الريــم
12-03-2022, 12:40 AM
El presidente del Tribunal Constitucional, Pedro Gonz?lez-Trevijano, al ignorar el Pleno de verificaci?n solicitado por el Gobierno para dar luz verde a los magistrados Juan Carlos Campo (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/ofensiva-pp-bruselas-eleccion-campo-79458499)y Laura D?ez, coloc? la pelota en el tejado del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), abriendo expectativas de que nombre a su vez a los otros dos magistrados que le corresponde por ley. Si no lo hace, no tendr? m?s remedio que convocarlo tras denegar la petici?n de tres magistrados el pasado miércoles d?a 30 de noviembre.
La presi?n, por tanto, se concentra ahora en el sector conservador, cuyos vocales fueron elegidos en 2013 -?hace once a?os, reflejo de la mayor?a absoluta del gobierno de Mariano Rajoy!-, y han ejecutado la orden del PP de bloquear la renovaci?n desde diciembre de 2018 -?van a cumplir en 2023 diez a?os cuando fueron nombrados por cinco!- ante el pleno ordinario mensual, previsto para el 22 de diciembre. Aunque el orden del d?a se confecciona el viernes anterior a cada pleno, en este caso el viernes 16, fuentes judiciales consultadas aseguran que el presidente Rafael Mozo ya pensaba proponer el punto de los nombramientos.
"Progubernamental"
El grupo conservador se ha mantenido firme desde el pasado 8 de septiembre en su negativa a proponer candidatos. El sector progresista propuso de entrada cinco. El conservador, cero. Pero ya desde el principio este sector impuso la norma al contrario y consigui? que, finalmente, los progresistas redujeran su candidato, después de votar internamente, a uno: el magistrado de la Sala Tercera (de lo Contencioso-Administrativo) del Tribunal Supremo, José Manuel Bandrés. Al conocer su nombre la propuesta formal del grupo progresista, hace algunas semanas, el grupo conservador comenz? a atacar la figura del magistrado, tild?ndole de “progubernamental”.
Y el miércoles pasado, cuando el portavoz del sector progresista, ?lvaro Cuesta, le dijo a su hom?logo José Antonio Ballestero que segu?a siendo la ?nica propuesta, la reuni?n no super? los cinco minutos. Ballestero le pidi? que consultara otra vez. El jueves, Cuesta y su grupo ratificaron: Bandrés. A continuaci?n, este viernes 2 de diciembre Ballestero mensaje? a sus colegas: “En estas circunstancias en el pleno del d?a 22 se har?n las propuestas que cada vocal considere conveniente y cada cual votar? a los candidatos que considere oportuno, sin previo consenso sobre la idoneidad y oportunidad de los candidatos propuestos”.
“Parece que para los conservadores se trata de algo inaceptable, y eso que no han puesto ning?n candidato sobre la mesa. Quieren salvar la cara y culpabilizarnos de la falta de consenso”, se?al? a El Peri?dico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica, ?lvaro Cuesta.
El CGPJ hist?ricamente elige a magistrados del Tribunal Supremo para el TC. Y para m?s detalle a magistrados de la Sala Tercera, la West Point de la magistratura, como sol?a llamarla Carlos Lesmes, de esa misma especialidad, para quien el derecho penal siempre ha sido una rama menor. Se supone, por tanto, que la “idoneidad y oportunidad” est? asociada directamente al nombre del candidato.
?Cu?l es el mensaje si Ballestero debiera ponerlo en rom?n paladino, por ejemplo, en el lenguaje del entonces portavoz del PP en el Senado Ignacio Cosid? cuando explic? a su grupo que era estupendo poner a Manuel Marchena, presidente de la Sala Segunda del Supremo, en la presidencia del CGPJ, el 18 de noviembre de 2018, porque supon?a controlar “la Sala Segunda desde detr?s"?
?Que no habr? manera de elegir a los dos candidatos con ese sistema de votaci?n?
Se necesitan 11 votos ahora para sacar adelante a los candidatos, después de que Lesmes tirara la toalla.
Los conservadores tienen 10. Por tanto, tendr?an que pescar 1 en el sector progresista que suma 8 si se incluye al vocal Enrique Lucas, nombrado por el Partido Nacionalista Vasco (PNV).
Como en la lista original de cinco presentada por el grupo progresista se encontraba el magistrado Pablo Lucas, de la Sala Tercera, el responsable de atender las intervenciones telef?nicas y entradas en domicilio por parte del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) desde 2009 hasta 2024, Ballestero y sus colegas urdieron un plan. ?Por qué aparte del candidato de la derecha no se elige al candidato Lucas por los progresistas?
En otras palabras, elegimos a un “propio” y a nuestro progresista “preferido”.
El maestro de este sistema fue Lesmes. Lo hizo por todo lo alto cuando cre? el puesto de vicepresidente del Supremo y puso all? a un magistrado del sector progresista -?ngel Juanes-, porque, entre otras cosas, era amigo personal suyo. Pero el cargo carec?a de contenido. Pero la utilizaci?n del marchamo progresista era rentable.
El interés de Pablo Llarena
Entre los “propios” se contempla a alguien que hasta hace un mes manifestaba carecer del m?nimo interés por ir al TC: Pablo Llarena. Ahora se sabe que no es por indiferencia sino porque su esposa, la magistrada Gema Espinosa, era candidata a vocal del CGPJ y Llarena no quer?a perjudicar su carrera. Pero ahora que ya no se renueva, est? interesado.
Pero, fuentes judiciales consultadas se?alan que no todos los vocales conservadores est?n por dicho perfil. Dos de ellos, Juan Manuel Fern?ndez y Juan Mart?nez Moya, los llamados Juanes, se inclinan por volver a la tradici?n de nombrar a un magistrado de la Sala Tercera en la persona de su actual presidente, César Tolosa.
En esta elecci?n del 22, que nadie atina a pronosticar su desenlace, dado el guirigay que supondr? votar sin un pacto previo, hay una segunda derivada: condicionar la pr?xima presidencia del TC.
La mayor?a conservadora en el tribunal de garant?as pasar? a una mayor?a progresista. Con los dos nuevos nombramientos, el sector progresista pasa a tener 6 magistrados. Si del CGPJ saliera lo que normalmente se esperar?a, los progresistas pasar?an a ser siete magistrados, mientras que los conservadores ser?n 4. En este grupo se iba a integrar un quinto magistrado en sustituci?n de Alfredo Montoya, que es elegido por el Senado, y que depende de los votos del PSOE, garantizados en el abortado pacto S?nchez-Feij?o.
Los conservadores quieren a Lucas precisamente porque tienen expectativas de que una vez renovado el TC cuando se realice la votaci?n para elegir presidente y vicepresidente, su progresista “preferido” no votar? por C?ndido Conde-Pumpido. Los conservadores urden la presidencia para Mar?a Luisa Balaguer, su progresista “preferida”.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/derecha-quiere-nombrar-cgpj-propio-79490572)
La presi?n, por tanto, se concentra ahora en el sector conservador, cuyos vocales fueron elegidos en 2013 -?hace once a?os, reflejo de la mayor?a absoluta del gobierno de Mariano Rajoy!-, y han ejecutado la orden del PP de bloquear la renovaci?n desde diciembre de 2018 -?van a cumplir en 2023 diez a?os cuando fueron nombrados por cinco!- ante el pleno ordinario mensual, previsto para el 22 de diciembre. Aunque el orden del d?a se confecciona el viernes anterior a cada pleno, en este caso el viernes 16, fuentes judiciales consultadas aseguran que el presidente Rafael Mozo ya pensaba proponer el punto de los nombramientos.
"Progubernamental"
El grupo conservador se ha mantenido firme desde el pasado 8 de septiembre en su negativa a proponer candidatos. El sector progresista propuso de entrada cinco. El conservador, cero. Pero ya desde el principio este sector impuso la norma al contrario y consigui? que, finalmente, los progresistas redujeran su candidato, después de votar internamente, a uno: el magistrado de la Sala Tercera (de lo Contencioso-Administrativo) del Tribunal Supremo, José Manuel Bandrés. Al conocer su nombre la propuesta formal del grupo progresista, hace algunas semanas, el grupo conservador comenz? a atacar la figura del magistrado, tild?ndole de “progubernamental”.
Y el miércoles pasado, cuando el portavoz del sector progresista, ?lvaro Cuesta, le dijo a su hom?logo José Antonio Ballestero que segu?a siendo la ?nica propuesta, la reuni?n no super? los cinco minutos. Ballestero le pidi? que consultara otra vez. El jueves, Cuesta y su grupo ratificaron: Bandrés. A continuaci?n, este viernes 2 de diciembre Ballestero mensaje? a sus colegas: “En estas circunstancias en el pleno del d?a 22 se har?n las propuestas que cada vocal considere conveniente y cada cual votar? a los candidatos que considere oportuno, sin previo consenso sobre la idoneidad y oportunidad de los candidatos propuestos”.
“Parece que para los conservadores se trata de algo inaceptable, y eso que no han puesto ning?n candidato sobre la mesa. Quieren salvar la cara y culpabilizarnos de la falta de consenso”, se?al? a El Peri?dico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica, ?lvaro Cuesta.
El CGPJ hist?ricamente elige a magistrados del Tribunal Supremo para el TC. Y para m?s detalle a magistrados de la Sala Tercera, la West Point de la magistratura, como sol?a llamarla Carlos Lesmes, de esa misma especialidad, para quien el derecho penal siempre ha sido una rama menor. Se supone, por tanto, que la “idoneidad y oportunidad” est? asociada directamente al nombre del candidato.
?Cu?l es el mensaje si Ballestero debiera ponerlo en rom?n paladino, por ejemplo, en el lenguaje del entonces portavoz del PP en el Senado Ignacio Cosid? cuando explic? a su grupo que era estupendo poner a Manuel Marchena, presidente de la Sala Segunda del Supremo, en la presidencia del CGPJ, el 18 de noviembre de 2018, porque supon?a controlar “la Sala Segunda desde detr?s"?
?Que no habr? manera de elegir a los dos candidatos con ese sistema de votaci?n?
Se necesitan 11 votos ahora para sacar adelante a los candidatos, después de que Lesmes tirara la toalla.
Los conservadores tienen 10. Por tanto, tendr?an que pescar 1 en el sector progresista que suma 8 si se incluye al vocal Enrique Lucas, nombrado por el Partido Nacionalista Vasco (PNV).
Como en la lista original de cinco presentada por el grupo progresista se encontraba el magistrado Pablo Lucas, de la Sala Tercera, el responsable de atender las intervenciones telef?nicas y entradas en domicilio por parte del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) desde 2009 hasta 2024, Ballestero y sus colegas urdieron un plan. ?Por qué aparte del candidato de la derecha no se elige al candidato Lucas por los progresistas?
En otras palabras, elegimos a un “propio” y a nuestro progresista “preferido”.
El maestro de este sistema fue Lesmes. Lo hizo por todo lo alto cuando cre? el puesto de vicepresidente del Supremo y puso all? a un magistrado del sector progresista -?ngel Juanes-, porque, entre otras cosas, era amigo personal suyo. Pero el cargo carec?a de contenido. Pero la utilizaci?n del marchamo progresista era rentable.
El interés de Pablo Llarena
Entre los “propios” se contempla a alguien que hasta hace un mes manifestaba carecer del m?nimo interés por ir al TC: Pablo Llarena. Ahora se sabe que no es por indiferencia sino porque su esposa, la magistrada Gema Espinosa, era candidata a vocal del CGPJ y Llarena no quer?a perjudicar su carrera. Pero ahora que ya no se renueva, est? interesado.
Pero, fuentes judiciales consultadas se?alan que no todos los vocales conservadores est?n por dicho perfil. Dos de ellos, Juan Manuel Fern?ndez y Juan Mart?nez Moya, los llamados Juanes, se inclinan por volver a la tradici?n de nombrar a un magistrado de la Sala Tercera en la persona de su actual presidente, César Tolosa.
En esta elecci?n del 22, que nadie atina a pronosticar su desenlace, dado el guirigay que supondr? votar sin un pacto previo, hay una segunda derivada: condicionar la pr?xima presidencia del TC.
La mayor?a conservadora en el tribunal de garant?as pasar? a una mayor?a progresista. Con los dos nuevos nombramientos, el sector progresista pasa a tener 6 magistrados. Si del CGPJ saliera lo que normalmente se esperar?a, los progresistas pasar?an a ser siete magistrados, mientras que los conservadores ser?n 4. En este grupo se iba a integrar un quinto magistrado en sustituci?n de Alfredo Montoya, que es elegido por el Senado, y que depende de los votos del PSOE, garantizados en el abortado pacto S?nchez-Feij?o.
Los conservadores quieren a Lucas precisamente porque tienen expectativas de que una vez renovado el TC cuando se realice la votaci?n para elegir presidente y vicepresidente, su progresista “preferido” no votar? por C?ndido Conde-Pumpido. Los conservadores urden la presidencia para Mar?a Luisa Balaguer, su progresista “preferida”.
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