الريــم
11-30-2022, 12:10 PM
El Juzgado de lo Penal n?8 de Valencia ha condenado a un profesor del IES Llopis Mar? (Cullera, Valencia) por haberle pegado un arponazo en la pierna a uno de sus alumnos en horario lectivo. El juez considera que el docente es "autor responsable de un delito de lesiones por imprudencia grave, con la concurrencia de la atenuante de reparaci?n del da?o", seg?n la sentencia a la que ha tenido acceso El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica. Le impone por tanto una pena "de 6 meses de multa con cuota diaria de 10 euros", adem?s de tener que indemnizar a la v?ctima con 3.000 euros por las lesiones y secuelas causadas, cantidad que ya ha sido abonada.
Sin embargo, la familia de la v?ctima ha anunciado que piensa recurrir dicha sentencia, ya que el juez no ha aceptado la petici?n de inhabilitaci?n del profesor por espacio de dos a?os. La familia cree que la sentencia demuestra que el docente incurri? el numerosas irregularidades el d?a de los hechos: que sac? a los j?venes del centro en horario escolar, que dispar? un fusil de pesca para el que no ten?a seguro, que se llev? al chico al centro de salud en su coche en lugar de llamar a una ambulancia y que pidi? a los j?venes mentir sobre lo que hab?a sucedido. Se da la circunstancia adem?s de que el chico, que se cambi? de centro tras el suceso, ha tenido que regresar al mismo instituto, en el que su madre también es profesora.
Los hechos, adelantados en septiembre por El Peri?dico de Espa?a, tuvieron lugar el 7 de octubre de 2020 a las 12 del mediod?a. El profesor lleg? al centro en el que imparte clases de Educaci?n F?sica y tutoriza a j?venes estudiantes de 14 y 15 a?os. Conmin? a los alumnos de la clase de 4? de ESO a acompa?arles al parking para ense?arles algo. "Tras contarles que hab?a estado pescando, invit? a los alumnos a salir fuera del centro, a las inmediaciones, donde estaba estacionado su veh?culo, con el objeto de mostrarles lo que hab?a pescado", considera probado el juez.
"Una vez all?", prosigue la sentencia, "sac? del maletero del veh?culo, un fusil "Cresi Sioux I de 50 cm", para el que no ten?a licencia ni seguro, y el cual cre?a que no estaba cargado, dispar?ndose accidentalmente e impactando en la ingle derecha del menor, de 14 de a?os, que ten?a enfrente. Por estos hechos el acusado le caus? al alumno lesiones consistentes en corte en miembro inferior derecho, que requirieron para su sanidad sutura mediante 2 grapas y ocasion? 40 d?as de perjuicio b?sico, 5 de perjuicio moderado y 1 punto de secuela derivada del estrés post traum?tico leve".
Dejaci?n intolerable
El documento dice que "queda probado, no alberg?ndose dudas al respecto, que el acusado era profesor de educaci?n f?sica en el instituto Llopis Mari de Cullera, y en el momento de los hechos se hallaban en tutor?a, en el patio. (...) Igualmente consta probado que los hechos tuvieron lugar dentro del horario escolar pero fuera de las instalaciones del centro, en las inmediaciones, donde ten?a el veh?culo aparcado".
El juez define lo sucedido como imprudencia grave: "El acusado ejecut? una acci?n causante del resultado lesivo, y se estima probado que lo hizo desatendiendo las m?nimas normas de seguridad para evitar el mismo, como son comprobar que el arma no estaba cargada, y no dejarse llevar por la confianza de que no lo estaba, y en ning?n caso levantar el arma, toda vez que estos dos hechos provocaron una infracci?n del deber objetivo de cuidado, que es el elemento nuclear de toda conducta imprudente para poderla considerar t?pica. Y en base a ello, unido a las circunstancias de que era un profesor mostrando un instrumento peligroso a unos alumnos suyos menores de edad, por lo que puede afirmarse que estemos ante una "dejaci?n intolerable" de las medidas de control adecuadas al concreto momento y circunstancias en que se produjo el desgraciado suceso y, en consecuencia, que la imprudencia concurrente debe ser calificada de grave".
El magistrado confirma adem?s que, tras el suceso, rog? a sus alumnos que mintieran sobre lo que hab?an presenciado: "No puede olvidarse que tras el incidente, pidi? a los menores que faltaran a la verdad sobre lo sucedido y hasta que no se descubri? la realidad del percance, no pidi? p?blicamente disculpas por los hechos ni habl? con los progenitores en aras de reparar el da?o causado", confirmando as? la versi?n que dio la familia del menor a este diario que. También opt? por trasladar él mismo, en su coche particular, al accidentado a un centro de salud, siendo este un comportamiento que no se ajusta al protocolo escolar de este tipo de supuestos.
No lo inhabilitan
La sentencia confirma el c?mulo de irregularidades cometidas por el funcionario: "Ciertamente cometi? diversas irregularidades habida cuenta que sali? del centro con los menores sin concurrir una causa justificada para ello; dej? a los alumnos dentro del centro escolar pero solos, al no haberse acreditado que solicitara a otro profesor que se hiciera cargo de ellos; se llev? al menor herido en su veh?culo particular sin cumplir con el ello el protocolo existente y que ha explicado; y por ?ltimo, pidi? a los menores que mintieran sobre lo sucedido.
No obstante, y a pesar de la condena, la familia del alumno no se muestra conforme con la sentencia. En conversaci?n telef?nica con este peri?dico, el padre de la v?ctima explica que hab?a solicitado la inhabilitaci?n del profesor por espacio de dos a?os. El juez, no obstante, ha desestimado esta petici?n. Rechaza inhabilitar al profesor porque considera que "estos comportamientos no guardan relaci?n con el delito objeto de enjuiciamiento, es decir, el resultado lesivo producido no deriva de una situaci?n profesional concreta que permita proyectar la inhabilitaci?n. No tuvieron lugar cuando el acusado se encontraba impartiendo sus funciones como profesor de educaci?n f?sica ni por cometer una imprudencia en el desarrollo de la misma, no hubo mala praxis".
"No sé qué m?s se necesita para inhabilitar a un profesor que ha cometido tantas irregularidades. Sac? a los ni?os a la calle fuera del horario escolar. Sac? un arma para la que no ten?a seguro. Le peg? un arponazo a mi hijo. Se lo llev? al centro de salud sin llamar a la ambulancia y dejando al resto de alumnos solos, a los que adem?s les pidi? que mintiesen. Se lo pidi? también a mi hijo. No nos explic? a la familia lo que hab?a sucedido. No entendemos que no se le inhabilite para el puesto", nos cuenta Jaume, el padre del alumno. Es por ello que ya ha adelantado que va a recurrir esta sentencia.
Vuelta al cole
Se da la circunstancia, adem?s, de que el joven se cambi? de instituto a ra?z de lo sucedido, pero que este a?o ha regresado a estudiar al mismo centro en el que sucedieron los hechos. El motivo de su vuelta ha sido que su madre también es profesora en el mismo instituto. Pero su regreso hizo que volviese a coincidir con el docente que le hab?a pegado el arponazo y que le fuese asignado de nuevo como profesor de educaci?n f?sica. "Al final lo cambiaron de grupo para que no tuviese al mismo profesor, pero fue porque lo pidi? su madre", concluye Jaume.
Desde El Peri?dico de Espa?a hemos hablado v?a telef?nica con el centro educativo IES Llopis Mar? de Cullera, desde donde su jefa de estudios ha declinado hacer declaraciones. También nos hemos puesto en contacto con la Conselleria d'Educaci? de la Generalitat Valenciana. En agosto intentamos hablar con ellos, pero nos remitieron a hacerlo en septiembre, cuando empezase el curso. As? lo hicimos, pero explicaron que no hablar?an mientras el caso estuviese judicializado. Ahora, con la sentencia ya publicada, hemos enviado una petici?n por escrito para hablar, pero no hemos obtenido respuesta.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/condenado-profesor-instituto-valencia-pegarle-79324289)
Sin embargo, la familia de la v?ctima ha anunciado que piensa recurrir dicha sentencia, ya que el juez no ha aceptado la petici?n de inhabilitaci?n del profesor por espacio de dos a?os. La familia cree que la sentencia demuestra que el docente incurri? el numerosas irregularidades el d?a de los hechos: que sac? a los j?venes del centro en horario escolar, que dispar? un fusil de pesca para el que no ten?a seguro, que se llev? al chico al centro de salud en su coche en lugar de llamar a una ambulancia y que pidi? a los j?venes mentir sobre lo que hab?a sucedido. Se da la circunstancia adem?s de que el chico, que se cambi? de centro tras el suceso, ha tenido que regresar al mismo instituto, en el que su madre también es profesora.
Los hechos, adelantados en septiembre por El Peri?dico de Espa?a, tuvieron lugar el 7 de octubre de 2020 a las 12 del mediod?a. El profesor lleg? al centro en el que imparte clases de Educaci?n F?sica y tutoriza a j?venes estudiantes de 14 y 15 a?os. Conmin? a los alumnos de la clase de 4? de ESO a acompa?arles al parking para ense?arles algo. "Tras contarles que hab?a estado pescando, invit? a los alumnos a salir fuera del centro, a las inmediaciones, donde estaba estacionado su veh?culo, con el objeto de mostrarles lo que hab?a pescado", considera probado el juez.
"Una vez all?", prosigue la sentencia, "sac? del maletero del veh?culo, un fusil "Cresi Sioux I de 50 cm", para el que no ten?a licencia ni seguro, y el cual cre?a que no estaba cargado, dispar?ndose accidentalmente e impactando en la ingle derecha del menor, de 14 de a?os, que ten?a enfrente. Por estos hechos el acusado le caus? al alumno lesiones consistentes en corte en miembro inferior derecho, que requirieron para su sanidad sutura mediante 2 grapas y ocasion? 40 d?as de perjuicio b?sico, 5 de perjuicio moderado y 1 punto de secuela derivada del estrés post traum?tico leve".
Dejaci?n intolerable
El documento dice que "queda probado, no alberg?ndose dudas al respecto, que el acusado era profesor de educaci?n f?sica en el instituto Llopis Mari de Cullera, y en el momento de los hechos se hallaban en tutor?a, en el patio. (...) Igualmente consta probado que los hechos tuvieron lugar dentro del horario escolar pero fuera de las instalaciones del centro, en las inmediaciones, donde ten?a el veh?culo aparcado".
El juez define lo sucedido como imprudencia grave: "El acusado ejecut? una acci?n causante del resultado lesivo, y se estima probado que lo hizo desatendiendo las m?nimas normas de seguridad para evitar el mismo, como son comprobar que el arma no estaba cargada, y no dejarse llevar por la confianza de que no lo estaba, y en ning?n caso levantar el arma, toda vez que estos dos hechos provocaron una infracci?n del deber objetivo de cuidado, que es el elemento nuclear de toda conducta imprudente para poderla considerar t?pica. Y en base a ello, unido a las circunstancias de que era un profesor mostrando un instrumento peligroso a unos alumnos suyos menores de edad, por lo que puede afirmarse que estemos ante una "dejaci?n intolerable" de las medidas de control adecuadas al concreto momento y circunstancias en que se produjo el desgraciado suceso y, en consecuencia, que la imprudencia concurrente debe ser calificada de grave".
El magistrado confirma adem?s que, tras el suceso, rog? a sus alumnos que mintieran sobre lo que hab?an presenciado: "No puede olvidarse que tras el incidente, pidi? a los menores que faltaran a la verdad sobre lo sucedido y hasta que no se descubri? la realidad del percance, no pidi? p?blicamente disculpas por los hechos ni habl? con los progenitores en aras de reparar el da?o causado", confirmando as? la versi?n que dio la familia del menor a este diario que. También opt? por trasladar él mismo, en su coche particular, al accidentado a un centro de salud, siendo este un comportamiento que no se ajusta al protocolo escolar de este tipo de supuestos.
No lo inhabilitan
La sentencia confirma el c?mulo de irregularidades cometidas por el funcionario: "Ciertamente cometi? diversas irregularidades habida cuenta que sali? del centro con los menores sin concurrir una causa justificada para ello; dej? a los alumnos dentro del centro escolar pero solos, al no haberse acreditado que solicitara a otro profesor que se hiciera cargo de ellos; se llev? al menor herido en su veh?culo particular sin cumplir con el ello el protocolo existente y que ha explicado; y por ?ltimo, pidi? a los menores que mintieran sobre lo sucedido.
No obstante, y a pesar de la condena, la familia del alumno no se muestra conforme con la sentencia. En conversaci?n telef?nica con este peri?dico, el padre de la v?ctima explica que hab?a solicitado la inhabilitaci?n del profesor por espacio de dos a?os. El juez, no obstante, ha desestimado esta petici?n. Rechaza inhabilitar al profesor porque considera que "estos comportamientos no guardan relaci?n con el delito objeto de enjuiciamiento, es decir, el resultado lesivo producido no deriva de una situaci?n profesional concreta que permita proyectar la inhabilitaci?n. No tuvieron lugar cuando el acusado se encontraba impartiendo sus funciones como profesor de educaci?n f?sica ni por cometer una imprudencia en el desarrollo de la misma, no hubo mala praxis".
"No sé qué m?s se necesita para inhabilitar a un profesor que ha cometido tantas irregularidades. Sac? a los ni?os a la calle fuera del horario escolar. Sac? un arma para la que no ten?a seguro. Le peg? un arponazo a mi hijo. Se lo llev? al centro de salud sin llamar a la ambulancia y dejando al resto de alumnos solos, a los que adem?s les pidi? que mintiesen. Se lo pidi? también a mi hijo. No nos explic? a la familia lo que hab?a sucedido. No entendemos que no se le inhabilite para el puesto", nos cuenta Jaume, el padre del alumno. Es por ello que ya ha adelantado que va a recurrir esta sentencia.
Vuelta al cole
Se da la circunstancia, adem?s, de que el joven se cambi? de instituto a ra?z de lo sucedido, pero que este a?o ha regresado a estudiar al mismo centro en el que sucedieron los hechos. El motivo de su vuelta ha sido que su madre también es profesora en el mismo instituto. Pero su regreso hizo que volviese a coincidir con el docente que le hab?a pegado el arponazo y que le fuese asignado de nuevo como profesor de educaci?n f?sica. "Al final lo cambiaron de grupo para que no tuviese al mismo profesor, pero fue porque lo pidi? su madre", concluye Jaume.
Desde El Peri?dico de Espa?a hemos hablado v?a telef?nica con el centro educativo IES Llopis Mar? de Cullera, desde donde su jefa de estudios ha declinado hacer declaraciones. También nos hemos puesto en contacto con la Conselleria d'Educaci? de la Generalitat Valenciana. En agosto intentamos hablar con ellos, pero nos remitieron a hacerlo en septiembre, cuando empezase el curso. As? lo hicimos, pero explicaron que no hablar?an mientras el caso estuviese judicializado. Ahora, con la sentencia ya publicada, hemos enviado una petici?n por escrito para hablar, pero no hemos obtenido respuesta.
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