الريــم
12-10-2022, 11:30 AM
Envuelta en la oscuridad de una habitaci?n aislada del fr?o por abrigos de pelo que cuelgan de percheros port?tiles, Oksana espera a la primera clienta del d?a en una calle sin luz de la Ucrania que resiste. En la misma acera, un rumor constante e inquieto rompe el silencio de una capital de retaguardia acostumbrada los ?ltimos nueve meses a las incesantes sirenas antiaéreas. Ahora el ruido es otro y proviene de los generadores que no descansan ni de noche ni de d?a en las avenidas de Lviv.
Es lo que algunos mandatarios occidentales han calificado como segunda l?nea de batalla, desde que Vlad?mir Putin decidi? doblegar al pueblo ucraniano haciéndolo sufrir. La realidad de un pa?s que decide su destino en las trincheras, pero también en las urbes de una geograf?a golpeada a base de misiles y drones desde el mes de octubre con la intenci?n de hacer sentir a la poblaci?n los estragos del invierno bajo cero.
El riesgo de un desastre humanitario es alto si el pa?s no es capaz de reparar las instalaciones –y defenderlas—mientras bajan las temperaturas. Un temor que transmiti? el presidente ucraniano, Volod?mir Zelenski, (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/time-elige-zelenski-persona-relevante-79675855) en un reciente discurso, pidiendo al pueblo "hacer cualquier cosa para sobrevivir este invierno".
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
"Putin puede quitarnos la luz y matarnos, pero no ganar? la guerra", suspira Oksana con fr?o en las manos por la falta de calefacci?n. Una carencia abordada en Bucarest por los principales socios de la OTAN y que se ha buscado resolver con el env?o de generadores y nuevas medidas econ?micas. La Administraci?n estadounidense asegura haber presupuestado 1.100 millones para reforzar la red de energ?a ucraniana y la UE se ha comprometido a enviar otros 40 generadores capaces de abastecer a un centro hospitalario cada uno.
Sin aranceles y con subvenciones
Sin embargo, este tipo de paquetes, en los que Espa?a también ha participado con el compromiso de 14 nuevos aparatos (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/robles-reitera-odesa-apoyo-reservas-79406245), no llegan a los ciudadanos de a pie de un pa?s de 40 millones de habitantes que entienden vital su resistencia para no forzar a Kiev a sentarse a negociar.
A Andrii le toca llenar con agua botellas de Coca-Cola en Tern?pil para ducharse antes de ir a trabajar. Oleksandr se muda de Kiev con su mujer, su hija, el gato y dos loros para instalarse en la casa de sus padres en un pueblo a las afueras de la capital mucho m?s f?cil de calentar que su piso kievita. Viktor y Alla apuran encender las velas por la tarde en Shevchenkove, confiando en que la luz volver?.
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
Alternativas adoptadas simult?neamente a las peque?as medidas del Gobierno que buscan favorecer la reducci?n de consumo en la red nacional. La m?s evidente: eliminar los aranceles para la importaci?n de generadores y financiar un porcentaje de la compra.
Sin embargo, no existe una regla com?n para el pa?s y mientras que en regiones del norte, como Sumy, la subvenci?n alcanza el 50% del coste de los generadores con un precio de hasta 50.000 grivnas (alrededor de 1.250 euros), en Lviv se mantiene el porcentaje, pero se fija el precio m?ximo en 30.000 (750 euros, aproximadamente).
El dinero tarda dos meses en llegar y las compras necesitan cumplir con una burocracia que no entiende de temperaturas. Pero la posibilidad de que el Gobierno acabe no pagando, no frena las ventas (multiplicadas por diez en las ?ltimas semanas), especialmente cuando arrecia la nieve y las temperaturas bajo cero que marcan los term?metros en gran parte de Ucrania.
"En nuestra farmacia compramos el generador por 500 euros y la mitad los financi? el Ayuntamiento, pero los costes se multiplican por la gasolina y nadie paga eso", explica Maksym, un farmacéutico de una calle céntrica de Lviv.
Dennis, dependiente de un reseller de Apple, tiene una opini?n similar. En su caso, utilizar tres horas el generador le supone un coste extra de cinco d?lares diarios. "Los m?rgenes se reducen, pero sin electricidad no puedo vender".
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
Imposible no odiar
Viktor no tuvo tanta suerte y a mediados de marzo la artiller?a rusa sepult? bajo las llamas su negocio de carpinter?a. Nacido en 1966, la nota que ped?a a su abuela "cuidar de los m?s peque?os" es el ?nico recuerdo vivo de un abuelo –purgado por la URSS— que no conoci?. Creci? en la pobre Ucrania rural y ahora reza por un hijo y yerno que se juegan la vida en las trincheras del Donb?s.
Una vida condicionada de principio a fin por los deseos de un pa?s vecino al que nunca lleg? a perdonar y que necesit? varias décadas para dejar de odiar. Ahora, con un futuro desconocido, dice que "no hay ninguna manera de reparar el da?o", y ans?a con fuerza una victoria que jam?s aceptar? parcial.
Y aunque los aliados han prometido continuar fielmente a su lado, la ayuda que necesita Ucrania excede lo armament?stico. Seg?n el Instituto por la Paz de Estados Unidos, Ucrania acumula un déficit de 5.000 millones mensuales en los presupuestos, sin incluir lo militar. Para final de a?o se espera ya que la deuda p?blica ascienda del 50% al 95% del PIB.
Conscientes de un posible abandono, el pueblo empuja a unas fuerzas armadas que aspiran a avanzar en invierno y Putin fracasa al confiar en el agotamiento de una sociedad que comprendi? hace tiempo que luchar es la ?nica salida.
Son muchas mentiras rusas desde 2014, muchos muertos. Demasiados entierros cantando el himno nacional que conf?a en el cambio de fortuna. "A veces nos quejamos del fr?o", confiesa Kateryna Kondratenko, de 71 a?os, "entonces mi hija me recuerda que peor est?n en el frente". Soldados sin uniforme en una Ucrania con muchos frentes alejados de la trinchera.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/ucrania-resiste-segunda-linea-batalla-79788478)
Es lo que algunos mandatarios occidentales han calificado como segunda l?nea de batalla, desde que Vlad?mir Putin decidi? doblegar al pueblo ucraniano haciéndolo sufrir. La realidad de un pa?s que decide su destino en las trincheras, pero también en las urbes de una geograf?a golpeada a base de misiles y drones desde el mes de octubre con la intenci?n de hacer sentir a la poblaci?n los estragos del invierno bajo cero.
El riesgo de un desastre humanitario es alto si el pa?s no es capaz de reparar las instalaciones –y defenderlas—mientras bajan las temperaturas. Un temor que transmiti? el presidente ucraniano, Volod?mir Zelenski, (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/time-elige-zelenski-persona-relevante-79675855) en un reciente discurso, pidiendo al pueblo "hacer cualquier cosa para sobrevivir este invierno".
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
"Putin puede quitarnos la luz y matarnos, pero no ganar? la guerra", suspira Oksana con fr?o en las manos por la falta de calefacci?n. Una carencia abordada en Bucarest por los principales socios de la OTAN y que se ha buscado resolver con el env?o de generadores y nuevas medidas econ?micas. La Administraci?n estadounidense asegura haber presupuestado 1.100 millones para reforzar la red de energ?a ucraniana y la UE se ha comprometido a enviar otros 40 generadores capaces de abastecer a un centro hospitalario cada uno.
Sin aranceles y con subvenciones
Sin embargo, este tipo de paquetes, en los que Espa?a también ha participado con el compromiso de 14 nuevos aparatos (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/robles-reitera-odesa-apoyo-reservas-79406245), no llegan a los ciudadanos de a pie de un pa?s de 40 millones de habitantes que entienden vital su resistencia para no forzar a Kiev a sentarse a negociar.
A Andrii le toca llenar con agua botellas de Coca-Cola en Tern?pil para ducharse antes de ir a trabajar. Oleksandr se muda de Kiev con su mujer, su hija, el gato y dos loros para instalarse en la casa de sus padres en un pueblo a las afueras de la capital mucho m?s f?cil de calentar que su piso kievita. Viktor y Alla apuran encender las velas por la tarde en Shevchenkove, confiando en que la luz volver?.
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
Alternativas adoptadas simult?neamente a las peque?as medidas del Gobierno que buscan favorecer la reducci?n de consumo en la red nacional. La m?s evidente: eliminar los aranceles para la importaci?n de generadores y financiar un porcentaje de la compra.
Sin embargo, no existe una regla com?n para el pa?s y mientras que en regiones del norte, como Sumy, la subvenci?n alcanza el 50% del coste de los generadores con un precio de hasta 50.000 grivnas (alrededor de 1.250 euros), en Lviv se mantiene el porcentaje, pero se fija el precio m?ximo en 30.000 (750 euros, aproximadamente).
El dinero tarda dos meses en llegar y las compras necesitan cumplir con una burocracia que no entiende de temperaturas. Pero la posibilidad de que el Gobierno acabe no pagando, no frena las ventas (multiplicadas por diez en las ?ltimas semanas), especialmente cuando arrecia la nieve y las temperaturas bajo cero que marcan los term?metros en gran parte de Ucrania.
"En nuestra farmacia compramos el generador por 500 euros y la mitad los financi? el Ayuntamiento, pero los costes se multiplican por la gasolina y nadie paga eso", explica Maksym, un farmacéutico de una calle céntrica de Lviv.
Dennis, dependiente de un reseller de Apple, tiene una opini?n similar. En su caso, utilizar tres horas el generador le supone un coste extra de cinco d?lares diarios. "Los m?rgenes se reducen, pero sin electricidad no puedo vender".
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
Imposible no odiar
Viktor no tuvo tanta suerte y a mediados de marzo la artiller?a rusa sepult? bajo las llamas su negocio de carpinter?a. Nacido en 1966, la nota que ped?a a su abuela "cuidar de los m?s peque?os" es el ?nico recuerdo vivo de un abuelo –purgado por la URSS— que no conoci?. Creci? en la pobre Ucrania rural y ahora reza por un hijo y yerno que se juegan la vida en las trincheras del Donb?s.
Una vida condicionada de principio a fin por los deseos de un pa?s vecino al que nunca lleg? a perdonar y que necesit? varias décadas para dejar de odiar. Ahora, con un futuro desconocido, dice que "no hay ninguna manera de reparar el da?o", y ans?a con fuerza una victoria que jam?s aceptar? parcial.
Y aunque los aliados han prometido continuar fielmente a su lado, la ayuda que necesita Ucrania excede lo armament?stico. Seg?n el Instituto por la Paz de Estados Unidos, Ucrania acumula un déficit de 5.000 millones mensuales en los presupuestos, sin incluir lo militar. Para final de a?o se espera ya que la deuda p?blica ascienda del 50% al 95% del PIB.
Conscientes de un posible abandono, el pueblo empuja a unas fuerzas armadas que aspiran a avanzar en invierno y Putin fracasa al confiar en el agotamiento de una sociedad que comprendi? hace tiempo que luchar es la ?nica salida.
Son muchas mentiras rusas desde 2014, muchos muertos. Demasiados entierros cantando el himno nacional que conf?a en el cambio de fortuna. "A veces nos quejamos del fr?o", confiesa Kateryna Kondratenko, de 71 a?os, "entonces mi hija me recuerda que peor est?n en el frente". Soldados sin uniforme en una Ucrania con muchos frentes alejados de la trinchera.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/internacional/ucrania-resiste-segunda-linea-batalla-79788478)