الريــم
12-05-2022, 04:34 PM
La inflaci?n es un impuesto transversal que acaba pagando todo el mundo y que pasa m?s factura a quien menos tiene. Y esa m?xima que se aplica a las familias también rige entre las grandes, medianas y peque?as empresas. El 2022 finaliza con la campa?a de Navidad, un momento siempre boyante para los negocios que han tenido que capear un a?o de encarecimiento de costes. No obstante, no todos los sectores est?n sufriendo por igual la crisis del IPC y mientras hay gremios que incluso han aumentado sus m?rgenes de beneficios, otros los han visto menguar mes tras mes. Seg?n un estudio de la patronal Pimec, la escalada energética ha instalado en pérdidas al 25% de las pymes, que ven peligrar sus negocios si esta contin?a durante el a?o que viene.
Al incremento general de costes se le ha sumado en el caso de los pescaderos la mala mar de las ?ltimas semanas, que amenaza con encarecer los frutos del mar que se sirvan en las mesas navide?as. La harina, el trigo y el gas de los hornos llevan todo el a?o siendo un dolor de cabeza para los panaderos y pasteleros, que han visto como todo lo necesario para elaborar un postre les sal?a m?s caro. Y venga del mar o del campo, cualquier producto hasta llegar a su comprador acaba pasando en alg?n momento u otro por un transportista, que ha visto como desde la gasolina del tanque hasta el caucho de las ruedas se disparaban de precio por el encarecimiento del combustible.
"Antes preguntaban cu?nto pesa, ahora cu?nto cuesta"
La familia de Elisenda Go?i lleva desde 1888 con una parada en el Mercat de la Concepci? de Barcelona. “Ya est?bamos cuando se inaugur? el mercado”, cuenta esta barcelonesa. Su pescader?a, ‘Sunta’, lleva el cari?oso diminutivo por el que todo el mundo conoc?a a su tatarata abuela. En 134 a?os han visto –y sobrevivido a- crisis de todo tipo y de la actual no tienen duda que saldr?n adelante. No obstante, Go?i reconoce que “ha sido un a?o dif?cil, todo lo que envuelve al pescado ha subido mucho”. Seg?n datos del INE, el pescado se paga un 11% m?s caro hoy que hace un a?o y el marisco un 9%.
"Antes ten?as m?s margen para no repercutir precios, pero con la subida de los suministros es muy complicado”
“De luz pago el doble, el precio del hielo se ha mantenido, pero las bolsas y las bandejas de pl?stico est?n disparadas”, comenta esta comerciante. Go?i no se atreve a hacer una previsi?n de cu?nto pagar?n las familias que opten por platos de pescado o frutos del mar en sus mesas estas Navidades, aunque da por “imposible” que no sea m?s de lo que pagaron el a?o pasado. “Ha habido muchos temporales y eso siempre encarece el producto. Nosotros bajamos cada d?a a Mercabarna a por género y cada d?a es un mundo. Antes ten?as m?s margen para no repercutir precios, pero con la subida de los suministros es muy complicado”, explica.
El pescado ha subido, sin ser ni mucho menos el producto que m?s ha subido en este 2022 marcado por la inflaci?n. Lo que, sumado a unos sueldos que por lo general no le han seguido el ritmo al IPC, se nota cuando la gente se dirige a la m?s que centenaria parada de los Go?i. “Antes la gente preguntaba cu?nto pesaba la pieza, ahora preguntan cu?nto cuesta”, cuenta la barcelonesa. En esta pescader?a han tenido que tirar de imaginaci?n para tratar de contener costes. Por ejemplo, tardan m?s en encender la luz por las ma?anas y pr?cticamente montan la parada a oscuras. Por la noche la apagan antes. Otro truco es reaprovechar el hielo derretido para con esa agua fregar el suelo. "Tenemos que buscarnos la vida como podemos", cuenta Go?i.
"Hemos reducido a la mitad los kil?metros que hacen los camiones vac?os"
El sector del transporte es uno de los que m?s directamente se han visto afectados por el encarecimiento de precios este a?o, espoleado este por el alza de la energ?a. “No es solo que nos suba el coste de la gasolina, que nos ha subido. Llenar el dep?sito de un cami?n hoy te cuesta casi el doble que hace un a?o. Sino que las ruedas est?n hechas con caucho, que depende de los combustibles f?siles, para las piezas del motor hemos sufrido los cortes de suministros por la guerra [de Ucrania], hemos tenido que subir un 10% los sueldos porque si no, no encontramos conductores… nos ha subido todo”, afirma el consejero delegado de Lotrans, Jes?s Lozano.
Este empresario familiar, de segunda generaci?n de transportistas, tiene una flota de 350 camiones y es, a su vez, presidente de la organizaci?n sectorial Transcalit. Cuenta que, de momento, la campa?a de Navidad todav?a no ha arrancado, cuando para estas mismas fechas otros a?os hab?a m?s movimiento. “El Black Friday ha sido menos intenso, el comercio digital ha bajado [respecto a la pandemia]. Y la gente est? asustada y espera hasta el ?ltimo momento para pedir el género”, afirma. Y hasta que estos no piden, sus camiones no se mueven.
"La gente est? asustada y espera hasta el ?ltimo momento para pedir el género"
Lozano ha indexado sus tarifas al precio de la gasolina, si esta sube el precio que le cobra al cliente también lo hace, porque si no le es imposible soportar el vaivén de costes. Para no tener que repercutir todo el coste, en Lotrans han invertido en eficiencia. Antes de la pandemia cada mes hac?an unos 110.000 kil?metros con los camiones vac?os, en desplazamientos a repostar, a buscar mercanc?a u otros. Ahora interconectan viajes e incluso cooperan con otras compa??as del sector, hasta el punto que han reducido casi a la mitad ese kilometraje vac?o.
Otra f?rmula que Lotrans ha podido implementar es renovar parte de la flota, apostando por camiones m?s nuevos y con menor consumo de gasolina por kil?metro. Algo que una empresa grande como la suya puede permitirse y amortiguar parte del coste a futuro a costa de inversi?n a presente. Pero que los peque?os transportistas muchas veces no tienen colch?n para afrontar.
El sector del transporte ha sido escenario este 2022 de dos paros generales, el primero, en marzo, con especial impacto. Y el segundo, sin apenas incidencia. Mientras organizaciones como Transcalit apostaron por reforzar el di?logo con el Gobierno para reclamarle medidas, otros se lanzaron a la carretera a protestar. Dos v?as distintas, cimentadas sobre un descontento compartido por el encarecimiento general de costes que, especialmente para los m?s peque?os, hacen dif?cil seguir compitiendo y ser rentables en el sector.
"Por precio es imposible competir, hay que mejorar la calidad"
La familia Bellart hace 70 a?os que regenta un horno-pasteler?a, ubicado en la rambla del Poblenou de Barcelona. "Hemos vivido de todo. Recuerdo la crisis del petr?leo -hace 40 a?os- cuando la inflaci?n también estaba disparada y mi padre ten?a que subir dos veces al a?o el precio del género", cuenta Antoni Bellart, actual propietario y también presidente del Gremi de Pastissers.
Cayeron las primeras bombas en Ucrania y aqu? subi? el pan. Actualmente se paga el 14,9% m?s caro que hace un a?o, seg?n los ?ltimos datos del INE. "No hemos repercutido todo el aumento de costes al precio. No podemos porque los clientes no vendr?an. Ya nos consideran caros comparados con los supermercados", afirma. Seg?n esos mismos datos del INE, la harina se ha encarecido un 37,8% o el az?car un 42,8%. "En suministros pagamos m?s del doble", lamenta. Aquellos panaderos que utilizan horno de gas fueron de los primeros afectados por el inicio de la invasi?n rusa y no todos tienen alternativa para emplear otro tipo de horno.
"Tienen que subir los salarios, sino la gente no va a poder venir a comprar"
Los m?rgenes empresariales de las pymes no suelen ser holgados y ello les ha obligado a ajustarse el cintur?n con los recursos disponibles. En enero una de las dependientas de la pasteler?a Bellart tuvo que coger la baja por incapacidad temporal y no la suplieron mientras estuvo fuera. “Echamos m?s horas los que somos de la familia, no queda otra”, afirma. Los salarios, cuenta, son el principal costo dentro de los balances que cierra mes a mes. Este empresario est? a favor que suban, “porque si la gente no tiene dinero tampoco podr? consumir”, reflexiona. E intenta hacer malabares para respetar a su plantilla y a la vez cuadrar balances. Bellart es optimista de cara a Navidades, tras un a?o que define como "duro".
"Siempre son d?as buenos, especialmente el d?a de Reyes. La gente no escatima, siempre quiere tener un buen 'tortell' en la mesa. Luego el enero ya veremos como se pasa, pero las fiestas quieren disfrutarlas", anticipa. A su favor, seg?n cuenta, juega que la inflaci?n es transversal y no hay negocio que no se vea afectado. Restaurantes incluidos, que también han subido precios y salir a comer fuera suele salir m?s caro que cocinar y bajar a comprar el postre. "Los precios no los podemos ajustar m?s, hemos tenido que jugar la carta de la calidad. Ganaré menos con cada 'tortell' pero si son buenos venderé m?s. No nos queda otra", concluye. Este a?o han organizado un concurso de turrones 'cremats' para promocionarse y ganar cartel ante los clientes que quieren y pueden permitirse apostar por producto artesano y de proximidad.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/economia/navidades-inflacion-distintos-sectores-cliente-79504787)
Al incremento general de costes se le ha sumado en el caso de los pescaderos la mala mar de las ?ltimas semanas, que amenaza con encarecer los frutos del mar que se sirvan en las mesas navide?as. La harina, el trigo y el gas de los hornos llevan todo el a?o siendo un dolor de cabeza para los panaderos y pasteleros, que han visto como todo lo necesario para elaborar un postre les sal?a m?s caro. Y venga del mar o del campo, cualquier producto hasta llegar a su comprador acaba pasando en alg?n momento u otro por un transportista, que ha visto como desde la gasolina del tanque hasta el caucho de las ruedas se disparaban de precio por el encarecimiento del combustible.
"Antes preguntaban cu?nto pesa, ahora cu?nto cuesta"
La familia de Elisenda Go?i lleva desde 1888 con una parada en el Mercat de la Concepci? de Barcelona. “Ya est?bamos cuando se inaugur? el mercado”, cuenta esta barcelonesa. Su pescader?a, ‘Sunta’, lleva el cari?oso diminutivo por el que todo el mundo conoc?a a su tatarata abuela. En 134 a?os han visto –y sobrevivido a- crisis de todo tipo y de la actual no tienen duda que saldr?n adelante. No obstante, Go?i reconoce que “ha sido un a?o dif?cil, todo lo que envuelve al pescado ha subido mucho”. Seg?n datos del INE, el pescado se paga un 11% m?s caro hoy que hace un a?o y el marisco un 9%.
"Antes ten?as m?s margen para no repercutir precios, pero con la subida de los suministros es muy complicado”
“De luz pago el doble, el precio del hielo se ha mantenido, pero las bolsas y las bandejas de pl?stico est?n disparadas”, comenta esta comerciante. Go?i no se atreve a hacer una previsi?n de cu?nto pagar?n las familias que opten por platos de pescado o frutos del mar en sus mesas estas Navidades, aunque da por “imposible” que no sea m?s de lo que pagaron el a?o pasado. “Ha habido muchos temporales y eso siempre encarece el producto. Nosotros bajamos cada d?a a Mercabarna a por género y cada d?a es un mundo. Antes ten?as m?s margen para no repercutir precios, pero con la subida de los suministros es muy complicado”, explica.
El pescado ha subido, sin ser ni mucho menos el producto que m?s ha subido en este 2022 marcado por la inflaci?n. Lo que, sumado a unos sueldos que por lo general no le han seguido el ritmo al IPC, se nota cuando la gente se dirige a la m?s que centenaria parada de los Go?i. “Antes la gente preguntaba cu?nto pesaba la pieza, ahora preguntan cu?nto cuesta”, cuenta la barcelonesa. En esta pescader?a han tenido que tirar de imaginaci?n para tratar de contener costes. Por ejemplo, tardan m?s en encender la luz por las ma?anas y pr?cticamente montan la parada a oscuras. Por la noche la apagan antes. Otro truco es reaprovechar el hielo derretido para con esa agua fregar el suelo. "Tenemos que buscarnos la vida como podemos", cuenta Go?i.
"Hemos reducido a la mitad los kil?metros que hacen los camiones vac?os"
El sector del transporte es uno de los que m?s directamente se han visto afectados por el encarecimiento de precios este a?o, espoleado este por el alza de la energ?a. “No es solo que nos suba el coste de la gasolina, que nos ha subido. Llenar el dep?sito de un cami?n hoy te cuesta casi el doble que hace un a?o. Sino que las ruedas est?n hechas con caucho, que depende de los combustibles f?siles, para las piezas del motor hemos sufrido los cortes de suministros por la guerra [de Ucrania], hemos tenido que subir un 10% los sueldos porque si no, no encontramos conductores… nos ha subido todo”, afirma el consejero delegado de Lotrans, Jes?s Lozano.
Este empresario familiar, de segunda generaci?n de transportistas, tiene una flota de 350 camiones y es, a su vez, presidente de la organizaci?n sectorial Transcalit. Cuenta que, de momento, la campa?a de Navidad todav?a no ha arrancado, cuando para estas mismas fechas otros a?os hab?a m?s movimiento. “El Black Friday ha sido menos intenso, el comercio digital ha bajado [respecto a la pandemia]. Y la gente est? asustada y espera hasta el ?ltimo momento para pedir el género”, afirma. Y hasta que estos no piden, sus camiones no se mueven.
"La gente est? asustada y espera hasta el ?ltimo momento para pedir el género"
Lozano ha indexado sus tarifas al precio de la gasolina, si esta sube el precio que le cobra al cliente también lo hace, porque si no le es imposible soportar el vaivén de costes. Para no tener que repercutir todo el coste, en Lotrans han invertido en eficiencia. Antes de la pandemia cada mes hac?an unos 110.000 kil?metros con los camiones vac?os, en desplazamientos a repostar, a buscar mercanc?a u otros. Ahora interconectan viajes e incluso cooperan con otras compa??as del sector, hasta el punto que han reducido casi a la mitad ese kilometraje vac?o.
Otra f?rmula que Lotrans ha podido implementar es renovar parte de la flota, apostando por camiones m?s nuevos y con menor consumo de gasolina por kil?metro. Algo que una empresa grande como la suya puede permitirse y amortiguar parte del coste a futuro a costa de inversi?n a presente. Pero que los peque?os transportistas muchas veces no tienen colch?n para afrontar.
El sector del transporte ha sido escenario este 2022 de dos paros generales, el primero, en marzo, con especial impacto. Y el segundo, sin apenas incidencia. Mientras organizaciones como Transcalit apostaron por reforzar el di?logo con el Gobierno para reclamarle medidas, otros se lanzaron a la carretera a protestar. Dos v?as distintas, cimentadas sobre un descontento compartido por el encarecimiento general de costes que, especialmente para los m?s peque?os, hacen dif?cil seguir compitiendo y ser rentables en el sector.
"Por precio es imposible competir, hay que mejorar la calidad"
La familia Bellart hace 70 a?os que regenta un horno-pasteler?a, ubicado en la rambla del Poblenou de Barcelona. "Hemos vivido de todo. Recuerdo la crisis del petr?leo -hace 40 a?os- cuando la inflaci?n también estaba disparada y mi padre ten?a que subir dos veces al a?o el precio del género", cuenta Antoni Bellart, actual propietario y también presidente del Gremi de Pastissers.
Cayeron las primeras bombas en Ucrania y aqu? subi? el pan. Actualmente se paga el 14,9% m?s caro que hace un a?o, seg?n los ?ltimos datos del INE. "No hemos repercutido todo el aumento de costes al precio. No podemos porque los clientes no vendr?an. Ya nos consideran caros comparados con los supermercados", afirma. Seg?n esos mismos datos del INE, la harina se ha encarecido un 37,8% o el az?car un 42,8%. "En suministros pagamos m?s del doble", lamenta. Aquellos panaderos que utilizan horno de gas fueron de los primeros afectados por el inicio de la invasi?n rusa y no todos tienen alternativa para emplear otro tipo de horno.
"Tienen que subir los salarios, sino la gente no va a poder venir a comprar"
Los m?rgenes empresariales de las pymes no suelen ser holgados y ello les ha obligado a ajustarse el cintur?n con los recursos disponibles. En enero una de las dependientas de la pasteler?a Bellart tuvo que coger la baja por incapacidad temporal y no la suplieron mientras estuvo fuera. “Echamos m?s horas los que somos de la familia, no queda otra”, afirma. Los salarios, cuenta, son el principal costo dentro de los balances que cierra mes a mes. Este empresario est? a favor que suban, “porque si la gente no tiene dinero tampoco podr? consumir”, reflexiona. E intenta hacer malabares para respetar a su plantilla y a la vez cuadrar balances. Bellart es optimista de cara a Navidades, tras un a?o que define como "duro".
"Siempre son d?as buenos, especialmente el d?a de Reyes. La gente no escatima, siempre quiere tener un buen 'tortell' en la mesa. Luego el enero ya veremos como se pasa, pero las fiestas quieren disfrutarlas", anticipa. A su favor, seg?n cuenta, juega que la inflaci?n es transversal y no hay negocio que no se vea afectado. Restaurantes incluidos, que también han subido precios y salir a comer fuera suele salir m?s caro que cocinar y bajar a comprar el postre. "Los precios no los podemos ajustar m?s, hemos tenido que jugar la carta de la calidad. Ganaré menos con cada 'tortell' pero si son buenos venderé m?s. No nos queda otra", concluye. Este a?o han organizado un concurso de turrones 'cremats' para promocionarse y ganar cartel ante los clientes que quieren y pueden permitirse apostar por producto artesano y de proximidad.
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