الريــم
11-28-2022, 03:37 PM
Casi todos los "istas" que conviven dentro de Edu Gal?n (humorista, periodista y polemista nacido en Oviedo hace 42 a?os) se dan la mano de una forma u otra en "La m?scara moral" (Debate), su nuevo libro que presentar? este martes, a las 19.00 horas, en la biblioteca de La Granja, en el ovetense Campo San Francisco, en una conversaci?n con su amigo Sergio del Molino, quien a su vez pone de largo la novelada peripecia del expresidente del Gobierno en "Un tal Gonz?lez".
–?De d?nde ha sacado tiempo para este libro?
–Cuando estoy haciendo promoci?n de una cosa trabajo mucho en otra, todo en paralelo. En la época del confinamiento se public? el libro sobre Woody Allen y se me ocurri? proponer este, que ven?a de cuando vi unos anuncios de clases de tango antifascista.
–?Qué era eso?
–En 2021, paseaba por Lavapiés y vi el t?pico cartel de fotocopias para recortar la tira con el n?mero de teléfono, como de clases de inglés: "Se dan clases de tango antifascista". Lo primero que pensé es que el tango es prefascista, lo segundo, que no sé qué aporta el antifascismo a la técnica del tango. El "eureka" del libro lleg? en 2021, cuando le? varios estudios psicol?gicos que analizan c?mo una de las herramientas m?s potentes para llamar la atenci?n es demostrar moralidad o se?alar a alguien de moralidad contraria. Ese captador de atenci?n es lo que mueve las redes sociales y la tecnolog?a m?vil, que se ha polarizado.
–En el Mundial de Qatar (http://www.uc-4u.com/tags/futbol/) tendr? material.
–Es el colmo de la m?scara moral. Y me est? dando much?simos ejemplos. Hay que recordar que el Bar?n de Coubertin, verdadero profeta de todo esto, era un completo miserable, simpatizante de los nazis pero que preconizaba unos valores para el olimpismo cl?sico que él nunca tuvo y que enlaza con la idea de que los deportistas de alto nivel no son solo unos percherones bien entrenados sino unos percherones morales. Estos valores son los que preconiza también la FIFA. En Qatar no se cumple ni uno, y se produce ese choque entre la hipocres?a de quien piensa que solo poniendo un "hashtag" vale para cumplir con su moral o la selecci?n alemana con la manita en la boca, unos millonarios que no se juegan ni una tarjeta amarilla. O peor, ese titular de que la FIFA va a investigar los cantos discriminatorios de los seguidores mexicanos en el Mundial. Todo porque cantaron en el estadio: "El que no salte es un polaco maric?n". Yo creo que, en vez de abrirles un expediente, la FIFA deber?a nombrarlos campeones del mundo instant?neamente, porque esos c?nticos son Qatar.
–?No le resulta igual de inspirador ese anuncio de Messi y CR7 haciéndose pasar por ajedrecistas?
–El problema es que el postureo social se ha contagiado a todo el mundo. Todo producto es ahora coproducto de algo que el producto defiende. Un agua embotellada en cart?n es un agua contra el cambio clim?tico que no solo sacia tu ego de salvar el mundo, sino que pone el foco en que, de hecho, lo est?s haciendo. En la moraleja del libro cito a William Blake: "Quien defiende que va a cambiar el mundo es un jeta". Cu?ntos hemos conocido que se dicen antirracistas y llevan la camiseta de Black Lives Matter pero que no se les acerque un gitano o un moro.
–Toda esa moralidad en las redes luego sales fuera y...
–La vida real y virtual se retroalimentan, es dif?cil distinguir entre una y otra. Como hip?tesis yo utilizo el dato de que los casos de ansiedad han aumentado. Creo que las redes impulsan el cortoplacismo y el infantilismo. Pensar que unas herramientas a las que dedicamos diariamente tres o cuatro horas y con las que establecemos relaciones personales no nos van a influir es un poco naïf. La sociedad es m?s infantil e individualista que hace diez a?os. Las redes impulsan esa idea de que eres el centro del universo, de que las clases sociales no existen, de que puedes escribir al presidente de un pa?s y ciscarte en él cuando sabes que no es as?, que eres la rata en la rueda.
–En Asturias, Barb?n (http://www.uc-4u.com/tags/adrian-barbon/) entra bastante al trapo en sus redes.
–Es una forma americana de gobernar, en la que todo est? bien o mal seg?n el rédito pol?tico que dé. Si le va bien en las elecciones dir?amos que su estrategia est? bien. Yo no lo conozco mucho, pero no me parece mal en principio.
–A Edu Gal?n también le gustan esos barrizales de Twitter.
–Soy calentucu, no es dif?cil que entre en una discusi?n, lo que pasa es que tienes que escoger muy bien y no ir a por el primer bot que te aparece. Yo no demonizo las redes sociales, y las discusiones pueden estar bien. Pero, claro, hay gente a la que no recomendar?a estar en Twitter, donde t? dices: "Buenos d?as" y te responden: "Gilipollas". Hay que tener un car?cter determinado.
–?Qué conclusi?n sacamos de todo este clima?
–Nos llama la atenci?n sobre la desconfianza ante la pol?tica (http://www.uc-4u.com/tags/politica/), que vemos también en el decrecimiento de la afiliaci?n sindical. Todo aquello m?nimamente organizado que busca cambiar las cosas a largo plazo parece que est? mal visto, se criminaliza a la pol?tica y, lo que es peor, la ?nica alternativa que se presenta son los gestos espurios, llamar la atenci?n, una realidad de blancos y negros o de fogonazos. En ese mundo infantil y cortoplacista, ?quién gana? El populismo de izquierdas y de derechas. En el enfrentamiento que vimos recientemente de esta se?ora impresentable de Vox con Irene Montero, m?s all? de que ella sea una subhumana descartable, llama la atenci?n esa dialéctica, que esa forma de hablar y tratarse del mundo virtual ha calado en los populismos. Tanto Podemos como Vox se han instalado en una ret?rica en la que o todos son fachas o son fachas orgullosos. Es espurio, dura poco y crea un ambiente hediondo del que solo sacan beneficio los l?deres: Abascal sigue sin hincarla y el amado l?der anda haciendo un "crowdfunding" para que le abran un canal de YouTube a un millonario como Roures. Hemos sido enga?ados.
–?Y qué pasa con esos chavales para los que el racismo o el machismo se ha vuelto guay por lo gamberro?
–En el libro concluyo: "Debemos entender qué significan las m?scaras y a qué nos comprometen en un mundo donde los significados y los compromisos han dejado de ser importantes". Los chavales viven en una permanente ecolalia donde se repiten los esl?ganes y se quedan con el que suene mejor, no con su significado o compromiso. Puede ser echar a los inmigrantes o una teor?a de la conspiraci?n, no tiene que ver con lo moralmente superior o inferior. Est?n imbuidos en un mundo de hashtags cortoplacistas donde, de pronto, esto de ser facha o de creer que los negros son inferiores les cuadra o les parece rebelde. Y por mucho que no quieran, s? tiene consecuencias. En su formaci?n, en su voto, en la forma de ver la vida. Est?n absortos en este chau-chau moral en el que también veo a los chicos reaccionar ante un feminismo que se ha dedicado a demonizar a los hombres. La t?ctica es absurda, porque lo que consigue es m?s hombres imbéciles, y ser hombre o mujer no es un valor moral.
–Todo esto, claro, son debates de este lado del mundo.
–Dejo muy claro que hablamos de la parte occidental, de din?micas de la sociedad de consumo. Yo no tengo ninguna duda de que vivimos en un mundo mejor que los anteriores, no soy un nost?lgico. No pido que dejemos de usar las redes, de ir al McDonald’s o que nos hagamos ermita?os. Pido que ante algo a lo que dedicamos tantas horas, que no est? dise?ado por educadores sino por la mayor hez del universo, que son multinacionales americanas con gentuza como Musk (http://www.uc-4u.com/tags/tesla/) al frente, que dediquemos un tiempo a entender qué significan las cosas, que no puedo poner #stopcancer y en el mismo tuit recomendar flores de bach contra el de mama. Que no nos enga?en, que estemos alertas ante la din?mica del burro con las anteojeras.
–Es muy exigente cumplir con todos los nuevos mandamientos morales.
–Y la red lo favorece. Ya no es que no puedas comer carne roja un d?a, es que si pasas por delante de un jam?n el cambio clim?tico va a aumentar. Todo se vuelve hiperb?lico y moral en este mercado de la atenci?n. Una cosa es decir: "Yo soy vegano y me molesta que comas jam?n". Pero si dices: "Soy vegano y cada vez que comes jam?n est?s acabando con la capa de ozono", est?s cambiando el plano moral y lo ?nico que consigues es que el interpelado coma m?s jam?n o aumentar la ansiedad. En un mundo en que cualquier acci?n cotidiana puede ser grabada y analizada en el ?mbito moral, hemos acabado con la confianza en lo tonto que es el otro. Ya no se disculpa ni el error.
–La ?ltima. A Oviedo viene a charlar con Sergio del Molino.
–Hay que alabar la labor suya con "Un tal Gonz?lez" de novelar los a?os de éxito de aquel Gobierno socialista. Sergio hace un trabajo estupendo. En la biblioteca de La Granja hablaremos m?s sobre c?mo escribimos, una charla entre amigos, estamos ya muy rodados juntos.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/retorica-vox-son-fachas-o-79225862)
–?De d?nde ha sacado tiempo para este libro?
–Cuando estoy haciendo promoci?n de una cosa trabajo mucho en otra, todo en paralelo. En la época del confinamiento se public? el libro sobre Woody Allen y se me ocurri? proponer este, que ven?a de cuando vi unos anuncios de clases de tango antifascista.
–?Qué era eso?
–En 2021, paseaba por Lavapiés y vi el t?pico cartel de fotocopias para recortar la tira con el n?mero de teléfono, como de clases de inglés: "Se dan clases de tango antifascista". Lo primero que pensé es que el tango es prefascista, lo segundo, que no sé qué aporta el antifascismo a la técnica del tango. El "eureka" del libro lleg? en 2021, cuando le? varios estudios psicol?gicos que analizan c?mo una de las herramientas m?s potentes para llamar la atenci?n es demostrar moralidad o se?alar a alguien de moralidad contraria. Ese captador de atenci?n es lo que mueve las redes sociales y la tecnolog?a m?vil, que se ha polarizado.
–En el Mundial de Qatar (http://www.uc-4u.com/tags/futbol/) tendr? material.
–Es el colmo de la m?scara moral. Y me est? dando much?simos ejemplos. Hay que recordar que el Bar?n de Coubertin, verdadero profeta de todo esto, era un completo miserable, simpatizante de los nazis pero que preconizaba unos valores para el olimpismo cl?sico que él nunca tuvo y que enlaza con la idea de que los deportistas de alto nivel no son solo unos percherones bien entrenados sino unos percherones morales. Estos valores son los que preconiza también la FIFA. En Qatar no se cumple ni uno, y se produce ese choque entre la hipocres?a de quien piensa que solo poniendo un "hashtag" vale para cumplir con su moral o la selecci?n alemana con la manita en la boca, unos millonarios que no se juegan ni una tarjeta amarilla. O peor, ese titular de que la FIFA va a investigar los cantos discriminatorios de los seguidores mexicanos en el Mundial. Todo porque cantaron en el estadio: "El que no salte es un polaco maric?n". Yo creo que, en vez de abrirles un expediente, la FIFA deber?a nombrarlos campeones del mundo instant?neamente, porque esos c?nticos son Qatar.
–?No le resulta igual de inspirador ese anuncio de Messi y CR7 haciéndose pasar por ajedrecistas?
–El problema es que el postureo social se ha contagiado a todo el mundo. Todo producto es ahora coproducto de algo que el producto defiende. Un agua embotellada en cart?n es un agua contra el cambio clim?tico que no solo sacia tu ego de salvar el mundo, sino que pone el foco en que, de hecho, lo est?s haciendo. En la moraleja del libro cito a William Blake: "Quien defiende que va a cambiar el mundo es un jeta". Cu?ntos hemos conocido que se dicen antirracistas y llevan la camiseta de Black Lives Matter pero que no se les acerque un gitano o un moro.
–Toda esa moralidad en las redes luego sales fuera y...
–La vida real y virtual se retroalimentan, es dif?cil distinguir entre una y otra. Como hip?tesis yo utilizo el dato de que los casos de ansiedad han aumentado. Creo que las redes impulsan el cortoplacismo y el infantilismo. Pensar que unas herramientas a las que dedicamos diariamente tres o cuatro horas y con las que establecemos relaciones personales no nos van a influir es un poco naïf. La sociedad es m?s infantil e individualista que hace diez a?os. Las redes impulsan esa idea de que eres el centro del universo, de que las clases sociales no existen, de que puedes escribir al presidente de un pa?s y ciscarte en él cuando sabes que no es as?, que eres la rata en la rueda.
–En Asturias, Barb?n (http://www.uc-4u.com/tags/adrian-barbon/) entra bastante al trapo en sus redes.
–Es una forma americana de gobernar, en la que todo est? bien o mal seg?n el rédito pol?tico que dé. Si le va bien en las elecciones dir?amos que su estrategia est? bien. Yo no lo conozco mucho, pero no me parece mal en principio.
–A Edu Gal?n también le gustan esos barrizales de Twitter.
–Soy calentucu, no es dif?cil que entre en una discusi?n, lo que pasa es que tienes que escoger muy bien y no ir a por el primer bot que te aparece. Yo no demonizo las redes sociales, y las discusiones pueden estar bien. Pero, claro, hay gente a la que no recomendar?a estar en Twitter, donde t? dices: "Buenos d?as" y te responden: "Gilipollas". Hay que tener un car?cter determinado.
–?Qué conclusi?n sacamos de todo este clima?
–Nos llama la atenci?n sobre la desconfianza ante la pol?tica (http://www.uc-4u.com/tags/politica/), que vemos también en el decrecimiento de la afiliaci?n sindical. Todo aquello m?nimamente organizado que busca cambiar las cosas a largo plazo parece que est? mal visto, se criminaliza a la pol?tica y, lo que es peor, la ?nica alternativa que se presenta son los gestos espurios, llamar la atenci?n, una realidad de blancos y negros o de fogonazos. En ese mundo infantil y cortoplacista, ?quién gana? El populismo de izquierdas y de derechas. En el enfrentamiento que vimos recientemente de esta se?ora impresentable de Vox con Irene Montero, m?s all? de que ella sea una subhumana descartable, llama la atenci?n esa dialéctica, que esa forma de hablar y tratarse del mundo virtual ha calado en los populismos. Tanto Podemos como Vox se han instalado en una ret?rica en la que o todos son fachas o son fachas orgullosos. Es espurio, dura poco y crea un ambiente hediondo del que solo sacan beneficio los l?deres: Abascal sigue sin hincarla y el amado l?der anda haciendo un "crowdfunding" para que le abran un canal de YouTube a un millonario como Roures. Hemos sido enga?ados.
–?Y qué pasa con esos chavales para los que el racismo o el machismo se ha vuelto guay por lo gamberro?
–En el libro concluyo: "Debemos entender qué significan las m?scaras y a qué nos comprometen en un mundo donde los significados y los compromisos han dejado de ser importantes". Los chavales viven en una permanente ecolalia donde se repiten los esl?ganes y se quedan con el que suene mejor, no con su significado o compromiso. Puede ser echar a los inmigrantes o una teor?a de la conspiraci?n, no tiene que ver con lo moralmente superior o inferior. Est?n imbuidos en un mundo de hashtags cortoplacistas donde, de pronto, esto de ser facha o de creer que los negros son inferiores les cuadra o les parece rebelde. Y por mucho que no quieran, s? tiene consecuencias. En su formaci?n, en su voto, en la forma de ver la vida. Est?n absortos en este chau-chau moral en el que también veo a los chicos reaccionar ante un feminismo que se ha dedicado a demonizar a los hombres. La t?ctica es absurda, porque lo que consigue es m?s hombres imbéciles, y ser hombre o mujer no es un valor moral.
–Todo esto, claro, son debates de este lado del mundo.
–Dejo muy claro que hablamos de la parte occidental, de din?micas de la sociedad de consumo. Yo no tengo ninguna duda de que vivimos en un mundo mejor que los anteriores, no soy un nost?lgico. No pido que dejemos de usar las redes, de ir al McDonald’s o que nos hagamos ermita?os. Pido que ante algo a lo que dedicamos tantas horas, que no est? dise?ado por educadores sino por la mayor hez del universo, que son multinacionales americanas con gentuza como Musk (http://www.uc-4u.com/tags/tesla/) al frente, que dediquemos un tiempo a entender qué significan las cosas, que no puedo poner #stopcancer y en el mismo tuit recomendar flores de bach contra el de mama. Que no nos enga?en, que estemos alertas ante la din?mica del burro con las anteojeras.
–Es muy exigente cumplir con todos los nuevos mandamientos morales.
–Y la red lo favorece. Ya no es que no puedas comer carne roja un d?a, es que si pasas por delante de un jam?n el cambio clim?tico va a aumentar. Todo se vuelve hiperb?lico y moral en este mercado de la atenci?n. Una cosa es decir: "Yo soy vegano y me molesta que comas jam?n". Pero si dices: "Soy vegano y cada vez que comes jam?n est?s acabando con la capa de ozono", est?s cambiando el plano moral y lo ?nico que consigues es que el interpelado coma m?s jam?n o aumentar la ansiedad. En un mundo en que cualquier acci?n cotidiana puede ser grabada y analizada en el ?mbito moral, hemos acabado con la confianza en lo tonto que es el otro. Ya no se disculpa ni el error.
–La ?ltima. A Oviedo viene a charlar con Sergio del Molino.
–Hay que alabar la labor suya con "Un tal Gonz?lez" de novelar los a?os de éxito de aquel Gobierno socialista. Sergio hace un trabajo estupendo. En la biblioteca de La Granja hablaremos m?s sobre c?mo escribimos, una charla entre amigos, estamos ya muy rodados juntos.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/cultura/retorica-vox-son-fachas-o-79225862)