الريــم
12-05-2022, 09:40 AM
Andaluc?a se convierte en la bandera del oficialismo de Podemosen los territorios. El partido afronta en los ?ltimos meses cierto descontrol en sus federaciones (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/seguidismo-pablo-iglesias-tensa-costuras-78900357), que se han visto obligadas a buscar un equilibrio entre apoyar a Yolanda D?az y al mismo tiempo defender las tesis de un partido que carga precisamente contra la l?der del espacio. Y mientras esta ambivalencia se abre paso a lo largo y ancho del pa?s, la federaci?n andaluza se alza como altavoz de la direcci?n estatal. La ?ltima exhibici?n ha tenido lugar en los ?ltimos d?as, con la decisi?n de Podemos Andaluc?a de llevar a los ayuntamientos mociones de apoyo a la Irene Montero, siguiendo la campa?a iniciada en el partido para ensalzar a la ministra.
La federaci?n andaluza va a presentar mociones en los consistorios como muestra de “solidaridad” hacia la ministra de Igualdad, que se perfila como la candidata del partido en las generales (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/irene-montero-emerge-candidata-generales-78427294) ante el previsible desacuerdo con Yolanda D?az. Estas declaraciones institucionales van encaminadas a “mostrar el total rechazo a la violencia pol?tica”, un término empleado por la c?pula de Podemos en favor de la ministra de Igualdad, que estos d?as mide su liderazgo (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/irene-montero-toma-riendas-unidas-79382482) frente al de la vicepresidenta segunda del Gobierno. No es la primera vez que reproducen en Podemos Andaluc?a las l?neas de la direcci?n. Ya en marzo despleg? en los ayuntamientos mociones en apoyo al pacifismo defendido por Ione Belarra, que se opuso al env?o de armas a Ucrania en contra de la vicepresidenta segunda, que s? respald? la medida.
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Esta din?mica de llevar a los rincones andaluces el discurso de la c?pula difiere al resto de federaciones de Podemos, que tratan de poner tierra de por medio a las din?micas internas del partido en Madrid y las batallas que all? se abren. El modelo de organizaci?n territorial, con la expulsi?n de voces cr?ticas en sus bastiones, ha llevado a que las federaciones no entren a cuestionar abiertamente las pol?ticas de la direcci?n. Sin embargo, algunos territorios optan por marcar su agenda propia aisl?ndose de las polémicas madrile?as. No es el caso de Andaluc?a.
Andaluc?a ha sido en los ?ltimos meses escenario de la pugna abierta entre el partido y Yolanda D?az. En las elecciones anticipadas de junio, las distintas fuerzas intentaron alcanzar un acuerdo que pretend?a ser el proyecto piloto del ‘frente amplio’ de la vicepresidenta del Gobierno. El resultado fue desastroso. Los recelos entre Podemos, IU y M?s Andaluc?a llevaron a una negociaci?n extrema que en el caso de los morados fue teledirigida a nivel estatal. El partido trat? de situar como cabeza de lista a su candidato, tensando la cuerda hasta el ?ltimo momento. Yolanda D?az acudi? a Andaluc?a (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/yolanda-diaz-interviene-in-extremis-13614192) en plenas negociaciones para apoyar claramente a Inmaculada Nieto, de IU, como candidata. Un gesto que sent? mal en la c?pula y marc? un punto de inflexi?n en su relaci?n con la titular de Trabajo.
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El acuerdo andaluz finalmente se alcanz?, pero no de la forma esperada. Podemos present? una oferta en el ?ltimo minuto: aceptaba no ser cabeza de lista a cambio de quedarse con mayor?a en el grupo parlamentario y gran parte de los recursos. Pero tan justo fue el plazo que el partido qued? fuera del registro oficial de la coalici?n, quedando sin el control de la candidatura y sin que sus siglas aparecieran en la papeleta. El partido acus? a IU de excluirles adrede.
Los resultados tampoco acompa?aron. Perdieron la mitad de los diputados (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/urnas-castigan-fractura-izquierda-andaluza-13892554), inmersos en una guerra que a d?a de hoy contin?a y D?az se desvincul? de aquel acuerdo fallido. Mientras, en la c?pula de Podemos en Madrid utilizan desde entonces aquel fracaso electoral como un ejemplo para reafirmar su tesis de que, sin Podemos como fuerza nodriza, la izquierda m?s all? del PSOE quedaba debilitada. El sacrificio de Podemos en Andaluc?a servir?a para cargar de argumentos al partido en su guerra con Yolanda D?az por el control del espacio.
La vicepresidenta segunda del Gobierno no ha vuelto a pisar Andaluc?a desde entonces para desplegar su proyecto. Siete meses después de que desembarcara en la feria de Sevilla para mediar con las distintas fuerzas, todav?a no ha llevado all? su proyecto Sumar, que s? ha pasado hasta ahora por Galicia, Pa?s Vasco, Comunidad Valenciana, Extremadura, Asturias, Catalu?a, La Rioja o Navarra.
Extensi?n de las batallas madrile?as
Podemos Andaluc?a ha representado la extensi?n de la c?pula madrile?a y sus batallas, reproduciendo sus l?gicas y argumentos; tanto es as? que la federaci?n achaca su situaci?n con el resto de partidos al escenario nacional, llegando a considerar que estaban pagando all? los envites de la direcci?n contra Yolanda D?az en Madrid. “Nos hacen lo que no se atreven con Ione (Belarra) o Irene (Montero)”, se quejaban en estas p?ginas.
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Desde aquellos comicios Podemos Andaluc?a ha dado cobertura al ex l?der del partido, Pablo Iglesias, que se ha convertido en la voz m?s dura contra la vicepresidenta de Gobierno. Durante la campa?a electoral, fue all? donde el ex dirigente present? un libro que recibi? la cobertura y difusi?n de la federaci?n territorial. Un protagonismo que le dieron los andaluces que, conforme fue aumentando la tensi?n con D?az, fue escalando también a nivel nacional. El m?ximo exponente tuvo lugar hace un mes, con la universidad de Oto?o de Podemos donde Iglesias protagoniz? un duro discurso contra la vicepresidenta del Gobierno.
? Con la verdad y la democracia por delante siempre. PRESIDENTA. pic.twitter.com/n1BFqeUub4 (https://t.co/n1BFqeUub4)
— Podemos Sevilla (@PodemosSevilla) 9 de noviembre de 2022 (https://twitter.com/PodemosSevilla/status/1590262089821859841?ref_src=twsrc%5Etfw)Aquel acto sirvi? también para lanzar a Irene Montero como candidata para las generales frente a la gallega. Una operaci?n que llevaba fraguando desde verano. Aunque en el espacio llevaban meses advirtiendo de su lanzamiento como candidata, fue precisamente en Andaluc?a donde la formaci?n hizo expl?cita esta estrategia. En una cuenta oficial de Twitter del partido de Sevilla, publicaron la intervenci?n de la ministra de Igualdad acompa?ado del siguiente mensaje: “Presidenta”. Una consigna que ni siquiera en Madrid se hab?an decidido a hacer p?blica.
La reconstrucci?n de Podemos Andaluc?a
Para entender las din?micas que existen entre la direcci?n y su federaci?n andaluza, hay que conocer las particularidades de Podemos en la comunidad m?s poblada de Espa?a, donde tuvo que empezar de cero en 2020 a nivel organizativo. Una reconstrucci?n que fue dirigida en gran medida por la c?pula de Madrid. Desde el nacimiento del partido en 2014, la federaci?n hab?a estado liderada por Teresa Rodr?guez, de la corriente anticapitalista, que conviv?a con los llamados errejonistas. Durante los primeros a?os la convivencia fue m?s o menos pac?fica y las distintas facciones tuvieron voz a nivel parlamentario. Pero en 2019 se rompi? el idilio.
La repetici?n electoral de noviembre de aquel a?o termin? por descapitalizar al partido. Por una parte, una facci?n lo abandon? definitivamente para lanzarse a las generales en el proyecto de I?igo Errej?n. Pero la gran fuga se produjo algunos meses después. La entrada de Podemos en el Gobierno de coalici?n y la profunda discrepancia de la corriente anticapitalista termin? por hacer insalvable la relaci?n pol?tica de Rodr?guez con el partido de Pablo Iglesias.
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Estas diferencias, unidas al cesarismo organizativo, culminaron en un v?deo en el que ambos dirigentes aparec?an juntos tratando de exhibir un divorcio ‘amistoso’ y de mutuo acuerdo. “Os tenemos que contar algo”, comenzaban su intervenci?n, donde se prometieron que no ser?a un “adi?s” sino un “hasta luego”, insistiendo en que hay formas de “separarse no agresivas”, sino “emp?ticas”, “constructivas” y hasta “cari?osas”. Aquellas buenas intenciones quedaron en eso, en intenciones, y el pacto salt? por los aires poco después. Pero este pacto salt? por los aires poco después, abriéndose una guerra encarnizada por los recursos del grupo que compart?an en el Parlamento andaluz.
En pol?tica y en la vida los caminos a veces se separan. Gracias Teresa y gracias a tu gente por vuestra lealtad. Gracias por ayudarnos a hacer esto con madurez. Este adi?s es un hasta luego. Desde espacios diferentes nos encontraremos defendiendo la justicia social. Suerte ? pic.twitter.com/ArxGW5EidO (https://t.co/ArxGW5EidO)
— Pablo Iglesias ? (@PabloIglesias) 12 de febrero de 2020 (https://twitter.com/PabloIglesias/status/1227684462718341122?ref_src=twsrc%5Etfw)Dos semanas después de aquel v?deo, Iglesias inclu?a en su direcci?n a la andaluza Martina Velarde, a la que apadrin? después para liderar Podemos Andaluc?a. A través de su figura logr? controlar de una vez el partido andaluz, que hasta entonces hab?a sido siempre territorio ‘anticapi’’. La ruptura de Rodr?guez hab?a llevado a un importante vaciamiento de cuadros en el partido, y la nueva l?der territorial trat? de rearmar las filas con perfiles leales a la direcci?n estatal. Una de las principales razones que convierten a la federaci?n andaluza en una caja de resonancia de Madrid es, precisamente, que los cr?ticos, ya fueran errejonistas o anticapitalistas, hab?an dejado la formaci?n, dando paso a una corriente ?nica, muchos de los cuales deb?an su posici?n precisamente a Madrid. Un hito por el que todav?a est?n en deuda.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/andalucia-alza-bastion-oficialismo-79571245)
La federaci?n andaluza va a presentar mociones en los consistorios como muestra de “solidaridad” hacia la ministra de Igualdad, que se perfila como la candidata del partido en las generales (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/irene-montero-emerge-candidata-generales-78427294) ante el previsible desacuerdo con Yolanda D?az. Estas declaraciones institucionales van encaminadas a “mostrar el total rechazo a la violencia pol?tica”, un término empleado por la c?pula de Podemos en favor de la ministra de Igualdad, que estos d?as mide su liderazgo (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/irene-montero-toma-riendas-unidas-79382482) frente al de la vicepresidenta segunda del Gobierno. No es la primera vez que reproducen en Podemos Andaluc?a las l?neas de la direcci?n. Ya en marzo despleg? en los ayuntamientos mociones en apoyo al pacifismo defendido por Ione Belarra, que se opuso al env?o de armas a Ucrania en contra de la vicepresidenta segunda, que s? respald? la medida.
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Esta din?mica de llevar a los rincones andaluces el discurso de la c?pula difiere al resto de federaciones de Podemos, que tratan de poner tierra de por medio a las din?micas internas del partido en Madrid y las batallas que all? se abren. El modelo de organizaci?n territorial, con la expulsi?n de voces cr?ticas en sus bastiones, ha llevado a que las federaciones no entren a cuestionar abiertamente las pol?ticas de la direcci?n. Sin embargo, algunos territorios optan por marcar su agenda propia aisl?ndose de las polémicas madrile?as. No es el caso de Andaluc?a.
Andaluc?a ha sido en los ?ltimos meses escenario de la pugna abierta entre el partido y Yolanda D?az. En las elecciones anticipadas de junio, las distintas fuerzas intentaron alcanzar un acuerdo que pretend?a ser el proyecto piloto del ‘frente amplio’ de la vicepresidenta del Gobierno. El resultado fue desastroso. Los recelos entre Podemos, IU y M?s Andaluc?a llevaron a una negociaci?n extrema que en el caso de los morados fue teledirigida a nivel estatal. El partido trat? de situar como cabeza de lista a su candidato, tensando la cuerda hasta el ?ltimo momento. Yolanda D?az acudi? a Andaluc?a (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/yolanda-diaz-interviene-in-extremis-13614192) en plenas negociaciones para apoyar claramente a Inmaculada Nieto, de IU, como candidata. Un gesto que sent? mal en la c?pula y marc? un punto de inflexi?n en su relaci?n con la titular de Trabajo.
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El acuerdo andaluz finalmente se alcanz?, pero no de la forma esperada. Podemos present? una oferta en el ?ltimo minuto: aceptaba no ser cabeza de lista a cambio de quedarse con mayor?a en el grupo parlamentario y gran parte de los recursos. Pero tan justo fue el plazo que el partido qued? fuera del registro oficial de la coalici?n, quedando sin el control de la candidatura y sin que sus siglas aparecieran en la papeleta. El partido acus? a IU de excluirles adrede.
Los resultados tampoco acompa?aron. Perdieron la mitad de los diputados (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/urnas-castigan-fractura-izquierda-andaluza-13892554), inmersos en una guerra que a d?a de hoy contin?a y D?az se desvincul? de aquel acuerdo fallido. Mientras, en la c?pula de Podemos en Madrid utilizan desde entonces aquel fracaso electoral como un ejemplo para reafirmar su tesis de que, sin Podemos como fuerza nodriza, la izquierda m?s all? del PSOE quedaba debilitada. El sacrificio de Podemos en Andaluc?a servir?a para cargar de argumentos al partido en su guerra con Yolanda D?az por el control del espacio.
La vicepresidenta segunda del Gobierno no ha vuelto a pisar Andaluc?a desde entonces para desplegar su proyecto. Siete meses después de que desembarcara en la feria de Sevilla para mediar con las distintas fuerzas, todav?a no ha llevado all? su proyecto Sumar, que s? ha pasado hasta ahora por Galicia, Pa?s Vasco, Comunidad Valenciana, Extremadura, Asturias, Catalu?a, La Rioja o Navarra.
Extensi?n de las batallas madrile?as
Podemos Andaluc?a ha representado la extensi?n de la c?pula madrile?a y sus batallas, reproduciendo sus l?gicas y argumentos; tanto es as? que la federaci?n achaca su situaci?n con el resto de partidos al escenario nacional, llegando a considerar que estaban pagando all? los envites de la direcci?n contra Yolanda D?az en Madrid. “Nos hacen lo que no se atreven con Ione (Belarra) o Irene (Montero)”, se quejaban en estas p?ginas.
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— Podemos Sevilla (@PodemosSevilla) 9 de noviembre de 2022 (https://twitter.com/PodemosSevilla/status/1590262089821859841?ref_src=twsrc%5Etfw)Aquel acto sirvi? también para lanzar a Irene Montero como candidata para las generales frente a la gallega. Una operaci?n que llevaba fraguando desde verano. Aunque en el espacio llevaban meses advirtiendo de su lanzamiento como candidata, fue precisamente en Andaluc?a donde la formaci?n hizo expl?cita esta estrategia. En una cuenta oficial de Twitter del partido de Sevilla, publicaron la intervenci?n de la ministra de Igualdad acompa?ado del siguiente mensaje: “Presidenta”. Una consigna que ni siquiera en Madrid se hab?an decidido a hacer p?blica.
La reconstrucci?n de Podemos Andaluc?a
Para entender las din?micas que existen entre la direcci?n y su federaci?n andaluza, hay que conocer las particularidades de Podemos en la comunidad m?s poblada de Espa?a, donde tuvo que empezar de cero en 2020 a nivel organizativo. Una reconstrucci?n que fue dirigida en gran medida por la c?pula de Madrid. Desde el nacimiento del partido en 2014, la federaci?n hab?a estado liderada por Teresa Rodr?guez, de la corriente anticapitalista, que conviv?a con los llamados errejonistas. Durante los primeros a?os la convivencia fue m?s o menos pac?fica y las distintas facciones tuvieron voz a nivel parlamentario. Pero en 2019 se rompi? el idilio.
La repetici?n electoral de noviembre de aquel a?o termin? por descapitalizar al partido. Por una parte, una facci?n lo abandon? definitivamente para lanzarse a las generales en el proyecto de I?igo Errej?n. Pero la gran fuga se produjo algunos meses después. La entrada de Podemos en el Gobierno de coalici?n y la profunda discrepancia de la corriente anticapitalista termin? por hacer insalvable la relaci?n pol?tica de Rodr?guez con el partido de Pablo Iglesias.
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Estas diferencias, unidas al cesarismo organizativo, culminaron en un v?deo en el que ambos dirigentes aparec?an juntos tratando de exhibir un divorcio ‘amistoso’ y de mutuo acuerdo. “Os tenemos que contar algo”, comenzaban su intervenci?n, donde se prometieron que no ser?a un “adi?s” sino un “hasta luego”, insistiendo en que hay formas de “separarse no agresivas”, sino “emp?ticas”, “constructivas” y hasta “cari?osas”. Aquellas buenas intenciones quedaron en eso, en intenciones, y el pacto salt? por los aires poco después. Pero este pacto salt? por los aires poco después, abriéndose una guerra encarnizada por los recursos del grupo que compart?an en el Parlamento andaluz.
En pol?tica y en la vida los caminos a veces se separan. Gracias Teresa y gracias a tu gente por vuestra lealtad. Gracias por ayudarnos a hacer esto con madurez. Este adi?s es un hasta luego. Desde espacios diferentes nos encontraremos defendiendo la justicia social. Suerte ? pic.twitter.com/ArxGW5EidO (https://t.co/ArxGW5EidO)
— Pablo Iglesias ? (@PabloIglesias) 12 de febrero de 2020 (https://twitter.com/PabloIglesias/status/1227684462718341122?ref_src=twsrc%5Etfw)Dos semanas después de aquel v?deo, Iglesias inclu?a en su direcci?n a la andaluza Martina Velarde, a la que apadrin? después para liderar Podemos Andaluc?a. A través de su figura logr? controlar de una vez el partido andaluz, que hasta entonces hab?a sido siempre territorio ‘anticapi’’. La ruptura de Rodr?guez hab?a llevado a un importante vaciamiento de cuadros en el partido, y la nueva l?der territorial trat? de rearmar las filas con perfiles leales a la direcci?n estatal. Una de las principales razones que convierten a la federaci?n andaluza en una caja de resonancia de Madrid es, precisamente, que los cr?ticos, ya fueran errejonistas o anticapitalistas, hab?an dejado la formaci?n, dando paso a una corriente ?nica, muchos de los cuales deb?an su posici?n precisamente a Madrid. Un hito por el que todav?a est?n en deuda.
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