الريــم
11-23-2022, 11:38 AM
Qué mas quisiera B?rbara Garc?a que estar ahora peleando con los antojos adolescentes de su hija mayor, Amets, quien con 17 a?os empezar?a ya a echar el ojo a novietes y a querer salir de fiesta. O con los caprichos de la peque?a, Sara, quien a punto de cumplir 15 a?os –naci? un 26 de noviembre– querr?a elegir ya su propia ropa o imitar en todo a su hermana.
"O quién sabe en qué andar?an...", reflexiona B?rbara Garc?a. Porque nunca lo sabr? ni, desgraciadamente, tendr? que enfrentarse a educar a dos adolescentes.
A B?rbara Garc?a la vida se le par? un 27 de noviembre de hace ahora 8 a?os. Ese d?a su expareja y padre de sus dos hijas las mat? a sangre fr?a aprovechando las horas en las que pod?a ver a las peque?as, seg?n lo estipulado por la juez. Después, se suicid?. Un proceder t?pico del maltratador en la que es quiz?s la faceta m?s cruel que pueden mostrar estos psic?patas, estos monstruos sociales: vengarse de la exmujer haciendo da?o a los hijos.
Desde aquel d?a, B?rbara Garc?a, de 48 a?os y natural de Cudillero (Asturias), no vive, sino que sobrevive. Reside en la casa de Soto del Barco donde cri? a sus hijas y en la que ahora se refugia rodeada de sus recuerdos. "Me ayuda tener todo esto aqu?", explica mientras ense?a las fotos de Amets y Sara en su m?vil o colgadas de las paredes, llenas de mariposas, una figura que recuerda a las peque?as: rosas son las de Amets y rojas, las de Sara, los colores preferidos de ambas.
En su hogar, rodeada de sus mascotas (tres perros y tres gatos que le hacen gran compa??a y que le tienen entretenida todo el d?a) B?rbara Garc?a hace de tripas de coraz?n y recibe a La Nueva Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, para hablar de su situaci?n ahora que con el 25N, D?a internacional contra la violencia a las mujeres, los medios de comunicaci?n y la sociedad en general ponen especial interés en esta cuesti?n. Lo cierto es que le cuesta. No por nada, sino porque no le ve utilidad hablar m?s de un episodio que le destroz? la vida. "A m? esto no me sirve para nada", espeta. "Todo lo contrario, me revuelve, me pone mala, me empiezo a agobiar".
Pero a la vez encuentra un motivo muy poderoso también que la mueve a abordar su terrible situaci?n –no tiene ayudas p?blicas, ni un trabajo digno, solo la ayuda de su pareja y familia – y, en general, la de toda las v?ctimas de la violencia vicaria: el recuerdo de sus hijas. "Me gusta hablar de ellas. Ojo, no de lo que les pas?, no del morbo, sino de ellas. De sus gustos, de c?mo ser?an ahora. Recordarlas", explica.
Han pasado ocho a?os. ?Ayuda en algo el paso del tiempo?S?, han pasado ocho a?os. Pero yo sigo parada en esa fecha, la del 27 de noviembre de 2014. Para m? solo pasa el tiempo. Nada m?s.
?C?mo seguir adelante cuando a alguien le pasa algo as??Pues a trancas y a barrancas. Unos d?as me levanto de la cama, otros no salgo de all?. Me quedo en casa a pensar que no tengo trabajo, sin ilusi?n, ni nada.
En las ?ltimas fechas han sido varios los casos de violencia vicaria en Espa?a. ?Qué se le pasa por la cabeza al verlos?Procuro no ver las noticias, porque lo ?nico que consigo es deprimirme. M?s al ver que la cosa no cambia, y las personas que est?n en mi misma situaci?n siguen sin ayuda en serio. Solo se acuerdan de nosotros por estas fechas. Luego, el resto del a?o, est? el vac?o.
?Qué le dir?a a los que pasan por lo que usted pas?? En Asturias tenemos el caso reciente de la ni?a asesinada en*Gij?n, en este caso, por su madre.En esto no hay género, pero una madre lleva nueve meses a su hijo dentro, es peor a?n si cabe que lo haga una mujer. Para las v?ctimas no tengo palabras de consuelo. Porque por mucho que diga, poco sirve. Lo sé por experiencia. Ante algo as? hay poco o nulo consuelo. ?Aparte, qué voy a decirles? ?Que con el tiempo esto duele menos? Es que no es verdad, esto no deja nunca de doler, te dejas llevar por la vida. Aunque depende también de cada persona y c?mo lo afronte, si llega a encontrar un sentido a su vida. Por ejemplo, una madre que yo conozco, en situaci?n similar a la m?a, se la ha encontrado con el proyecto 'El latido de las mariposas'. Yo el sentido que le busco a mi vida es que se recuerde a mis hijas.
Usted y otras mujeres v?ctimas de violencia vicaria –entre ellas, Ruth Ortiz, la madre de Ruth y José– hab?an formado un grupo en Whatsapp para estar en contacto, apoyarse, reflexionar...S?, ese grupo sigue activo, pero se fue sumando mucha gente, con situaciones distintas a la nuestra, no de violencia vicaria, y yo me sent? m?s c?moda dej?ndolo. Entonces he impulsado otro grupo, se llama 'Terapia para todas'. No es un nombre muy original, pero resume para lo que sirve. Somos cinco madres y a diario estamos en contacto y, cuando podemos, nos juntamos en alg?n lugar de Espa?a. Estamos Ruth, Itziar, Marianela, Roc?o y yo. Dos lo dejaron por diferente motivo.
B?rbara, le hago la pregunta del mill?n: ?cree que hay casos de ni?os asesinados por sus padres, maltratadores, que se podr?an evitar?Pues claro que los hay si se hiciera caso a las alertas.
?Cree que ha mejorado algo la situaci?n de las v?ctimas?No. Desde que a m? me sucedi? ha habido muchos casos m?s. Ah? siguen. Unos son m?s sonoros que otros. Y las v?ctimas como yo, mal.Su gran objetivo, su obsesi?n, siempre ha sido mantener vivo el recuerdo de Amets y Sara.No es obsesi?n, es solo el deseo de que no se olviden de unas cr?as que por desgracia no podr?n dejar huella en este mundo, o la dejan muy breve. Yo intento que sigan ah?.
Lo est? consiguiendo. Ah? est? el monolito en el parque de Soto del Barco y la iniciativa 'El latido de las mariposas' que de alguna forma usted han traslado a Asturias.S?. Si he podido conseguir mantener vivo su recuerdo es gracias a la gente que todav?a tiene empat?a, se pone en mi lugar y me ayuda en ello. Por supuesto que me gustar?a que fuera m?s, no solo en d?as se?alados como el 25 de noviembre o por el aniversario de las cr?as. Pero yo siempre que me dejen y tenga ayuda seguiré adelante.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/sucesos/testimonio-madre-ninas-asesinadas-padre-asturias-78956929)
"O quién sabe en qué andar?an...", reflexiona B?rbara Garc?a. Porque nunca lo sabr? ni, desgraciadamente, tendr? que enfrentarse a educar a dos adolescentes.
A B?rbara Garc?a la vida se le par? un 27 de noviembre de hace ahora 8 a?os. Ese d?a su expareja y padre de sus dos hijas las mat? a sangre fr?a aprovechando las horas en las que pod?a ver a las peque?as, seg?n lo estipulado por la juez. Después, se suicid?. Un proceder t?pico del maltratador en la que es quiz?s la faceta m?s cruel que pueden mostrar estos psic?patas, estos monstruos sociales: vengarse de la exmujer haciendo da?o a los hijos.
Desde aquel d?a, B?rbara Garc?a, de 48 a?os y natural de Cudillero (Asturias), no vive, sino que sobrevive. Reside en la casa de Soto del Barco donde cri? a sus hijas y en la que ahora se refugia rodeada de sus recuerdos. "Me ayuda tener todo esto aqu?", explica mientras ense?a las fotos de Amets y Sara en su m?vil o colgadas de las paredes, llenas de mariposas, una figura que recuerda a las peque?as: rosas son las de Amets y rojas, las de Sara, los colores preferidos de ambas.
En su hogar, rodeada de sus mascotas (tres perros y tres gatos que le hacen gran compa??a y que le tienen entretenida todo el d?a) B?rbara Garc?a hace de tripas de coraz?n y recibe a La Nueva Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, para hablar de su situaci?n ahora que con el 25N, D?a internacional contra la violencia a las mujeres, los medios de comunicaci?n y la sociedad en general ponen especial interés en esta cuesti?n. Lo cierto es que le cuesta. No por nada, sino porque no le ve utilidad hablar m?s de un episodio que le destroz? la vida. "A m? esto no me sirve para nada", espeta. "Todo lo contrario, me revuelve, me pone mala, me empiezo a agobiar".
Pero a la vez encuentra un motivo muy poderoso también que la mueve a abordar su terrible situaci?n –no tiene ayudas p?blicas, ni un trabajo digno, solo la ayuda de su pareja y familia – y, en general, la de toda las v?ctimas de la violencia vicaria: el recuerdo de sus hijas. "Me gusta hablar de ellas. Ojo, no de lo que les pas?, no del morbo, sino de ellas. De sus gustos, de c?mo ser?an ahora. Recordarlas", explica.
Han pasado ocho a?os. ?Ayuda en algo el paso del tiempo?S?, han pasado ocho a?os. Pero yo sigo parada en esa fecha, la del 27 de noviembre de 2014. Para m? solo pasa el tiempo. Nada m?s.
?C?mo seguir adelante cuando a alguien le pasa algo as??Pues a trancas y a barrancas. Unos d?as me levanto de la cama, otros no salgo de all?. Me quedo en casa a pensar que no tengo trabajo, sin ilusi?n, ni nada.
En las ?ltimas fechas han sido varios los casos de violencia vicaria en Espa?a. ?Qué se le pasa por la cabeza al verlos?Procuro no ver las noticias, porque lo ?nico que consigo es deprimirme. M?s al ver que la cosa no cambia, y las personas que est?n en mi misma situaci?n siguen sin ayuda en serio. Solo se acuerdan de nosotros por estas fechas. Luego, el resto del a?o, est? el vac?o.
?Qué le dir?a a los que pasan por lo que usted pas?? En Asturias tenemos el caso reciente de la ni?a asesinada en*Gij?n, en este caso, por su madre.En esto no hay género, pero una madre lleva nueve meses a su hijo dentro, es peor a?n si cabe que lo haga una mujer. Para las v?ctimas no tengo palabras de consuelo. Porque por mucho que diga, poco sirve. Lo sé por experiencia. Ante algo as? hay poco o nulo consuelo. ?Aparte, qué voy a decirles? ?Que con el tiempo esto duele menos? Es que no es verdad, esto no deja nunca de doler, te dejas llevar por la vida. Aunque depende también de cada persona y c?mo lo afronte, si llega a encontrar un sentido a su vida. Por ejemplo, una madre que yo conozco, en situaci?n similar a la m?a, se la ha encontrado con el proyecto 'El latido de las mariposas'. Yo el sentido que le busco a mi vida es que se recuerde a mis hijas.
Usted y otras mujeres v?ctimas de violencia vicaria –entre ellas, Ruth Ortiz, la madre de Ruth y José– hab?an formado un grupo en Whatsapp para estar en contacto, apoyarse, reflexionar...S?, ese grupo sigue activo, pero se fue sumando mucha gente, con situaciones distintas a la nuestra, no de violencia vicaria, y yo me sent? m?s c?moda dej?ndolo. Entonces he impulsado otro grupo, se llama 'Terapia para todas'. No es un nombre muy original, pero resume para lo que sirve. Somos cinco madres y a diario estamos en contacto y, cuando podemos, nos juntamos en alg?n lugar de Espa?a. Estamos Ruth, Itziar, Marianela, Roc?o y yo. Dos lo dejaron por diferente motivo.
B?rbara, le hago la pregunta del mill?n: ?cree que hay casos de ni?os asesinados por sus padres, maltratadores, que se podr?an evitar?Pues claro que los hay si se hiciera caso a las alertas.
?Cree que ha mejorado algo la situaci?n de las v?ctimas?No. Desde que a m? me sucedi? ha habido muchos casos m?s. Ah? siguen. Unos son m?s sonoros que otros. Y las v?ctimas como yo, mal.Su gran objetivo, su obsesi?n, siempre ha sido mantener vivo el recuerdo de Amets y Sara.No es obsesi?n, es solo el deseo de que no se olviden de unas cr?as que por desgracia no podr?n dejar huella en este mundo, o la dejan muy breve. Yo intento que sigan ah?.
Lo est? consiguiendo. Ah? est? el monolito en el parque de Soto del Barco y la iniciativa 'El latido de las mariposas' que de alguna forma usted han traslado a Asturias.S?. Si he podido conseguir mantener vivo su recuerdo es gracias a la gente que todav?a tiene empat?a, se pone en mi lugar y me ayuda en ello. Por supuesto que me gustar?a que fuera m?s, no solo en d?as se?alados como el 25 de noviembre o por el aniversario de las cr?as. Pero yo siempre que me dejen y tenga ayuda seguiré adelante.
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