الريــم
11-08-2022, 03:22 PM
El pasado d?a 2 se mont? revuelo en el Congreso porque empez? a expandirse el efecto pol?tico de un reportaje de la BBC sobre los hechos ocurridos en la frontera de Melilla a finales de junio, cuando varias decenas de migrantes intentaron cruzarla y la actuaci?n policial provoc? la muerte de al menos 23 personas. Horas m?s tarde, EH Bildu anunci? que pedir?a la creaci?n de una comisi?n de investigaci?n parlamentaria porque se habr?a demostrado, dijeron sus diputados, que Fernando Grande-Marlaska hab?a mentido. La portavoz del PP, Cuca Gamarra, compareci? ante los medios, a tenor del l?o, para incidir en eso mismo, en las supuestas mentiras del ministro de Interior. No descart? el apoyo a la investigaci?n parlamentaria.
Un d?a después, nueve formaciones pol?ticas formalizaron el registro de una petici?n de comisi?n. Entre los firmantes, el presidente del grupo de Unidas Podemos, Jaume Asens, y el diputado Enrique Santiago, alto cargo del Gobierno hasta hace unos meses. Se estaba fraguando una nueva maniobra de acoso al PSOE. Se unieron a la iniciativa ERC, EH Bildu, Junts, PDeCAT, M?s Pa?s, Comprom?s y BNG.
Ese mismo d?a, a ?ltima hora de la tarde, los portavoces de los grupos recibieron la notificaci?n de la comparecencia del ministro Marlaska ante la comisi?n de control de los gastos reservados, m?s conocida como comisi?n de secretos oficiales. La convocatoria sorprendi? a varios de los destinatarios. No se la esperaban. Fuentes de Interior indicaron que estaba prevista desde septiembre. Curiosa, por tanto, la fecha elegida.
Porque un d?a antes de la comparecencia, una delegaci?n de diputados viajar?a a Melilla para recabar “in situ” informaci?n de primera mano sobre lo sucedido el 24 de junio en la valla. Y porque la presi?n pol?tica de cerco a Marlaska no ha parado de crecer desde la emisi?n del documental de la BBC, en el que se apunt? un papel destacado de las fuerzas de seguridad espa?olas en la tragedia. Una de las denuncias del reportaje consisti? en la presunta ocultaci?n de im?genes.
En una legislatura en la que el Gobierno apenas ha tenido problemas para la gesti?n de los tiempos parlamentarios, la decisi?n de que la comparecencia ante una comisi?n como la de secretos oficiales se produzca en medio del revuelo llama la atenci?n. Si se tiene en cuenta, adem?s, que se hab?a registrado en septiembre, esos dos meses de espera en el limbo del Congreso se prestan a suspicacias. En Interior insisten en que el motivo de la asistencia no guarda ning?n tipo de relaci?n con la tragedia de Melilla y fuentes parlamentarias consultadas al respecto no lo ponen en duda. Pero eso no significa que la polémica no se aborde
Porque la comisi?n de control de gastos reservados es opaca; las sesiones son a puerta cerrada por la ?ndole de los temas a tratar. La informaci?n que se intercambia aqu? es secreta y una ley de 1995 lo blinda. Marlaska (que ir? este martes a su primera comisi?n de secretos desde que es ministro) contar? a los portavoces de los grupos en qué gastos reservados se est? gastando el dinero su departamento. Hablar?, por tanto, de la seguridad del Estado, lo que no puede tener publicidad, como se consagra en la norma citada. De hecho, los diputados que asisten, uno por cada grupo, no pueden contar ni lo que escuchan ni lo que ven. Hacerlo es un delito tipificado en el C?digo Penal.
Ahora bien, diversas fuentes avanzan a El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, que si el ministro no lo aborda antes, los portavoces s? mencionar?n los hechos del 24 de junio en la ciudad aut?noma. De alg?n modo, y aunque el motivo de la comparecencia sea otro, los tr?gicos acontecimientos de entonces sobrevolar?n por la comisi?n de secretos oficiales.
No baja la presi?n
La visita que una delegaci?n de la Comisi?n de Interior del Congreso ha efectuado a Melilla este lunes no ha variado las posiciones pol?ticas de los grupos a los que representan. Vuelven con la que fueron. Era algo previsible, de ah? cierta extra?eza en la oposici?n por la fecha elegida para que el ministro vaya a una comisi?n como la de secretos oficiales.
Jon I?arritu, de EH Bildu, ha reconocido a su regreso a Madrid que la comitiva efectivamente ha podido visionar im?genes y analizar planos y otros datos, y con ello sobre la mesa, su conclusi?n es tajante: ni “un ?pice de duda” de que “la avalancha se produjo en territorio espa?ol al romperse la puerta de entrada al acceso controlado por las autoridades” nacionales.
Adem?s, tal y como consta en las declaraciones enviadas por su partido, hubo “coordinaci?n con las autoridades marroqu?es para que los gendarmes accedieran a la infraestructura de la valla”. A su juicio, pese a la virulencia de la respuesta policial, “no hubo ning?n tipo de auxilio ni de atenci?n” y se procedi? al rechazo de 500 personas. Como novedad, apunta el diputado vasco, el empleo de 65 pelotas de goma.
Resultado para la formaci?n independentista vasca: “El Gobierno no puede seguir actuando como la avestruz”, por lo que ha de “facilitar” la creaci?n de una comisi?n de investigaci?n en el Congreso.
Maria Dantas, de ERC, ha abogado por lo mismo, y Enrique Santiago, de Unidas Podemos, quien ha remarcado la conveniencia de la comisi?n porque el objetivo debe ser evitar la repetici?n de tragedias como la de junio.
Que el representante del socio del PSOE en el Gobierno diga, como dijo este lunes, que “todo apunta” a que los fallecimientos se produjeron en suelo espa?ol no es sino una muestra m?s de la presi?n que la formaci?n “morada” ha decidido ejercer. No es la primera vez que Podemos vierte sobre el ministro de Interior carga cr?tica. La derogaci?n de la ley mordaza sigue pendiente en el Congreso y sin visos, adem?s, de que desbloquee su tramitaci?n, por mencionar un precedente.
El PP al rescate
En conversaci?n con este medio, la diputada del PP Ana Belén V?zquez, integrante de la delegaci?n y portavoz de los populares en la Comisi?n de Interior, ha salido en defensa de la Guardia Civil tras su visita, que ha recordado que estaba programada antes de la emisi?n del reportaje de la BBC. Aunque ha reconocido “la falta de efectivos” disponibles el 24 de junio, la actuaci?n result? “legal y proporcionada”.
Para la diputada, la clave de la gesti?n migratoria se sostiene en tres pilares: la r?brica con Marruecos de acuerdos de repatriaci?n, la aplicaci?n de la ley de extranjer?a y el rechazo en frontera. Todo esto, recalca, fue criticado por el PSOE cuando estaba en la oposici?n, e incluso recurri? las llamadas devoluciones en caliente ante el Tribunal Constitucional. La medida, pese a ello, fue avalada.
V?zquez lamenta “las contradicciones” del Partido Socialista, de las que ahora es v?ctima como partido de gobierno, a?ade. El corolario, en su opini?n, es “el bien resuelto” que dijo el presidente d?as después del desenlace del 24 de junio en la valla.
Por tanto, nada que objetar al papel de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, pero s? a la gesti?n del Gobierno y a la posici?n de sus aliados parlamentarios. Para impedir que la Guardia Civil sea cuestionada en el Congreso, lo que el PP ve tremendamente probable si se formara la comisi?n de investigaci?n, los populares descartan apoyarla. Gamarra dej? una rendija. D?as m?s tarde, cerrada.
El PP argumenta que la responsabilidad tiene un nombre, s?lo uno, y es el de Fernando Grande-Marlaska. No pedir? por el momento su dimisi?n, subraya V?zquez, ni fomentar? la investigaci?n parlamentaria. Pero s? insistir? en la comparecencia del ministro. Ser?a la segunda tras la que protagoniz? ante el pleno en septiembre, precisamente por la tragedia de Melilla. Una crisis que no cesa, pero que al menos esquiva la investigaci?n parlamentaria.
La Mesa del Congreso, en la reuni?n pr?xima, calificar? la petici?n de comisi?n cursada por varios de los aliados parlamentarios. Cuando la Junta de Portavoces debate cu?ndo iniciar el procedimiento en una sesi?n plenaria, PSOE y PP, y previsiblemente Cs y Vox, provocar?n que la solicitud decaiga.
El regreso del exportavoz socialista Héctor G?mez
La comisi?n de control de gastos reservados del Congreso, formada hace apenas seis meses, celebrar? este martes la segunda reuni?n de la legislatura. La primera fue para que la entonces directora del CNI, Paz Esteban, explicara el uso del sistema de intervenci?n de comunicaciones 'Pegasus'. La segunda la protagonizar? el ministro de Interior.
Esta sesi?n, adem?s de las particularidades que entra?a (sesiones a puerta cerrada, obligaci?n de mantener secreto sobre lo que se trate), se caracterizar? por un 'despiste'. El grupo socialista no ha cursado la petici?n para que en el orden del d?a de un pleno se incluya la sustituci?n de Héctor G?mez, exportavoz, por Patxi L?pez, su sucesor desde junio (formalmente desde septiembre). Ha de procederse as? porque la designaci?n de los integrantes de esta comisi?n depende del pleno.
En consecuencia, el diputado canario, pr?cticamente inédito en el Congreso desde su destituci?n, representar? a su partido en la comisi?n. Fuentes del grupo parlamentario destacan a El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, que no hab?a dado tiempo al cambio y que se har? en breve.
أكثر... (https://www.sport.es/es/noticias/nacional/oxigeno-marlaska-investigacion-congreso-tragedia-78288609)
Un d?a después, nueve formaciones pol?ticas formalizaron el registro de una petici?n de comisi?n. Entre los firmantes, el presidente del grupo de Unidas Podemos, Jaume Asens, y el diputado Enrique Santiago, alto cargo del Gobierno hasta hace unos meses. Se estaba fraguando una nueva maniobra de acoso al PSOE. Se unieron a la iniciativa ERC, EH Bildu, Junts, PDeCAT, M?s Pa?s, Comprom?s y BNG.
Ese mismo d?a, a ?ltima hora de la tarde, los portavoces de los grupos recibieron la notificaci?n de la comparecencia del ministro Marlaska ante la comisi?n de control de los gastos reservados, m?s conocida como comisi?n de secretos oficiales. La convocatoria sorprendi? a varios de los destinatarios. No se la esperaban. Fuentes de Interior indicaron que estaba prevista desde septiembre. Curiosa, por tanto, la fecha elegida.
Porque un d?a antes de la comparecencia, una delegaci?n de diputados viajar?a a Melilla para recabar “in situ” informaci?n de primera mano sobre lo sucedido el 24 de junio en la valla. Y porque la presi?n pol?tica de cerco a Marlaska no ha parado de crecer desde la emisi?n del documental de la BBC, en el que se apunt? un papel destacado de las fuerzas de seguridad espa?olas en la tragedia. Una de las denuncias del reportaje consisti? en la presunta ocultaci?n de im?genes.
En una legislatura en la que el Gobierno apenas ha tenido problemas para la gesti?n de los tiempos parlamentarios, la decisi?n de que la comparecencia ante una comisi?n como la de secretos oficiales se produzca en medio del revuelo llama la atenci?n. Si se tiene en cuenta, adem?s, que se hab?a registrado en septiembre, esos dos meses de espera en el limbo del Congreso se prestan a suspicacias. En Interior insisten en que el motivo de la asistencia no guarda ning?n tipo de relaci?n con la tragedia de Melilla y fuentes parlamentarias consultadas al respecto no lo ponen en duda. Pero eso no significa que la polémica no se aborde
Porque la comisi?n de control de gastos reservados es opaca; las sesiones son a puerta cerrada por la ?ndole de los temas a tratar. La informaci?n que se intercambia aqu? es secreta y una ley de 1995 lo blinda. Marlaska (que ir? este martes a su primera comisi?n de secretos desde que es ministro) contar? a los portavoces de los grupos en qué gastos reservados se est? gastando el dinero su departamento. Hablar?, por tanto, de la seguridad del Estado, lo que no puede tener publicidad, como se consagra en la norma citada. De hecho, los diputados que asisten, uno por cada grupo, no pueden contar ni lo que escuchan ni lo que ven. Hacerlo es un delito tipificado en el C?digo Penal.
Ahora bien, diversas fuentes avanzan a El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, que si el ministro no lo aborda antes, los portavoces s? mencionar?n los hechos del 24 de junio en la ciudad aut?noma. De alg?n modo, y aunque el motivo de la comparecencia sea otro, los tr?gicos acontecimientos de entonces sobrevolar?n por la comisi?n de secretos oficiales.
No baja la presi?n
La visita que una delegaci?n de la Comisi?n de Interior del Congreso ha efectuado a Melilla este lunes no ha variado las posiciones pol?ticas de los grupos a los que representan. Vuelven con la que fueron. Era algo previsible, de ah? cierta extra?eza en la oposici?n por la fecha elegida para que el ministro vaya a una comisi?n como la de secretos oficiales.
Jon I?arritu, de EH Bildu, ha reconocido a su regreso a Madrid que la comitiva efectivamente ha podido visionar im?genes y analizar planos y otros datos, y con ello sobre la mesa, su conclusi?n es tajante: ni “un ?pice de duda” de que “la avalancha se produjo en territorio espa?ol al romperse la puerta de entrada al acceso controlado por las autoridades” nacionales.
Adem?s, tal y como consta en las declaraciones enviadas por su partido, hubo “coordinaci?n con las autoridades marroqu?es para que los gendarmes accedieran a la infraestructura de la valla”. A su juicio, pese a la virulencia de la respuesta policial, “no hubo ning?n tipo de auxilio ni de atenci?n” y se procedi? al rechazo de 500 personas. Como novedad, apunta el diputado vasco, el empleo de 65 pelotas de goma.
Resultado para la formaci?n independentista vasca: “El Gobierno no puede seguir actuando como la avestruz”, por lo que ha de “facilitar” la creaci?n de una comisi?n de investigaci?n en el Congreso.
Maria Dantas, de ERC, ha abogado por lo mismo, y Enrique Santiago, de Unidas Podemos, quien ha remarcado la conveniencia de la comisi?n porque el objetivo debe ser evitar la repetici?n de tragedias como la de junio.
Que el representante del socio del PSOE en el Gobierno diga, como dijo este lunes, que “todo apunta” a que los fallecimientos se produjeron en suelo espa?ol no es sino una muestra m?s de la presi?n que la formaci?n “morada” ha decidido ejercer. No es la primera vez que Podemos vierte sobre el ministro de Interior carga cr?tica. La derogaci?n de la ley mordaza sigue pendiente en el Congreso y sin visos, adem?s, de que desbloquee su tramitaci?n, por mencionar un precedente.
El PP al rescate
En conversaci?n con este medio, la diputada del PP Ana Belén V?zquez, integrante de la delegaci?n y portavoz de los populares en la Comisi?n de Interior, ha salido en defensa de la Guardia Civil tras su visita, que ha recordado que estaba programada antes de la emisi?n del reportaje de la BBC. Aunque ha reconocido “la falta de efectivos” disponibles el 24 de junio, la actuaci?n result? “legal y proporcionada”.
Para la diputada, la clave de la gesti?n migratoria se sostiene en tres pilares: la r?brica con Marruecos de acuerdos de repatriaci?n, la aplicaci?n de la ley de extranjer?a y el rechazo en frontera. Todo esto, recalca, fue criticado por el PSOE cuando estaba en la oposici?n, e incluso recurri? las llamadas devoluciones en caliente ante el Tribunal Constitucional. La medida, pese a ello, fue avalada.
V?zquez lamenta “las contradicciones” del Partido Socialista, de las que ahora es v?ctima como partido de gobierno, a?ade. El corolario, en su opini?n, es “el bien resuelto” que dijo el presidente d?as después del desenlace del 24 de junio en la valla.
Por tanto, nada que objetar al papel de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, pero s? a la gesti?n del Gobierno y a la posici?n de sus aliados parlamentarios. Para impedir que la Guardia Civil sea cuestionada en el Congreso, lo que el PP ve tremendamente probable si se formara la comisi?n de investigaci?n, los populares descartan apoyarla. Gamarra dej? una rendija. D?as m?s tarde, cerrada.
El PP argumenta que la responsabilidad tiene un nombre, s?lo uno, y es el de Fernando Grande-Marlaska. No pedir? por el momento su dimisi?n, subraya V?zquez, ni fomentar? la investigaci?n parlamentaria. Pero s? insistir? en la comparecencia del ministro. Ser?a la segunda tras la que protagoniz? ante el pleno en septiembre, precisamente por la tragedia de Melilla. Una crisis que no cesa, pero que al menos esquiva la investigaci?n parlamentaria.
La Mesa del Congreso, en la reuni?n pr?xima, calificar? la petici?n de comisi?n cursada por varios de los aliados parlamentarios. Cuando la Junta de Portavoces debate cu?ndo iniciar el procedimiento en una sesi?n plenaria, PSOE y PP, y previsiblemente Cs y Vox, provocar?n que la solicitud decaiga.
El regreso del exportavoz socialista Héctor G?mez
La comisi?n de control de gastos reservados del Congreso, formada hace apenas seis meses, celebrar? este martes la segunda reuni?n de la legislatura. La primera fue para que la entonces directora del CNI, Paz Esteban, explicara el uso del sistema de intervenci?n de comunicaciones 'Pegasus'. La segunda la protagonizar? el ministro de Interior.
Esta sesi?n, adem?s de las particularidades que entra?a (sesiones a puerta cerrada, obligaci?n de mantener secreto sobre lo que se trate), se caracterizar? por un 'despiste'. El grupo socialista no ha cursado la petici?n para que en el orden del d?a de un pleno se incluya la sustituci?n de Héctor G?mez, exportavoz, por Patxi L?pez, su sucesor desde junio (formalmente desde septiembre). Ha de procederse as? porque la designaci?n de los integrantes de esta comisi?n depende del pleno.
En consecuencia, el diputado canario, pr?cticamente inédito en el Congreso desde su destituci?n, representar? a su partido en la comisi?n. Fuentes del grupo parlamentario destacan a El Peri?dico de Espa?a, del grupo Prensa Ibérica, que no hab?a dado tiempo al cambio y que se har? en breve.
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