganza
No sorprende en absoluto que el*discurso de aceptaci?n*que Ernaux pronunci? este miércoles girara sobre*la escritura concebida como venganza. Motivos tiene. Varios frentes abiertos en los que practicar la revancha. Haberse tenido que ganar el respeto entre sus colegas universitarios desde la clase social humilde e iletrada a la que pertenece y haber abierto el camino a tantas y tantas autoras que en la actualidad est?n sacando petr?leo de la literatura confesional,*haciendo bueno el viejo adagio de que lo personal es pol?tico. “Mi Nobel es una se?al de justicia y esperanza para todas las escritoras”, dijo la autora.
https://www.uc-4u.com/clip/9adbe553-323f-4acb-a188-e57eb0ea7a24_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg La escritora y premio Nobel Annie Ernaux, en su visita a Estocolmo. | REUTERS
"Estas escritoras han construido un yo intencionalmente, con multitud de decisiones éticas y estéticas. Son ellas pero no son ellas. Y, de hecho, no pueden ser solo ellas porque entonces no ser?a interesante"
Posiblemente sea muy*arriesgado decir que Ernaux es el kil?metro cero de esta tendencia. A principios del siglo XX, y sin movernos de Francia, una autora tan respetada hoy como*Colette,*también sufri? el rechazo de la ‘intelligentsia’*por atreverse a ficcionalizar experiencias personales*-‘La vagabunda’, ‘Mis aprendizajes’ o ‘Lo puro y lo impuro’- que muy poco ten?an que ver con el deseado estereotipo femenino de la época. Pese a su notoriedad, el acceso a la Academia Francesa de la autora de 'Gigi' fue rechazado una y otra vez.
Hoy las compuertas de la escritura confesional femenina, ya sea en forma de autobiograf?a, diario o en modo autoficci?n, se han desbordado*y las escritoras que la practican son legi?n. En Francia,*Christine Angot*y*Vanessa Springora, v?ctimas de abusos en su infancia y adolescencia narraron esa dolorosa experiencia como una forma de conocimiento. El abuso, pero en este caso el sufrido por su madre, también est? en la obra maestra de*Delphine de Vigan*en su ‘Nada se opone a la noche’. Las experiencias de*Deborah Levy y*Rachel Cusk*, dos grandes escritoras brit?nicas, se centran m?s bien en las miserias matrimoniales y en el caso de la segunda, también en las maternales, despojadas de todo sentimentalismo. Y en Estados Unidos no hay que olvidar a grand?simas damas como*Vivian Gornik*o*Joan Didion.
Muchos nombres
En Espa?a y Latinoamérica, son muchas las seguidoras del camino trazado por Ernaux. Lo ha hecho*Rosa Montero*en ‘La rid?cula idea de no volver a verte’ o en la reciente ‘El peligro de estar cuerda’. Lo ha hecho, muy especialmente, la peruana*Gabriela Wiener*que ha convertido su vida ?ntima en objeto de sus muy incendiarios e interesantes libros, como el recién reeditado ‘Sexograf?as’ gracias a los cuales,*como Ernaux,*podr?a decir: “escribo para vengar a mi raza”. Lo han hecho también*Aixa de la Cruz,*con la celebrada ‘Cambiar de idea’, que cuenta su despertar frente a una “violencia estructural” en la que tantas mujeres se han movido, sin cuestionarla y también*Almudena S?nchez*relatando su cuadro depresivo en ‘F?rmaco’.
Hay m?s ejemplos.*Anna Pacheco*(31 a?os), que en el 2029 public? ‘Listas, guapas, limpias’, novela en la que no aceptaba el término autoficci?n, aunque s? reconoce un aire de los tiempos generacional que ha revalorizado a autoras veteranas como Vivian Gornik, Joan Didion o Annie Ernaux. “Son autoras que han sofisticado y estetizado con maestr?a la creaci?n a partir de un “yo. Es un yo construido intencionalmente, con multitud de decisiones éticas y estéticas. Son ellas pero no son ellas. Y, de hecho, no pueden ser solo ellas porque entonces no ser?a interesante”. Escribir en primera personal podria parecer m?s sencillo pero para la escritora barcelonesa no lo es en absoluto as?: “A veces acabas un libro de Annie Ernaux y piensas: “?C?mo puede ser?! ?Esto lo podr?a haber escrito yo cuando ten?a el coraz?n roto! ?Los pensamientos parece que salen solos!”. Y creo que eso es un logro, en cierta manera”. El peligro, sostiene, también est? ah?: “Es muy f?cil fracasar escribiendo de la propia vida”.
"Me interesan las reflexiones de Ernaux sobre el feminismo, el trabajo con la memoria, sobre los problemas para escribir con el material del recuerdo y su b?squeda incesante por una forma para hacerlo"
La b?squeda de la verdad
Si hay una narradora que ha utilizado en la totalidad de sus obras las armas de la autoficci?n es la chilena*Nona Fern?ndez*(51 a?os), que acaba de publicar ‘Space Invaders’, un nueva cata en sus recuerdos personales . Fern?ndez no ley? a Ernaux hasta que en el 2019 le dieron el Premio Formentor, poco después se declaraba fan incondicional de la autora: “Me interesaron sus reflexiones sobre el feminismo, el trabajo con la memoria, sobre los problemas para escribir con el material del recuerdo y su b?squeda incesante por una forma para hacerlo. Recuerdo que citaba a Marx, desde una cita que Perec hab?a usado en ‘Las cosas’. “La b?squeda de los medios, de la forma, es en s? misma parte de la b?squeda de la verdad”. Hablaba también sobre el status de la realidad en la escritura, su calidad de piedra filosofal para el trabajo, pero condicionada siempre a la forma de narraci?n”. Para la chilena el trabajo de la autoficci?n de la Nobel francesa es “una excusa para hablar de experiencias humanas, colectivas, en las que todas nos podemos ver reflejadas”.*
"La escritura del yo de las mujeres y la escritura del cuerpo se dan la mano ampliando el canon, provocando fricciones muy saludables dentro de él y cuestionando las formas del lenguaje"
Otra autora que ha recorrido el camino de la escritura autobiogr?fica sin apenas m?scaras es*Marta Sanz*(55 a?os).*‘Clav?cula’, por ejemplo, es una reflexi?n ?ntima sobre el cuerpo y el dolor.*La*escritora cree que, aunque este tipo de escritura ha sido practicada tanto por hombres como por mujeres, posiblemente sea en ese segundo caso donde revista un car?cter m?s liberador: “Resulta*especialmente emancipadora para las mujeres cuyas voces hab?an quedado silenciadas.*Y este problema, cultural y pol?tico, ético y estético, hace que el ?mbito de la intimidad, de cierta intimidad muy relacionada con el cuerpo, adquiera un primer?simo plano en la literatura. La escritura del yo de las mujeres y la escritura del cuerpo se dan la mano ampliando el canon, provocando fricciones muy saludables dentro de él y cuestionando las formas del lenguaje”.
Tampoco cree Sanz que las escritoras con conciencia de género deban relegarse al territorio del yo ?ntimo: “También podemos escribir novelas épicas y, desde nuestra mirada de mujeres, jugar con las m?scaras de la ficci?n y los aprendizajes*imaginativos”.
Por suerte, el terreno a recorrer no tiene fronteras. El reto cumplido, sin embargo, es haber logrado el reconocimiento, un Nobel, por ejemplo, en esa escritura ?ntima por las mismas razones por las que hace décadas se rechazaba. Venganza cumplida.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/triunfo-femenino-literario-hijas-annie-79790243)