الريــم
11-13-2022, 11:30 AM
Quiz? uno de los momentos m?s desconcertantes de los que vivi? el asesinado Ernest Lluch en sus muchos viajes a Euskadi en los 80 y 90 fuera el de una tarde de charla en una casa del pueblo de la margen izquierda de la r?a del Nervi?n. Por entonces ETA enviaba sin cesar personas al cementerio, y hac?a poco que los GAL hab?an dejado un reguero de asesinatos en territorio francés sin grandes condenas, incluso alg?n sordo aplauso, a este lado de los Pirineos. El exministro de Sanidad llevaba un rato en aquel local socialista hablando de di?logo y pacificaci?n, de resistir la tentaci?n de responder con violencia, cuando uno de los presentes, afiliado de base sin pretensiones, levant? una mano de currante para preguntar: “Entonces, Ernest, ?t? lo que dices es que hablemos con los que nos matan?” Tres decenios largos después, en Portugalete, en la misma orilla izquierda del Nervi?n -hoy menos obrera-, el delegado del Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso, se ha visto en la necesidad de enfatizar una obvia condena de los GAL. La banda parapolicial que mat? a 27 personas entre 1983 y 1987, buscando a etarras y mordiendo también a gente ajena a ETA, “fue un gran horror que gener? un gran dolor, que es el nuestro, y rest? crédito y legitimidad al Estado”.
Lo dijo Itxaso el miércoles, en un acto del ayuntamiento por el D?a de la Memoria en Euskadi, en otro intento socialista de poner distancia con unas declaraciones de José Barrionuevo (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/barrionuevo-levanta-ola-indignacion-admitir-78247509) el pasado domingo a 'El Pa?s'. Quien fuera ministro del Interior del primer gobierno Gonz?lez se ha reconocido autor de la orden para que tres polic?as espa?oles atraparan en Hendaya al etarra Jose Mar?a Larretxea. Fue en octubre de 1983, en plena tensi?n por el secuestro –que acab? en asesinato- del capit?n de Farmacia Alberto Mart?n Barrios, y en la misma semana que José Antonio Lasa y Joxi Zabala eran secuestrados también en Francia por guardias civiles que los terminar?an llevando a una fosa de cal viva.
M?s informaci?n (Auto)
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La mancha
Ha hablado Barrionuevo cuando a?n resonaban los fastos del PSOE por el 40 aniversario de la hist?rica victoria electoral de 1982, la primera experiencia socialdem?crata de Espa?a. Felipe Gonz?lez “recordando y conmemorando” entre aplausos en un mitin… y la mancha de los GAL reapareciendo tozuda en el traje de fiesta del partido.
Barrionuevo –como Alfonso Guerra y alg?n otro hist?rico- no hab?a sido invitado a la gala del PSOE. El lunes, el secretario general de los socialistas vascos, Eneko Andueza -como el colectivo de v?ctimas del terrorismo COVITE, y numerosos pol?ticos- hac?a una condena tajante de “las repugnantes declaraciones de José Barrionuevo”. Eso, en redes sociales; en la intimidad de los chats de afiliados, envi? una nota a?n m?s dura, augurando alguna acci?n judicial contra el exministro.
Se trata de atajar eso que el historiador del Memorial de las V?ctimas del Terrorismo Ra?l L?pez Romo llama “justificaci?n retrospectiva militante”, la de aquella violencia ilegal del Estado, con ra?ces anteriores a aquel gobierno socialista (los atentados del Batall?n Vasco Espa?ol en tiempos de la UCD, por ejemplo) y que se prolong? hasta 1987.
José Luis Corcuera: "No recuerdo que se montara ning?n esc?ndalo cuando la primera ministra brit?nica dijo: 'Yo disparé'"
En una justificaci?n retrospectiva, adem?s de Barrionuevo se colocan otros socialistas de la hornada del 82. “Le digo una cosa –comenta a El Peri?dico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica, desde su casa de jubilado en Madrid el exministro del Interior José Luis Corcuera, hoy fuera del PSOE-: quienes dimos cuenta al gobierno brit?nico de que un comando del IRA cruzaba Espa?a hacia Gibraltar fuimos los servicios de Interior. ?Se acuerda?” Agentes brit?nicos de Inteligencia esperaron a los tres terroristas y los acribillaron en la Main Street del pe??n el 6 de marzo de 1988. “Y la primera ministra –alude Corcuera a Margaret Thatcher- dijo en el Parlamento: ‘Yo disparé’. ?Usted recuerda que se montara alg?n esc?ndalo en el Reino Unido?”.
Las arcadas
Maider, la hija de Juan Carlos Garc?a Goena, ?ltima v?ctima de los GAL, ha dicho que la nueva confesi?n de Barrionuevo le revolvi? el est?mago. La confesi?n es nueva pero vieja. En sede parlamentaria, cuando Francia detuvo a los geos que hab?a enviado para atrapar a Larretxea, asumi? la responsabilidad del “incidente”. Y en sus memorias ‘2001 d?as en Interior’ (Ediciones B) lo tild? de “actuaci?n llevada a cabo a la desesperada, con la mejor intenci?n, pero no muy buena preparaci?n, fundada en m?viles humanitarios”.
La raz?n de Estado, o “humanitaria” por encima de la ley asquea también a Pilar, la hermana de Joxi Zabala. Retirada de su liderazgo sobre Elkarrekin, el Podemos vasco, detiene un momento los cuidados que dedica a su madre anciana para comentarle a este diario el “muy grave modelo de impunidad espa?ol”.
Pilar Zabala: "Hay un modelo espa?ol de impunidad. Aqu? el Estado no acepta que lo que ocurri? fue terrorismo de Estado"
Es una formulaci?n de los abogados del Equipo N?zkor para describir el trato, indultos incluidos, a aquella trama de pol?ticos y altos cargos de Interior como Rafael Vera y polic?as como José Amedo. La perpetuaci?n de un aparato policial franquista tras el franquismo. Muerto Franco, ese aparato “se rebas? creando los GAL -dice Zabala-. Aqu? el Estado no acepta que lo que ocurri? fue terrorismo de Estado, aunque califica as? lo que pas? en Chile y Argentina”. Pilar Zabala impulsa la web 'pidosaberlaverdadsobrelosgal' porque desconoce a?n mucho del asesinato de su hermano y porque en una ?ltima sentencia, formulada contra una apelaci?n del general de la Guardia Civil Enrique Rodr?guez Galindo, el Supremo establece “igual grado de responsabilidad penal” a la “decisi?n, coordinaci?n y ejecuci?n” de los cr?menes. “No se ha cumplido con ese principio”, lamenta Zabala.
"Berdin da"
En Zalla, su peque?o pueblo del alfoz de Bilbao, el ?nico concejal socialista, Josu Montalb?n, lleva decenios viendo copar el poder municipal al hegem?nico PNV. En las pr?ximas elecciones municipales otra vez unos 800 votos (viven all? 8.379 vecinos) ir?n al PSE-PSOE. Pero Montalb?n no sabe de quiénes son. Afiliados, el partido solo tiene en esa localidad 37, todos de un grupo de familias. Los dem?s son votantes an?nimos.Se ve a?n hoy en Euskadi la vieja holgura que tantos a?os de miedo ha dejado entre los huesos. Sigue siendo poco normal que alguien se declare abiertamente socialista -o popular- en los pueblos. Pero no es solo el temor. Montalb?n cree que es también efecto remoto de los GAL, de tantos a?os de pintadas “PSOE, GAL, berdin da” (son lo mismo). El desprestigio; la mancha. “Los GAL proporcionaron coartadas a ETA. Y sirvi? a todo el nacionalismo para tratar de arrinconar al PSE”, cree Montalb?n. El concejal de Zalla es todo menos un novato. Se curti? en el Congreso, y antes en la Diputaci?n de Vizcaya, donde empez? de colaborador en Acci?n Social con Ana ?riz, la esposa del colérico secretario general vizca?no Ricardo Garcia Damborenea, expulsado del PSOE tras su condena por colaborar en el secuestro de Segundo Marey. Montalb?n no estaba en ese mundo. Por entonces andaba viéndose “con otros pocos perros verdes” en un embri?n vasco no nacido de la corriente Izquierda Socialista. Hoy tira de sinceridad al recordar: “Viv?amos en un infierno. No apoyo ninguna ilegalidad, pero entonces, por muy dem?crata y buena persona que fueras, si alg?n etarra sufr?a un percance te importaba m?s bien poco”.
Josu Montalb?n: "Por muy dem?crata y buena persona que fueras, si alg?n etarra sufr?a un percance te importaba m?s bien poco”
Montalb?n, hijo de gudari del PNV combatiente en la Guerra Civil y encarcelado por el franquismo, con los apellidos Goikoetxea, Gaztatxu, Basterretxea y otros m?s de ocho desfilando tras su nombre, pas? siete de los a?os de plomo escoltado desde que la Polic?a le mostr? unos papeles incautados a ETA: “Ah? pon?a mi nombre, cu?ndo y por d?nde iba a entrenar para jugar al f?tbol…” A los socialistas vascos de pueblo en aquella época oscura les irritaba que otros compa?eros vinieran de fuera, lejos de las balas y las bombas lapa, a decirles qué cara poner. “Sin aceptarlo, porque no lo aceptaba, ten?as que entender que alguien fuera capaz de pensar en el ojo por ojo…” A Montalb?n no le gustan las palabras de Barrionuevo, pero tampoco “la cr?tica despiadada” al exministro. “Me parece bien que se diga que aquello era una aberraci?n, pero no me gusta que hoy se vaya de la mano con HB”.
Una voz temblorosa
Fernando Grande-Marlaska ha salido esta semana al paso de la confesi?n de Barrionuevo record?ndole a su antecesor que “lo del GAL fueron actuaciones terroristas”. Y sale a su vez al paso Corcuera: “Marlaska tiene suerte; no tiene un asesinato cada dos d?as como han tenido otros ministros del Interior. Por eso, a lo mejor, dice esas cosas”. “Mire, no quiero acusar a nadie de hipocres?a”, se retiene Corcuera, y hace otro relato de los 80, con m?s de 200 muertos acumulados en la cuenta de ETA: “Un ministro francés me dijo entonces: ‘Si en Francia llev?ramos m?s de 200 gendarmes asesinados, yo lo tendr?a muy dif?cil para controlar la situaci?n”. Tuvo dif?cil controlar su voz la francesa Veronique Caplanne el pasado d?a 9, en Portugalete, cuando le toc? subir al atril. Su garganta tembl? en el momento de hablar. “Por primera vez me he sentido escuchada”, dijo al acabar, 37 a?os después de que mataran a su padre.
A Robert Caplanne le pegaron cuatro tiros en una calle de Biarritz a las ocho de la ma?ana del d?a de Nochebuena de 1985, cuando se dirig?a al trabajo. Era un hombre modesto que hab?a servido en la marina francesa, gaullista e intrahist?rico como tantos trabajadores. Veronique se detuvo un momento, se coloc? las gafas: “Fue el GAL quien cometi? ese ataque. Se equivocaron… Los GAL, la polic?a… ?C?mo es posible? Los que ten?an que defendernos… ?Es un cataclismo! ”Ninguna encuesta est? disponible hoy para describir hasta qué punto los j?venes desconocen qué fue el GAL, sobre el que se trenzan dos desmemorias. La primera es la que han sufrido sus v?ctimas hasta que el Estado comenz?, t?midamente, a aceptar su dolor. La segunda es la de la erosi?n que sufri? una democracia joven sometida al desprestigio, contra el que se empe?aban voces como la de Ernest Lluch, y también advertencias como la que un activista an?nimo de Gesto por la Paz -los primeros que se atrevieron a salir a la calle a protestar en silencio contra la violencia- acu?? en una pancarta exhibida en el Arenal de Bilbao: “Si la democracia mata, la democracia muere”.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/terrorismo-gal-desprestigio-democracia-desmemoria-78496546)
Lo dijo Itxaso el miércoles, en un acto del ayuntamiento por el D?a de la Memoria en Euskadi, en otro intento socialista de poner distancia con unas declaraciones de José Barrionuevo (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/barrionuevo-levanta-ola-indignacion-admitir-78247509) el pasado domingo a 'El Pa?s'. Quien fuera ministro del Interior del primer gobierno Gonz?lez se ha reconocido autor de la orden para que tres polic?as espa?oles atraparan en Hendaya al etarra Jose Mar?a Larretxea. Fue en octubre de 1983, en plena tensi?n por el secuestro –que acab? en asesinato- del capit?n de Farmacia Alberto Mart?n Barrios, y en la misma semana que José Antonio Lasa y Joxi Zabala eran secuestrados también en Francia por guardias civiles que los terminar?an llevando a una fosa de cal viva.
M?s informaci?n (Auto)
http://placehold.it/175x100 T?tulo noticia (Auto)
La mancha
Ha hablado Barrionuevo cuando a?n resonaban los fastos del PSOE por el 40 aniversario de la hist?rica victoria electoral de 1982, la primera experiencia socialdem?crata de Espa?a. Felipe Gonz?lez “recordando y conmemorando” entre aplausos en un mitin… y la mancha de los GAL reapareciendo tozuda en el traje de fiesta del partido.
Barrionuevo –como Alfonso Guerra y alg?n otro hist?rico- no hab?a sido invitado a la gala del PSOE. El lunes, el secretario general de los socialistas vascos, Eneko Andueza -como el colectivo de v?ctimas del terrorismo COVITE, y numerosos pol?ticos- hac?a una condena tajante de “las repugnantes declaraciones de José Barrionuevo”. Eso, en redes sociales; en la intimidad de los chats de afiliados, envi? una nota a?n m?s dura, augurando alguna acci?n judicial contra el exministro.
Se trata de atajar eso que el historiador del Memorial de las V?ctimas del Terrorismo Ra?l L?pez Romo llama “justificaci?n retrospectiva militante”, la de aquella violencia ilegal del Estado, con ra?ces anteriores a aquel gobierno socialista (los atentados del Batall?n Vasco Espa?ol en tiempos de la UCD, por ejemplo) y que se prolong? hasta 1987.
José Luis Corcuera: "No recuerdo que se montara ning?n esc?ndalo cuando la primera ministra brit?nica dijo: 'Yo disparé'"
En una justificaci?n retrospectiva, adem?s de Barrionuevo se colocan otros socialistas de la hornada del 82. “Le digo una cosa –comenta a El Peri?dico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica, desde su casa de jubilado en Madrid el exministro del Interior José Luis Corcuera, hoy fuera del PSOE-: quienes dimos cuenta al gobierno brit?nico de que un comando del IRA cruzaba Espa?a hacia Gibraltar fuimos los servicios de Interior. ?Se acuerda?” Agentes brit?nicos de Inteligencia esperaron a los tres terroristas y los acribillaron en la Main Street del pe??n el 6 de marzo de 1988. “Y la primera ministra –alude Corcuera a Margaret Thatcher- dijo en el Parlamento: ‘Yo disparé’. ?Usted recuerda que se montara alg?n esc?ndalo en el Reino Unido?”.
Las arcadas
Maider, la hija de Juan Carlos Garc?a Goena, ?ltima v?ctima de los GAL, ha dicho que la nueva confesi?n de Barrionuevo le revolvi? el est?mago. La confesi?n es nueva pero vieja. En sede parlamentaria, cuando Francia detuvo a los geos que hab?a enviado para atrapar a Larretxea, asumi? la responsabilidad del “incidente”. Y en sus memorias ‘2001 d?as en Interior’ (Ediciones B) lo tild? de “actuaci?n llevada a cabo a la desesperada, con la mejor intenci?n, pero no muy buena preparaci?n, fundada en m?viles humanitarios”.
La raz?n de Estado, o “humanitaria” por encima de la ley asquea también a Pilar, la hermana de Joxi Zabala. Retirada de su liderazgo sobre Elkarrekin, el Podemos vasco, detiene un momento los cuidados que dedica a su madre anciana para comentarle a este diario el “muy grave modelo de impunidad espa?ol”.
Pilar Zabala: "Hay un modelo espa?ol de impunidad. Aqu? el Estado no acepta que lo que ocurri? fue terrorismo de Estado"
Es una formulaci?n de los abogados del Equipo N?zkor para describir el trato, indultos incluidos, a aquella trama de pol?ticos y altos cargos de Interior como Rafael Vera y polic?as como José Amedo. La perpetuaci?n de un aparato policial franquista tras el franquismo. Muerto Franco, ese aparato “se rebas? creando los GAL -dice Zabala-. Aqu? el Estado no acepta que lo que ocurri? fue terrorismo de Estado, aunque califica as? lo que pas? en Chile y Argentina”. Pilar Zabala impulsa la web 'pidosaberlaverdadsobrelosgal' porque desconoce a?n mucho del asesinato de su hermano y porque en una ?ltima sentencia, formulada contra una apelaci?n del general de la Guardia Civil Enrique Rodr?guez Galindo, el Supremo establece “igual grado de responsabilidad penal” a la “decisi?n, coordinaci?n y ejecuci?n” de los cr?menes. “No se ha cumplido con ese principio”, lamenta Zabala.
"Berdin da"
En Zalla, su peque?o pueblo del alfoz de Bilbao, el ?nico concejal socialista, Josu Montalb?n, lleva decenios viendo copar el poder municipal al hegem?nico PNV. En las pr?ximas elecciones municipales otra vez unos 800 votos (viven all? 8.379 vecinos) ir?n al PSE-PSOE. Pero Montalb?n no sabe de quiénes son. Afiliados, el partido solo tiene en esa localidad 37, todos de un grupo de familias. Los dem?s son votantes an?nimos.Se ve a?n hoy en Euskadi la vieja holgura que tantos a?os de miedo ha dejado entre los huesos. Sigue siendo poco normal que alguien se declare abiertamente socialista -o popular- en los pueblos. Pero no es solo el temor. Montalb?n cree que es también efecto remoto de los GAL, de tantos a?os de pintadas “PSOE, GAL, berdin da” (son lo mismo). El desprestigio; la mancha. “Los GAL proporcionaron coartadas a ETA. Y sirvi? a todo el nacionalismo para tratar de arrinconar al PSE”, cree Montalb?n. El concejal de Zalla es todo menos un novato. Se curti? en el Congreso, y antes en la Diputaci?n de Vizcaya, donde empez? de colaborador en Acci?n Social con Ana ?riz, la esposa del colérico secretario general vizca?no Ricardo Garcia Damborenea, expulsado del PSOE tras su condena por colaborar en el secuestro de Segundo Marey. Montalb?n no estaba en ese mundo. Por entonces andaba viéndose “con otros pocos perros verdes” en un embri?n vasco no nacido de la corriente Izquierda Socialista. Hoy tira de sinceridad al recordar: “Viv?amos en un infierno. No apoyo ninguna ilegalidad, pero entonces, por muy dem?crata y buena persona que fueras, si alg?n etarra sufr?a un percance te importaba m?s bien poco”.
Josu Montalb?n: "Por muy dem?crata y buena persona que fueras, si alg?n etarra sufr?a un percance te importaba m?s bien poco”
Montalb?n, hijo de gudari del PNV combatiente en la Guerra Civil y encarcelado por el franquismo, con los apellidos Goikoetxea, Gaztatxu, Basterretxea y otros m?s de ocho desfilando tras su nombre, pas? siete de los a?os de plomo escoltado desde que la Polic?a le mostr? unos papeles incautados a ETA: “Ah? pon?a mi nombre, cu?ndo y por d?nde iba a entrenar para jugar al f?tbol…” A los socialistas vascos de pueblo en aquella época oscura les irritaba que otros compa?eros vinieran de fuera, lejos de las balas y las bombas lapa, a decirles qué cara poner. “Sin aceptarlo, porque no lo aceptaba, ten?as que entender que alguien fuera capaz de pensar en el ojo por ojo…” A Montalb?n no le gustan las palabras de Barrionuevo, pero tampoco “la cr?tica despiadada” al exministro. “Me parece bien que se diga que aquello era una aberraci?n, pero no me gusta que hoy se vaya de la mano con HB”.
Una voz temblorosa
Fernando Grande-Marlaska ha salido esta semana al paso de la confesi?n de Barrionuevo record?ndole a su antecesor que “lo del GAL fueron actuaciones terroristas”. Y sale a su vez al paso Corcuera: “Marlaska tiene suerte; no tiene un asesinato cada dos d?as como han tenido otros ministros del Interior. Por eso, a lo mejor, dice esas cosas”. “Mire, no quiero acusar a nadie de hipocres?a”, se retiene Corcuera, y hace otro relato de los 80, con m?s de 200 muertos acumulados en la cuenta de ETA: “Un ministro francés me dijo entonces: ‘Si en Francia llev?ramos m?s de 200 gendarmes asesinados, yo lo tendr?a muy dif?cil para controlar la situaci?n”. Tuvo dif?cil controlar su voz la francesa Veronique Caplanne el pasado d?a 9, en Portugalete, cuando le toc? subir al atril. Su garganta tembl? en el momento de hablar. “Por primera vez me he sentido escuchada”, dijo al acabar, 37 a?os después de que mataran a su padre.
A Robert Caplanne le pegaron cuatro tiros en una calle de Biarritz a las ocho de la ma?ana del d?a de Nochebuena de 1985, cuando se dirig?a al trabajo. Era un hombre modesto que hab?a servido en la marina francesa, gaullista e intrahist?rico como tantos trabajadores. Veronique se detuvo un momento, se coloc? las gafas: “Fue el GAL quien cometi? ese ataque. Se equivocaron… Los GAL, la polic?a… ?C?mo es posible? Los que ten?an que defendernos… ?Es un cataclismo! ”Ninguna encuesta est? disponible hoy para describir hasta qué punto los j?venes desconocen qué fue el GAL, sobre el que se trenzan dos desmemorias. La primera es la que han sufrido sus v?ctimas hasta que el Estado comenz?, t?midamente, a aceptar su dolor. La segunda es la de la erosi?n que sufri? una democracia joven sometida al desprestigio, contra el que se empe?aban voces como la de Ernest Lluch, y también advertencias como la que un activista an?nimo de Gesto por la Paz -los primeros que se atrevieron a salir a la calle a protestar en silencio contra la violencia- acu?? en una pancarta exhibida en el Arenal de Bilbao: “Si la democracia mata, la democracia muere”.
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