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ãÔÇåÏÉ ÇáäÓÎÉ ßÇãáÉ : No fue el “Prestige” el que puso verde a Galicia


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11-05-2022, 11:51 AM
?Corre el Prestige el riesgo de convertirse en un suceso anecd?tico de la historia contempor?nea de Galicia? Que el petrolero se hundiese con estrépito en el mar frente a las costas de la comunidad, ?tuvo repercusiones a largo plazo? ?Dej? alguna cicatriz en la sociedad? ?Impuls? una Galicia m?s verde, una mayor conciencia ambiental? La respuesta ser?a “depende”. De quién responda. Pero, en general, soci?logos coinciden en el diagn?stico:*la tragedia y el activismo ambiental que despert? fueron flor de un d?a.

“Pasou o d?a, pasou a romar?a”, sentencia un refr?n gallego, y as? percibir?an el suceso, a largo plazo, expertos como el profesor de la*Universidade de Vigo*José Dur?n o el soci?logo y ensayista Manuel Pérez R?a, quien convoca a Lampedusa, que todo cambie para que nada cambie, al valorar el fen?meno. Carlos Ferr?s, profesor de Sociolog?a en la*Universidade de Santiago*también acent?a los peros.

http://uc-4u.com/clip/2dadd421-c302-4c32-9916-d5cc72268a9d_16-9-aspect-ratio_default_0.jpg Las im?genes de la cat?strofe del 'Prestige'. | FDV
El Prestige, explica Ferr?s, supuso una “oportunidad” para “promover culturalmente a Galicia y a los gallegos en relaci?n al valor de su naturaleza” y un modelo de desarrollo como “baluarte del cuidado y calidad medioambiental”, pero, matiza, los incendios, la “proliferaci?n” del eucalipto, la “sobreexplotaci?n” de los recursos marinos, la especulaci?n urban?stica, el abandono de miles de aldeas, el envejecimiento demogr?fico o los “grandes déficits” en ordenaci?n del territorio “van en a direcci?n contraria”.

Fue una oportunidad para promover culturalmente a Galicia y a los gallegos en relaci?n al valor de su naturaleza

Ferr?s concede que el tr?gico suceso “deriv? en la toma de conciencia del valor medioambiental de las r?as y de sus recursos naturales”. Sin embargo, y pese a avances reconocidos en gesti?n de residuos, ordenaci?n de recursos o protecci?n natural, se?ala que “no fue suficiente”. “Hoy se percibe un olvido a nivel pol?tico, muy significativo entre las nuevas generaciones que no lo vivieron” y “una sociedad como la nuestra sin memoria es una sociedad sin futuro”, afirma.

“Hoy se percibe un olvido a nivel pol?tico, muy significativo entre las nuevas generaciones que no lo vivieron”

Por la “vinculaci?n con el medio natural” de los gallegos y “la movilizaci?n social m?s grande de la historia” de la comunidad a la que llev? la tragedia, cree que aquello “pudo ser el comienzo de un proyecto pol?tico” basado en “un modelo de desarrollo ecol?gico”. Pudo. Aun as?, insta a tener presente el Prestige en “la memoria hist?rica de Galicia para evitar su olvido, concebir una nueva oportunidad de desarrollo sostenible e impulsar los valores medioambientales”.

Una cuesti?n de memoria

En la memoria también incide José Dur?n, quien deja caer qué ocurrir?a con la Navidad si la gente dejase de celebrarla. Suceder?a, avisa, lo que con el Prestige, que ahora, dice, no va m?s all? de un “recuerdo vago”. “No qued? nada porque no hubo interés en conmemorar nada. Todo aquello que no se conmemora, que no se celebra peri?dicamente y se pone en com?n m?s all? de intereses ideol?gicos acaba desapareciendo”, explica. “Lo que no se recuerda”, insiste, “desaparece de la memoria colectiva”.

“Lo que no se recuerda”, insiste, “desaparece de la memoria colectiva”

“Para recordar ese episodio o cualquier drama social hay que volver a representarlo. Y no veo que cada a?o, cada dos, se haga alg?n tipo de conmemoraci?n que, al margen de ideolog?as pol?ticas, ponga en com?n todo el mundo lo que supuso eso para que nunca m?s se repita. Y cuando eso no se hace as?, la gente olvida. Se recuerda m?s o menos lejanamente. Hay una conciencia vaga, no se traslada a la siguiente generaci?n”, detalla. “Si la cosa se qued? en “Nunca m?is” y en efecto nunca m?s se volvi? a hacer nada m?s es un poco la cuesti?n”, proclama.

“Si la cosa se qued? en “Nunca m?is” y en efecto nunca m?s se volvi? a hacer nada m?s es un poco la cuesti?n”

En aquel momento s? hubo, admite, “un despertar de una conciencia social, pero también estuvo muy mediatizado pol?ticamente”. De hecho, la movilizaci?n fue “incre?ble”, concede, y se pregunta si eso no hizo suponer “de forma err?nea” que aquello iba a tener consecuencias. “Nunca m?s”, a?ade, fue flor de un d?a. Y a?ade que aunque Galicia s? gan? en todo este tiempo una mayor conciencia ecol?gica es porque la sociedad gallega est? en Occidente, donde ese fen?meno, esa “sensibilizaci?n”, va a m?s.

Polycommander, Urquiola, Andros Patria, Mar Egeo... Manuel Pérez R?a recuerda que el que un petrolero, o un buque con carga peligrosa –como el “Cas?n”– tuviese un accidente frente a la costa gallega no era “tan inusual”. Por qué, sin embargo, el Prestige suscit? esa gran movilizaci?n es, a su juicio, la cuesti?n. El medio ambiente, explica, es un recurso “c?modo y flexible” para todo tipo de pol?ticas; en ese momento fue utilizado “convenientemente” y exist?a un caldo de cultivo. El medio ambiente, la naturaleza, hab?a pasado al “imaginario colectivo” tras la dictadura como un concepto “cultural y rom?ntico”, cuando generaciones previas “no admiraban el mar por la belleza, sino que era un trabajo”. Ese cambio coincide con generaciones del baby boom socializadas en EGB y BUP, en dibujos animados y documentales de La 2. “Eso confluye y ayuda a movilizar”, indica, y aparte los medios de masas viv?an su “época m?s extraordinaria”.

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Pero, ?qué qued? de todo aquello? Pérez R?a cita, sobre todo, dos consecuencias “materiales”. Una de ellas, indica, es el puerto exterior de A Coru?a, sobre el que, apunta, habr?a que preguntarse desde el punto de vista medioambiental y de sostenibilidad, y la segunda, el Plan Galicia, después sustituido por la promesa del AVE. De lo otro, poco. La movilizaci?n, sostiene, “no tuvo ning?n efecto pol?tico” en las municipales y, en lo que respecta a la concienciaci?n medioambiental, si la hay, alega, “es porque el mundo fue cambiando y Galicia también fue insert?ndose” en ese cambio, adem?s de las consignas impuestas por Europa, incide, “pero no porque el Prestige fuese un antes y un después”.

Emociones “vol?tiles” y efectos pol?ticos a juego

Manuel Fraga apuntaba en sus memorias al Prestige como principal culpable de que una “mayor?a justa” le arrebatase el Gobierno de la Xunta en 2005. No obstante, el gobierno del Bipartito no sobrevivi? para contar una segunda legislatura y el PP vuelve a ser en la actualidad la fuerza mayoritaria en Galicia. El impulso de aquel cambio fue ef?mero y tuvo sobre todo relevancia en el seno del PP a efectos internos.

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Para el polit?logo y economisa Miguel Anxo Bastos, la “erosi?n” de entonces al PP no solo se debi? al petrolero, que s? “inici? las movilizaciones”, sino que se sum? a la “coyuntura pol?tica espa?ola”, donde el PP, explica, sucumbi? a la guerra de Irak y el atentado del 11-M. La prueba, a su juicio, es que en las municipales inmediatamente posteriores al suceso “al PP no le fue tan mal”. De hecho, comenta c?mo avanz? en A Costa da Morte, una de las ?reas m?s afectadas. Adem?s, incluso dicha “erosi?n fue relativa”, porque en el tr?nsito de los comicios auton?micos el PP “solo”, enfatiza, perdi? un diputado. “No es una erosi?n tan brutal; adem?s, cuando pierde Fraga, est? el zapaterismo en alza”, a?ade. Sin embargo, destaca que la tragedia “s? tuvo consecuencias en la pol?tica del PPdeG”, al ser José Cui?a, “el delf?n” de Fraga, apartado de su cargo. Su desaparici?n de la ecuaci?n conllev? la “aparici?n de Feij?o y empez? a visualizarse la posibilidad de sucesi?n”, explica. “En pol?tica las tragedias se olvidan pronto, ?quién se acuerda ya de la pandemia?”, concluye el también profesor de la Universidade de Santiago.

"?Qué ocurrir?a si la tragedia sucesiese hoy en d?a? A su juicio, tendr?a “otro recorrido” porque algunas de las declaraciones “equivocadas” de entonces “seguramente ser?an carne de meme e incluso habr?a alguna recogida de firmas en change.org”

De otra manera, pero en la misma l?nea, lo explica el experto en Comunicaci?n pol?tica y profesor universitario Pablo V?zquez Sande. “La decisi?n de voto tiene una fuerte carga emocional y, en muchas ocasiones, las emociones son altamente vol?tiles y cambiantes entre un momento y otro”, explica. De ah? que cuando los gallegos acudieron a las urnas en 2005, el Prestige, sostiene, era una “realidad m?s inmediata en el tiempo” que en 2009, cuando el PP recuper? la Xunta. “Para ese final de la primera década del siglo XXI”, detalla, “la campa?a activada por el PPdeG trabajaba las emociones de la indignaci?n centradas en las acusaciones del despilfarro y del doble coste que supone un gobierno bipartito”, del mismo modo, a?ade, que tanto PSdeG como BNG “intentaron reflotar la cuesti?n del Prestige en la campa?a de 2012”. Adem?s, indica, existe un factor contextual “diferencial” entre entonces y ahora que invita a considerar, que es la “inexistencia” en aquel 2022 de las redes sociales y de las plataformas de mensajer?a instant?nea, “grandes catalizadores del malestar que se puede generar en la sociedad”. ?Qué ocurrir?a si la tragedia sucesiese hoy en d?a? A su juicio, tendr?a “otro recorrido” porque algunas de las declaraciones “equivocadas” que se escucharon entonces “seguramente ser?an carne de meme e incluso habr?a alguna recogida de firmas en plataformas como change.org”. “Estos dos ejemplos, sumados al comportamiento m?s activo, y activista, en redes sociales, seguramente ayudar?an a la pervivencia durante m?s tiempo enel acervo popular gallego”, sostiene.



ÃßËÑ... (https://www.sport.es/es/noticias/sociedad/prestige-puso-verde-galicia-78163415)

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